Falta de incidentes y servicios mínimos protagonizan la huelga de ferrocarril
- Los sindicatos cifran el seguimiento en un 90%, Fomento en un 20%
- A penas ha habido incidentes durante la jornada de huelga
- Se ha convocado por la liberalización del transporte de viajeros
La huelga convocada este viernes en Renfe, Adif y Feve se está desarrollando con normalidad y prácticamente sin incidentes, mientras los servicios mínimos decretados -el 75 % de los servicios de los trenes AVE y de larga distancia y el 60 % de los de Cercanías- se están cumpliendo.
Esta huelga de 24 horas, que comenzó la pasada madrugada, ha sido convocada por los sindicatos UGT, CCOO, CGT, Semaf, Sindicato de Circulación y Sindicato Ferroviario para protestar contra la liberalización del transporte de viajeros.
Fuentes de los sindicatos han afirmado que alrededor del 90 % de los trabajadores que no tenían que cumplir con los servicios mínimos han secundado los paros, un porcentaje que aumenta al 95 % en el colectivo de conductores, según un portavoz del Sindicato Español de Maquinistas y Ayudantes Ferroviarios (Semaf).
Desde el Ministerio de Fomento se asegura que el seguimiento de la huelga ha sido de un 20 % en la jornada, mientras que el secretario de Estado de Infraestructuras, Transporte y Vivienda, Rafael Catalá, ha destacado este mediodía "el funcionamiento razonable de los servicios ferroviarios".
"Las personas que están en servicios mínimos han ido a trabajar. De los que pueden no ir a trabajar, el 20 % no lo han hecho", ha afirmado, a la vez que ha destacado "la normalidad" y el "funcionamiento razonable de los servicios ferroviarios, tal y como se había diseñado".
A penas ha habido incidentes
De hecho, apenas se han registrado incidencias en la red ferroviaria; tan solo en algunos trenes, como uno de cercanías en Cataluña y un tren hotel Madrid-París.
En la madrileña estación de Atocha, se ha producido algún enfrentamiento entre manifestantes y agentes policiales cuando los primeros intentaban acceder a la zona de trenes de Cercanías.
Durante su comparecencia, Catalá ha insistido en lo "impropio" de convocar una huelga en un contexto de negociación y en el inicio de fin de semana, a principios de agosto, lo que causa "un daño importante", a su juicio, en la economía y la imagen de España, en el turismo y en las propias empresas.
Renfe estima que perderá entre 3 ó 4 millones de euros sólo por los billetes anulados o que no se vendan.
Los sindicatos acusan a Fomento de mentir
Los sindicatos han acusado a Fomento de mentir cuando dice que ha intentado negociar hasta el último momento para evitar el paro y han calificado los servicios mínimos de "los más abusivos en la historia de las relaciones laborales en el sector ferroviario".
En las estaciones de tren de distintas ciudades españolas se han sucedido los actos de apoyo de decenas de trabajadores a la huelga y de crítica a la liberalización del sector.
El portavoz de Fomento del Grupo Parlamentario Socialista, Rafael Simancas, ha dicho que la "liberalización exprés" del Gobierno en el sector "sólo conducirá a un servicio peor, más caro y con miles de trabajadores despedidos" y es "el primer paso para su privatización".
También se ha pronunciado sobre la huelga el secretario federal de Transporte, Energía y Medio Ambiente de IU y diputado autonómico aragonés Adolfo Barrena, quien ha calificado de "estacada mortal" la liberalización del sector y ha señalado que "si se aplican solo criterios economicistas a los servicios públicos el resultado puede ser el cierre".
Servicios mínimos
El Ministerio de Fomento ha impuesto unos servicios mínimos que garanticen el 75% de los trenes de alta velocidad y larga distancia, por lo que solo serán cancelados 80 y circularán 246.
Los trenes interurbanos tienen que realizar unos servicios mínimos del 67%, por lo que circularán 380 de los 567 y se cancelan 187.
Para los trenes de mercancías se garantizan el 19%, así que 38 prestarán servicio de los 196 afectados.
En cuanto a Cercanías Madrid, en hora punta circularán el 60% de los trenes y el resto de horario el 42%, mientras que en los demás núcleos urbanos los servicios mínimos serán un 2% menos.
Los sindicatos han denunciado que estos servicios mínimos “son los más abusivos en la historia de las relaciones laborales en el sector ferroviario”.
Sin embargo, el secretario de Estado de Fomento, Rafael Catalá, ha declarado que son “equiparables” respecto a otras huelgas y “equilibrados” con el derecho a la movilidad y trabajo.
Una huelga "un poco impropia", según Fomento
En declaraciones a RNE, Catalá ha pedido responsabilidad a los sindicatos por las pérdidas económicas que generará a Renfe, que ha calculado que serán entre tres o cuatro millones de euros por los billetes que se anulan o no se venden.
El secretario de Estado de Fomento ha asegurado también que el Gobierno quiere hacer la reforma del sector ferroviario de forma negociada, y ha considerado "un poco impropia" y "un poco inadecuada" la huelga de 24 horas convocada por los sindicatos "en un contexto de negociación".
"Les hemos ofrecido un proceso de diálogo, de concertación. Hemos planteado que no queremos tomar decisiones unilaterales, sino concertadas, porque nos parece que es la mejor manera de abordar las reformas", ha señalado Catalá.
Catalá ha considerado "un poco impropia" la huelga, ya que no se han roto las negociaciones: "yo entiendo el derecho a la huelga, por supuesto, pero en un contexto de negociación parecería que no es necesario llegar a medidas de presión".