La Policía detiene a 33 jóvenes en dos operaciones contra bandas latinas en Madrid
- Han sido arrestados 11 presuntos miembros de los Dominican Don't Play
- Se les acusa de homicidio en grado de tentativa y tres han ingresado en prisión
- Los otros 22, de los Blood, se les ha detenido por amenazas, lesiones y robo
Golpe policial a las bandas latinas en Madrid. La Policía Nacional ha detenido en dos operaciones distintas a 33 jóvenes como presuntos integrantes de los Blood y los Dominican Don't Play por diferentes delitos.
En la operación desarrollada contra los Blood, una banda latina de origen norteamericano que en los últimos meses había intensificado la captación de menores, han sido arrestadas 22 personas, siete de ellos menores, del llamado "el caserío" en el barrio madrileño de San Blas. Todos ellos han pasado a disposición judicial como presuntos autores de varios delitos de asociación ilícita, amenazas, lesiones y robo con violencia e intimidación.
En una segunda operación, han sido detenidos 11 miembros del grupo Dominican Don't Play, seis de ellos menores de edad, por la agresión de un chico de 14 años el pasado 8 de febrero. Todos ellos, conocidos como el 'coro (grupo) de Villaverde', han sido puestos a disposición del juez como presuntos autores de homicidio en grado de tentativa y tres de ellos han ingresado en prisión, según informa la Policía en una nota de prensa.
Estas dos operaciones en la capital madrileña se unen a la desarrollada la semana pasada en Cataluña contra los Black Panthers, que se saldó con más de una veintena de detenidos por asociación ilícita, tráfico de drogas, retención ilegal, extorsión y tentativa de homicidio.
El líder de los Blood, un joven de 19 años
La operación que ha permitido desarticular "el caserío" de los Blood, compuesto por 22 jóvenes y ubicado en el madrileño barrio de San Blas, donde esta banda de origen norteamericano y con casi nula presencia en España hasta el momento había adquirido cierta notoriedad en los últimos meses, arrancó hace meses.
Los agentes constataron que el grupo estaba liderado por Robert Joe L. A. de 19 años. Los miembros del capítulo o set habían intensificado la captación de menores de edad para ser integrados en la banda y aumentar el número de jóvenes obligados al pago de cuotas semanales.
Los investigadores también constataron que "el caserío" presentaba los rasgos característicos de toda banda latina organizada: estructura piramidal, reparto de roles, jerarquía férrea, castigos por incumplimiento de normas, literatura propia, rituales de ingreso, pago de cuotas semanales, pruebas de valor y el color rojo como signo externo de la banda.
La pasada semana, y tras identificar a todos los integrantes, los agentes establecieron el correspondiente dispositivo y arrestaron a los 22 miembros de "el caserío", entre ellos el líder del grupo y siete menores, informa Efe.
En los registros, los policías han intervenido numerosas armas como machetes, cuchillos, hachas o bates de béisbol con clavos incrustados.
Todos ellos ya han sido puestos a disposición judicial como presuntos autores de varios delitos de asociación ilícita, amenazas, lesiones y robo con violencia e intimidación.
Tres detenidos, en prisión por homicidio en grado de tentativa
La operación contra los Dominican Don't Play se inició el pasado 8 de febrero a raíz de la brutal agresión a un menor por un numeroso grupo de jóvenes de origen latino en las inmediaciones de unas canchas deportivas situadas en la calle Villalonso, del barrio madrileño de Villaverde.
La víctima sufrió lesiones de extrema gravedad en ambas piernas y en un brazo que le dejarán secuelas de por vida, según relata la nota de la Policía Nacional.
Los autores de la agresión, que portaban machetes y cuchillos, gritaron frases propias de la banda a la que pertenecen, tales como "AD3" o "Amor de tres", y la rápida intervención de varios radiopatrullas de seguridad ciudadana de la comisaría de Usera-Villaverde permitió la detención "in situ" de tres de los presuntos autores.
Gestiones posteriores permitieron identificar al resto de los agresores, que fueron arrestados en los días siguientes.
En total han sido 11 los detenidos, que conformaban el "coro de Villaverde" -célula básica de estructura de los DDP- y tenían su base de operaciones en un domicilio situado en el distrito de Villaverde donde residía su líder, Pedro Pablo S.S. de 21 años.
Los 11 detenidos, seis de ellos menores, ya están a disposición judicial como presuntos autores de un delito de homicidio en grado de tentativa. Tres de ellos han ingresado en prisión.
Este no es el primer golpe contra los Dominican Don't Play. En noviembre de 2009, la Policía Nacional y la Guardia Civil detuvo a 40 integrantes de esta banda latina en una operación con la que se dio por desarticulados tres de los seis grupos que había en la Comunidad de Madrid.