Maduro y Capriles votan y discrepan sobre las cifras de participación en Venezuela
- Casi 19 millones de venezolanos están llamados a las urnas
- Maduro habla de "récord de participación" y Capriles discute esos datos
- Los resultados podrían conocerse tres horas después del cierre de colegios
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Los venezolanos votan este domingo en calma y normalidad en una jornada en que la polémica vuelve a estar una vez más en las discrepancias entre el chavismo y la oposición, en esta ocasión debido a las cifras de participación, que según los primeros rompen marcas, y según los segundos no.
Los candidatos del chavismo, Nicolás Maduro, y la oposición, Henrique Capriles, han coincidido no obstante en llamar a que los venezolanos acudan a las urnas para elegir al presidente que concluirá el mandato que el fallecido Hugo Chávez comenzó el pasado 10 de enero, en su tercera reelección.
Poco después de votar, apenas entrada la tarde, Maduro ha asegurado que tras ocho horas y media de la apertura de los centros de votación habían votado 11,5 millones de electores de los 18,9 millones inscritos y ha augurado que se registrará una participación "récord".
"Hoy estamos aquí, las noticias son muy buenas, ustedes saben, se están rompiendo récords de participación en todo el país", ha indicado Maduro a los periodistas tras votar en un colegio del oeste de Caracas.
Ha insistido en su llamamiento a votar afirmando que "no hay excusas" para no hacerlo y que si él tuviera "una máquina de los sueños" pediría que sufragara el 100% de los votantes.
Maduro ha hablado después de que su jefe de campaña, Jorge Rodríguez, dijera que hasta las 11.30 hora local (16.00 GMT) habían votado ocho millones de personas
"Vamos a votar para fortalecer la democracia venezolana: remate perfecto", ha afirmado vestido con camisa azul y camiseta roja, y acompañado por la familia del fallecido presidente Hugo Chávez.
Capriles pone en duda las cifras de Maduro
Desde la campaña opositora ponen en duda la cifra dada por Rodríguez y aseguran que el número real era de 7 millones a esa hora.
Capriles también se ha referido al asunto tras votar y ha acusado a Rodríguez de querer "molestar" con la difusión de cifras sobre la participación.
El candidato de la oposición y su equipo de campaña han replicado a los anuncios del chavismo de alta participación en la jornada afirmando que esas son cifras de "inspiración" oficialista.
El candidato opositor a la presidencia venezolana ha votado en una escuela de Caracas y ha llamado a sus seguidores a salir en "avalancha" a votar en lo que queda de jornada electoral y a denunciar los "atropellos", tras señalar que "hoy gana Venezuela".
Rodeado de sus partidarios y acompañado de su madre, Capriles votó pasadas las 13.00 hora local (17.30 GMT) en el colegio Santo Tomás de Villanueva, ubicado en el municipio de Baruta, donde fue alcalde durante dos períodos.
Vestido con una chaqueta de la selección venezolana de fútbol de color blanco y los mismos zapatos que lleva en estas oportunidades porque, dice, le traen suerte, el candidato opositor tomó la papeleta, le dio un beso y la depositó en la urna.
Colegios abiertos hasta que no haya cola
Está previsto que las mesas receptoras del voto permanezcan abiertas hasta las 18.00 hora local (22.30 GMT), aunque la normativa electoral establece que se debe permitir votar a personas que permanezcan en las colas más allá de esa hora.
Según cifras de la CNE, 18.854.935 venezolanos están habilitados para votar, 100.309 personas de los cuales podrán hacerlo en las embajadas y consulados de Venezuela en 88 países.
El organismo rector del voto calcula que los resultados podrían ser conocidos tres horas después del cierre de la votación, cuando la tendencia del voto sea irreversible.
El jefe del operativo militar de seguridad de las elecciones, general Wilmer Barrientos, ha dicho a los periodistas que "el país está en completa calma" al inicio de lo que ha llamado "fiesta democrática".
Ha destacado que los reportes que ha recibido al comienzo de la votación de los destacamentos militares de las zonas fronterizas con Brasil, Colombia y Guyana apuntan a que "las actividades se desarrollan con normalidad".