El futuro de Benedicto XVI a partir de la renuncia

• A las 17:00 saldrá hacia Castel Gandolfo y a las 20:00 dejará de ser papa
• El monasterio Mater Ecclesiae será su residencia definitiva 
• El anillo del Pescador no será destruido, sino anulado con una marca

El futuro de Benedicto XVI a partir de la renuncia

El hasta ahora papa Benedicto XVI hará efectiva la renuncia al papado en la tarde de este jueves, como anunció el pasado 11 de febrero.

A partir de las 17 horas se trasladará a su residencia provisional, el palacio de Castelgandolfo, para retirarse de forma definiva y dedicarse a la oración y la meditación bajo el título de "papa emérito". Además, cambiará parcialmente su indumentaria y dejará el anillo del Pescador.

Los cardenales serán convocados por carta el viernes 1 de marzo para reunirse y decidir la fecha del cónclave que dará lugar a la elección del nuevo papa.

Protocolo del fin del pontificado

No habrá ceremonia alguna. Tras despedirse de los cardenales por la mañana en la Sala Clementina, a las 16:55 está previsto el saludo con el cardenal secretario de Estado, Tarcisio Bertone, en el patio de San Dámaso. A partir de ahí, Benedicto XVI se desplazará en automóvil hasta el helipuerto, donde el cardenal decano, Angelo Sodano, le despide a las 17:00. Durante el vuelo en helicóptero privado, todas las campanas de Roma sonarán en su honor.

El cardenal Giuseppe Bertello, gobernador del Vaticano, recibirá a Joseph Ratzinger en lo que será su residencia provisional, el palacio de Castelgandolfo. Una vez allí, a las 17.30 está previsto que se asome al balcón con vistas a la Plaza Mayor de la Villa para saludar a sus nuevos vecinos.

El símbolo más visible del fin del pontificado será la retirada de la Guardia Suiza a las 20.00 de la puerta del palacio de Castelgandolfo. En ese momento Benedicto XVI dejará de ser la máxima autoridad de la Iglesia Católica, dando comienzo a la sede vacante, el período durante el cual se ponen en marcha los procesos de elección del nuevo papa.

Tarcisio Bertone, cardenal camarlengo, gobernará el Vaticano durante este periodo y se encargará de dirigir el Colegio Cardenalicio, en el cual se llevarán a cabo los preparativos para el cónclave.

A partir de su renuncia hay varias posibles fórmulas para referirse a Joseph Ratzinger: Papa emérito, santidad y romano pontífice emérito. El título papa emérito no conlleva ninguna función oficial en la Iglesia, al igual que no implica ningún privilegio especial, sino que se trata tan sólo de una mención honorífica.

Actividad en el retiro

Joseph Ratzinger permanecerá al servicio de la Iglesia, como él mismo ha afirmado. Sencillamente adecuará su actividad a las exigencias de la edad y la salud.

En su retiro dedicará su vida a la lectura, la oración y la meditación. En su última audiencia general se ha referido a la Biblia para afirmar que "Dios le llama a subir al monte para encontrarse con él", dedicarse aún más a la plegaria y la meditación para después trasladarlo al resto de la comunidad cristiana.

No hará más viajes oficiales, ni conferencias, ni recibirá visitas, ha asegurado en su última aparición pública.

El monasterio Mater Ecclesiae, que está siendo remodelado, será la residencia definitiva. Conservará la biblioteca, el comedor y la capilla, tal y como la han mantenido sus anteriores visitantes, las monjas de la Orden de la Visitación de Santa María.

Mater Ecclesiae se encuentra en un rincón tranquilo de los jardines vaticanos y construido por orden de Juan Pablo II. El hecho de que mantuviera su residencia dentro de los límites del Vaticano causó división de opiniones, ya que se trata de una situación novedosa.

Una vez finalizada la adaptación del edificio contiguo, en el que se encuentran las celdas, Benedicto XVI se trasladará allí desde su residencia provisional, Castelgandolfo. Le acompañará la "familia pontificia", compuesta por cuatro consagradas y su secretario personal, monseñor Gänswein.

A esta nueva residencia el papa emérito se llevará sus documentos privados, mientras que los relativos al pontificado serán archivados en el Vaticano.

Mantendrá la sotana blanca, pero cambiará el calzado

En su nueva etapa, Su Santidad modificará ligeramente su forma de vestir. Seguirá vistiendo la sotana blanca, pero no la esclavina que cubre los hombros ni el fajín.

Renovará también su calzado. En lugar de los mocasines rojos tradicionales, cuyo origen se encuentra en la simbología bizantina, el papa emérito se calzará un modelo de zapatos de color marrón que recibió como regalo de un artesano mexicano.

De hecho, Armando Martín Dueñas, el autor de dicho calzado, ha asegurado que ya le tiene preparados tres pares más, ya que "es un honor saber que el santo padre se siente tan cómodo y le gustan tanto".

Están fabricados a partir de piel de becerro y de cabra y en su elaboración han participado varios centros de investigación, con el fin de hacerlos lo más ergonómicos posible.

El anillo del Pescador no será destruido, sino anulado

El anillo de oro que ha llevado el papa durante su pontificado contiene una representación de San Pedro pescando, en una barca y lanzando la red sobre tres peces. Sobre esta escena se puede leer el nombre Benedicto. Hacía más de un siglo que ningún pontífice elegía dicha simbología para su anillo.

Esta joya no será destruida, como ocurre con el fallecimiento de los papas, sino que será inutilizada por medio de una raya o una cruz, de modo que no podrá ser utilizada como sello para documentos papales, según ha explicado el portavoz del Vaticano, Federico Lombardi.

En cualquier caso, según ha especificado Claudio Fronchi, el autor de la pieza, Benedicto XVI no lo ha usado como sello, sino como muestra de aspectos simbólicos.

A partir de su anulación, probablemente sea conservado para la colección del Oficio de la Ceremonia Litúrgica en el Vaticano.