Primeros acuerdos entre los dirigentes presentes en la cumbre Celac-UE
- Los mandatarios respaldan las inversiones y el comercio internacional como "fuente de desarrollo sostenible"
- El anfitrión de la cumbre, Piñera: "Esta cumbre no es sólo útil, es necesaria"
Los jefes de Estado y Gobierno de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) y de la Unión Europea (UE) han reconocido la importancia de la seguridad jurídica para garantizar las inversiones en otros países.
Así se refleja en la declaración final de la primera cumbre Celac-UE, celebrada en la capital chilena, donde en torno a 40 mandatarios de ambos continentes se congregaron en medio de una coyuntura dominada por la crisis europea y el avance económico de los países de América Latina.
El texto de la declaración deja claro que las dos regiones reconocen la importancia de marcos reguladores "estables y transparentes" que proporcionen "certidumbre legal para los operadores económicos" en el contexto de impulsar inversiones de calidad social y medioambiental. Además, los mandatarios expresaron su respaldo a las inversiones y el comercio internacional como fuente de desarrollo sostenible.
Este resultado se dio pese a la insistencia de Venezuela de suavizar hasta el último minuto la alusión al concepto "seguridad jurídica", algo a lo que se opusieron la mayoría del resto de estados latinoamericanos, dijeron a Efe fuentes diplomáticas presentes en la negociación.
"Nos comprometemos a mantener un clima favorable a los inversores, reconociendo en cualquier caso el derecho de los países a legislar para cumplir los objetivos de sus políticas nacionales, de acuerdo con sus compromisos y obligaciones internacionales", destaca el texto aprobado por los mandatarios.
Van Rompuy y Durao Barroso, satisfechos por la cumbre
La declaración se conoció horas después de la inauguración de la Cumbre de Santiago, donde el presidente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, garantizó que la región que representa ha tomado medidas para superar la crisis del euro.
"Les aseguro que la UE ha tomado acción resolutiva para solventar la crisis en la eurozona", ha destacado Van Rompuy, al reconocer, no obstante, que "aún queda mucho por hacer para profundizar en nuestra unión económica y financiera".
A su turno, el presidente de la Comisión Europea, José Manuel Durao Barroso, ha afirmado que "la crisis global y sus ramificaciones han puesto de manifiesto que ninguna nación puede prosperar a costa de otra". Ha recordado que Europa ha ayudado a crecer a América Latina en la última década y ha reconocido "un momento complejo del ciclo económico".
Mientras que en Europa "las acciones comienzan a dar sus frutos, aunque con un crecimiento marginal en 2013", América Latina crece "pero se enfrenta a otros problemas como la desigualdad", ha puntualizado Durao Barroso sobre la coyuntura actual.
Ambos, Van Rompuy y Durao Barroso, celebraron además que por primera vez los latinoamericanos y caribeños participen unidos en una cumbre con la UE.
"Valoramos nuestra relación con la Celac profundamente, porque sabemos que tenemos en ustedes un socio fuerte", ha afirmado el presidente del Consejo Europeo.
Piñera propone "una nueva alianza estratégica"
En la inauguración, el presidente de Chile y anfitrión, Sebastián Piñera, ha realizado un llamamiento a superar el asistencialismo para construir una verdadera estrategia de cooperación entre Europa y Latinoamérica.
Propuso así "crear una nueva alianza estratégica, con una relación menos vertical y más horizontal, evolucionando desde la asistencia hasta la verdadera cooperación".
"Esta cumbre no es sólo útil, es necesaria; no sólo es oportuna, es urgente", ha apuntado el anfitrión del encuentro, que culminará este domingo.
En forma de aliento, Piñera ha afirmado además que "si bien la Unión Europea llega a esta cumbre en medio de una dolorosa crisis", sigue siendo "la economía más grande del mundo", con un valioso legado cultural, científico y de respeto a la democracia y los derechos humanos.
Lo más destacado de esta cumbre es que ha congregado en la capital chilena a un tercio de los países del mundo, que reúnen a 1.100 millones de personas y suponen un tercio del PIB mundial. La UE es además el principal inversor en América Latina, con un 43 % del total, fondos que proceden en su mayoría de España, Reino Unido y Francia, y se destinan principalmente a Argentina, Brasil y Chile.