El Curiosity para su actividad por una llamarada solar que se acerca a Marte
- El martes se detectó la llamarada procedente del Sol
- Aunque en principio no existe amenaza, la NASA ha parado por precaución
- No se conoce la fecha en que el Curiosity retomará su actividad
La agencia espacial estadounidense, la NASA, ha puesto el rover Curiosity en 'modo de espera', como medida de precaución por una masiva eyección de masa coronal (CME) -es decir, una onda de radiación y viento solar que se desprende del sol- y que se dirige a Marte.
Según recoge Europa Press, el director de la misión, Richard Cook, ha señalado que el equipo "está siendo cuidadoso" y ha destacado que, aunque Curiosity "duerma", Opportunity y Mars Express siguen estudiando el planeta rojo.
La CME fue detectada por los científicos de la agencia espacial el pasado martes. El Sol arrojó una formación de partículas cargadas y radiación en dirección a Marte, y también una nube de gas a muy altas temperaturas que viaja en la misma dirección a una velocidad de más de tres millones de kilómetros por hora.
Los expertos han explicado que, cuando una CME se dirige hacia la Tierra puede causar en el planeta el fenómeno meteorológico conocido como 'tormenta geomagnética', que, es capaz de afectar a los sistemas eléctricos o de telecomunicaciones.
Dado que Marte carece de campo magnético planetario, no puede experimentar semejante tormenta y no se espera que sea una amenaza para las naves espaciales y vehículos de exploración. Sin embargo, los investigadores han decidido seguir atentamente el acercamiento de la CME, "por precaución".
El pasado lunes, la NASA anunció que la actividad del rover se retrasaba una semana por un fallo técnico, concretamente en su memoria. Este suceso se detectó cuando se iba a realizar el análisis del primer polvo de roca recogido en el planeta rojo.
La NASA no ha confirmado si la fecha de reinicio continúa siendo la misma, o si la CME retrasará más el comienzo de la actividad de Curiosity. El objetivo de la misión es, recordemos, buscar materia orgánica en Marte para poder demostrar que en alguna ocasión el planeta reunió las condiciones para acoger vida.