'Hitchcock', los secretos del 'maestro del suspense' al descubierto
- La película se estrena este viernes 1 de febrero en las salas españolas
- Antonhy Hopkins, Helen Mirren y Scarlett Johanson encabezan el reparto
- La cinta narra el rodaje de Psicosis y la relación de Hitchcock y Alma Reville
FICHA TÉCNICA
Título: Hitchcock
Título original: Hitchcock (Alfred Hitchcock and the Making of 'Psycho')
Año: 2012
Duración: 98 min.
País: Estados Unidos
Director: Sacha Gervasi
Guion: John J. McLaughlin, Stephen Rebello (Libro: Stephen Rebello)
Música: Danny Elfman
Fotorgafía: Jeff Cronenweth
Reparto: Anthony Hopkins, Helen Mirren, Scarlett Johansson, James D'Arcy, Jessica Biel, Toni Collette, Danny Huston, Michael Stuhlbarg, Kurtwood Smith, Richard Portnow, Ralph Macchio, Michael Wincott, Frank Collison
Probablemente Alfred Hitchcock sea uno de los cineastas más grandes de todos los tiempos y, también, uno de los peores tratados por la industria de Hollywood en lo que a reconocimientos se refiere: nunca llegó a ganar el Oscar a mejor director -estuvo cinco veces nominado- y solo el Instituto de Cine Americano (AFI) le dio un premio a toda su carrera en 1979, justo un año antes de morir.
También tarde, casi 33 años después de su muerte, llega el biopic sobre su vida. Pero más vale tarde que nunca y, ya que no se puede arreglar lo del Oscar a mejor director -el premio honorífico en memoria de Irving G. Thalberg de la Academia de Hollywood, que recibió en 1968, no es una estatuilla de Oscar-, la película Hitchcock salda otra de las grandes deudas con el 'maestro del suspense' al plasmar al fin uno de los grandes guiones aun no escritos.
La dirección de Hitchcock, que se estrena este viernes 1 de febrero en las salas españolas, corre a cargo de Sacha Gervasi, que dirige su primer largometraje tras el documental Anvil: El sueño de una banda de rock) y su reparto lo encabezan Antonhy Hopkins (oscarizado por El silencio de los corderos, tras la gran barriga de Alfred, y Helen Mirren (ganadora de un Oscar por La reina), en el papel de su esposa, Alma Reville.
La película se centra en el rodaje de Psicosis, la que se ha convertido en una de sus más grandes y exitosas películas y de las más influyentes de la historia del cine. Pero, en aquel entonces, en 1960, fue considerada para su productora, Paramount, un película de terror aparentemente de baja categoría para un director que estaba en la cima de su carrera y que tenía 46 títulos a sus espaldas. Como nadie apoya el proyecto, Hitchcock decide financiarla él mismo y rodarla con un equipo barato de televisión.
Hitchcock y Alma Reville
Pero Hitchcock es, sobre todo, el relato de su historia de amor con Alma Reville y de la influencia, para muchos desconocida, que la mujer con la que estuvo casado durante 54 años, hasta su muerte, tuvo en su carrera y en su gran obra cinematográfica.
"Les ruego que me permitan mencionar el nombre de sólo cuatro personas, que me han brindado su más profundo afecto, compresión y aliento, además de su permanente colaboración. El primer nombre corresponde a una montadora, el segundo a una guionista, el tercero a la madre de mi hija Pat y el cuarto es el de una cocinera tan extraordinaria que es capaz de hacer milagros en la cocina. Y el nombre de todas ellas es Alma Reville".
Estas fueron las palabras que Alfred Hitchcock le dedicó a su esposa al recoger el premio de la AFI y que son muestra de esa influencia. Sin Alma Reville, probablemente el director británico no hubiese sido el 'maestro del suspense'.
Por sus manos pasaban los guiones y el montaje de las películas de su marido -fue ella la que se dio cuenta de que Janet Leigh (interpretada en la película por Scarlett Johansson) pestañeaba cuando yacía muerta sobre el suelo del baño-; era su más estrecha colaboradora y su crítica más feroz, pero su nombre nunca apareció en los títulos de crédito de las más de 50 películas que rodó el británico.
Htichcock deja patente todo esto gracias a la siempre espléndida Helen Mirren, pero pasa de puntillas por un tema que habría dado un gran juego cinematográfico y que convierten al biopic en una oportunidad desaprovechada: la obsesión sexual de Alfred Hitchcock por las mujeres, y en concreto, por sus actrices fetiches, las "rubias Hitchcock".
También flojea un poco y parece un poco forzados los 'flashes' en los que Ed Gein (interpetrado por Michael Wincott), el asesino en serie en el que está basado el personaje de Norman Bates, se entremezcla en las pesadillas de Hitchcock.
Los secretos de Hitchcock
Pese a todo, Hitchcock está muy lograda en fotografía y ambientación y supone una auténtica delicia para los cinéfilos el descubrir los secretos del rodaje de Psicosis, sobre todo el cómo se gestaron los que probablemente sean los tres minutos más famosos de la historia del cine, la escena de la ducha, que han marcado un antes y un después en el thriller y el cine de terror (RTVE.es te ofrece en exclusiva, sobre estas líneas, un vídeo de la película sobre el montaje de esa escena).
Ver cómo Hitchcock tuvo que manejarse con los censores del Código de Producción Cinematográfica para que esa escena superara la censura, no solo por el desnudo de Janet Leigh, sino porque era la primera vez que una película norteamericana mostraba en pantalla ¡¡un inodoro!! O saber que el director británico no pensaba incluir música en esa secuencia hasta que Bernard Hermann le convenció con sus violines agudos.
Y es una delicia ver a Hopkins meterse literalmente en la piel -la película tiene una nominación al Oscar al mejor maquillaje- del que es su director de cine favorito. Para Gervasi, solo el reputado actor británico podía dar vida a Hitchcock y, de hecho, les dijo a los productores que si no podían contar con él "no deberíamos ni molestarnos en hacer la película".
No obstante, el logro de Hopkins y de la película en sí no es el parecido físico entre el actor y el director al que interpreta, sino el ser capaz de captar su personalidad y su peculiar sentido del humor. Para ello no hay más que comparar copia y original:
Y también es un placer descubrir los pequeños detalles 'hitchconianos' que pueblan la cinta a modo de homenaje, con cameo incluido de Sacha Gervais al más puro estilo del 'maestro del suspense'.