Orgullo y preocupación entre los chipriotas tras el rechazo del Parlamento a la tasa a los depósitos
- "Ya sabíamos de las dificultades, pero es nuestro deber luchar", aseguran
- Muchos chipriotas buscan la solución fuera de la Unión Europea
- "Hay alternativas, no existe solo la troika, hay países terceros como Rusia"
Los chipriotas han recibido con orgullo el rechazo de su Parlamento este martes al impuesto a los depósitos bancarios por el que se buscaba recaudar 5.800 millones de los 7.000 millones de euros que debe aportar Chipre a cambio del rescate europeo por valor de 10.000 millones. El Gobierno de Nicosia, que buscaba salvar el pacto, había propuesto suavizar la tasa: no se tocarían los depósitos inferiores a 20.000 euros, pero ninguna formación lo apoyó.
"El rechazo de nuestros representantes me provocó un sentimiento de alivio, de orgullo" ha comentado a Efe, Andros Tsekuras, de 40 años, que como muchos otros chipriotas consideran el impuesto sobre los depósitos como "algo ilegal que crea la inseguridad no solo a Chipre sino al resto de Europa".
“Es nuestro deber luchar y permanecer unidos“
"Ya sabíamos de las dificultades, pero es nuestro deber luchar y permanecer unidos, pase lo que pase. Por lo demás, mal de muchos, consuelo de tontos", ha dicho este hombre tras sacar dinero del cajero automático.
Los cajeros automáticos parecen haberse convertido en estos momentos en un oasis para los chipriotas, por ser la única fuente de donde sacar dinero, pues los bancos están cerrados y continuarán cerrados hasta el próximo martes, según ha informado la portavoz del Banco Central, Aliki Stilianu.
Búsqueda de alternativas
Ahora Chipre busca urgentemente soluciones para salvar su economía. El presidente de Chipre, Nicos Anastasiadis, y los líderes de los partidos han decidido elaborar un plan B para buscar vías alternativas para cubrir la aportación de 7.000 millones de euros procedentes de los depósitos bancarios exigida por el Eurogrupo a cambio del rescate.
“Hay alternativas, no existe solo la troika“
"Hay alternativas, no existe solo la troika, hay países terceros como Rusia, que puede ser solución para nosotros", ha opinado Lefkios Eleftheríu, un ingeniero de Nicosia que ha expresado su preocupación por una posible quiebra de su país.
"Me preocupa la idea de una quiebra, pero no creo que nos vayan a dejar en la estacada, visto que se trata de una cantidad muy pequeña en comparación a los demás rescates. Temo también por otros países europeos que son países mucho mas grandes de nosotros", ha dicho.
Rusia, una opción que cobra fuerza
Muchos chipriotas confían en una ayuda rusa debido a los lazos estrechos que unen ambos países desde hace muchos años, y esperan el regreso del ministro de Finanzas, Mijalis Sarris, de su viaje a Rusia con la esperanza de escuchar "buenas noticias". "Ojalá el ministro venga con noticias que nos ayuden", ha señalado a Efe Andreas, un desempleado mientras jugaba al backgammon en un bar de Nicosia, y que ha añadido que está muy orgulloso del rechazo al plan.
Sarris viajó este martes a Moscú para pedir una prórroga de cinco años y una rebaja de los intereses sobre el crédito de 2.500 millones de euros que Rusia concedió a la isla en 2011.
La imposición a los depósitos bancarios perjudica especialmente los intereses de Rusia, cuyo capital en la isla se estima en unos 20.000 millones de dólares (15.474 millones de euros). A los rusos les corresponde más de una quinta parte de todos los depósitos en los bancos de Chipre, que suman unos 91.500 millones de dólares (70.544 millones de euros).
"Las alternativas existen. La primera es que la Unión Europea devuelva a su gente la confianza que necesita. Que le devuelva la vida que le está quitando con la falta de respeto hacia los principios que ella misma manifiesta", ha opinado Nasia Mulashi, una trabajadora del aeropuerto de Larnaka.