El peligrosísimo sexto encierro de San Fermín 2013 de El Pilar deja tres heridos por asta
- Un toro rezagado se ensaña con un mozo caído en Estafeta
- El herido más grave, un joven de EEUU al que le han extirpado el bazo
- Revive la carrera en el encierro interactivo de RTVE.es
El sexto encierro de sanfermines con toros de El Pilar ha sido muy peligroso, violento y complicado, con tres heridos por asta de toro, uno en la Cuesta de Santo Domingo, otro en Estafeta y otro en el Callejón, según han informado los servicios de emergencia de Pamplona.
Uno de los momentos más dramáticos se ha vivido cuando un toro negro, suelto y rezagado, se ha ensañado a la altura de la calle Estafeta contra un mozo caído en el suelo.
El joven ha recibido varias embestidas y ha tenido que ser arrastrado por varios corredores para librarle del peligro.
Tres corneados
De los tres corneados, el herido más grave es un estadounidense de 20 años, P.E., que ha sido trasladado desde el tramo de la Cuesta de Santo Domingo con una herida por asta en el abdomen lo que ha obligado a extirparle el bazo por rotura aunque se encuentra estable, según el último parte médico.
El herido de Estafeta, que responde a las iniciales D.M.V. y es de Castellón, sufre tres heridas por asta, en la ingle derecha, en la rodilla y en el muslo izquierdo, y ha sido ingresado en el antiguo Hospital Virgen del Camino donde también ha sido operado. El joven, a pesar de la aparatosa cogida, nunca llegó a perder la consciencia.
J.M.B.C., de Barcelona, de 42 años, ha sufrido dos heridas por asta de toro en el brazo derecho y su pronóstico es menos grave. Otras cuatro personas han sido trasladadas al Centro Hospitalario de Navarra con contusiones y traumatismos.
La carrera, que ha roto la racha histórica de cinco encierros sin cornadas que no se vivía desde 1976, había comenzado muy rápida cumpliendo con la fama de veloces de esta ganadería salmantina, aunque el comportamiento del astado descolgado la ha convertido en la más larga de estos sanfermines con una duración de 4 minutos y 56 segundos.
El encierro ha arrancado con normalidad después del cohete aunque después de unos segundos, un toro castaño rojizo ha tomado la delantera a velocidad vertiginosa y ha lanzado derrotes a los mozos situados en la margen izquierda, uno de ellos ha recibido un puntazo en la Cuesta de Santo Domingo.
El morlaco adelantado ha recuperado el ritmo y se ha unido a la manada guiada por los cabestros que ya comenzaba a estirarse.
Con mucho riesgo la torada ha atravesado la plaza del Ayuntamiento. Después, ha enfilado la Curva de Estafeta, con tres cabestros y cuatro toros en cabeza, otro bravo a unos metros y el sexto, el que causaría el mayor peligro, ya comenzando a rezagarse.
Momentos de angustia en Estafeta
A mitad de la calle Estafeta, este morlaco de nombre 'Langostero' ha arremetido contra un grupo de corredores y ha perdido el equilibrio y, al levantarse, cuando parecía que iba a continuar su recorrido, ha conseguido alcanzar a uno de esos mozos, lo ha tirado al suelo y le ha corneado durante medio minuto de angustia.
Los mozos y los pastores que le circundaban han intentado socorrerle y quitarle de encima al toro coleándolo, ya que una y otra vez volvía sobre el corredor, al que practicamente arrancó la ropa, hasta que finalmente, han logrado que éste desviase su atención del joven y continuase su camino.
"Es muy excepcional que un toro esté tanto tiempo encima de un corredor. Además, este comportamiento en una ganadería como El Pilar ha sido completamente sorpresivo e inesperado, ya que se caracterizan por su velocidad y no por dejar corneados", analiza desde Pamplona, Javier Solano, experto en encierros de TVE.
Encierro accidentado
Poco a poco, el astado ha enfilado el último tramo de la calle, siguiendo las llamadas de los corredores, que este viernes han sido esenciales para evitar peores consecuencias, aunque la actitud del toro ha continuado causando problemas.
Así, al llegar a Telefónica el animal ha embestido de nuevo contra los mozos, al menos uno de los cuales ha recibido un puntazo aquí, cerca del vallado contra el cual ha arremetido en varias ocasiones, según recoge EFE.
El toro se ha parado, se ha girado y ha vuelto a ser reconducido por los mozos hasta llegar a la entrada de la plaza, donde le esperaban los dobladores, que le han conducido ya sin incidencias hasta corrales.