Los duques de Cambridge bautizan a su hijo Jorge entre amigos y cuatro generaciones de Windsor
- Sus padres han roto con algunas tradiciones de los bautizos reales
- A la ceremonia, privada, solo han asistido 22 invitados
- Los padrinos son amigos de la pareja y han contratado al fotógrafo de Beckham
Los duques de Cambridge han bautizado esta tarde a su primógenito, el príncipe Jorge, con agua del río Jordán en una ceremonia privada que ha roto con la pompa y el boato que suelen acompañar a la familia real británica.
Acompañado por su esposa Catalina, el príncipe Guillermo han entrado en el palacio de St. James en brazos a su hijo de tres meses, ataviado con una reproducción del faldón de encaje y satén que portó la hija mayor de la reina Victoria cuando fue bautizada en 1841. "Está preparado. Hasta ahora, todo bien", ha comentado sobre el niño a su familia el príncipe Guillermo.
Por decisión de los duques, los padrinos de su primogénito han sido siete y principalmente amigos de la infancia y la universidad escocesa de St.Andrews en lugar de reyes o príncipes, como fue el caso de Guillermo, cuyo padrino es Constantino, depuesto rey de Grecia.
Entre ellos Zara Phillips, prima del príncipe Guillermo, Jamie Lowther-Pinkerton, el exsecretario privado del matrimonio, cuatro amigos de la pareja: Oliver Baker, William van Custem, Emilia Jardine-Paterson, el conde de Grosvenor y una amiga de Lady Di, Julia Samuel.
Tres futuros reyes
Por primera vez el bautizo real no ha sido en Buckingham, sino en la capilla real del Palacio de St. James. Oficiado por el arzobispo de Canterbury, han asistido solo 22 invitados elegidos por los duques de Cambridge, que quieren evitar a toda costa la intrusión de los medios de comunicación en la vida de su primogénito.
"Nos morimos por ver al príncipe Jorge, pero respeto totalmente su decisión (de privacidad). Es su hijo", afirma envuelta en la bandera británica María Scott, de 42 años, que ha viajado 500 kilómetros desde Newcastle, al norte de Inglaterra.
Durante la ceremonia religiosa, que estuvo acompañada por el coro de la Real Capilla de su Majestad, la hermana de Catalina, Pippa Middleton, y el hermano de Guillermo, el príncipe Enrique, leyeron sendos pasajes de la Biblia.
La reina Isabel II, ataviada con un traje con pamela a juego de color azul , ha aparecido por primera vez en público con los tres futuros reyes de Inglaterra, su hijo Carlos, su nieto Guillermo y su bisnieto Jorge, algo que no había ocurrido desde julio de 1894 cuando se celebró el bautizo del que sería después Eduardo VIII. Una imagen que no se hará pública hasta este jueves.
El fotógrafo de las estrellas
El fotógrafo de esta instantánea histórica ha sido Jason Bell, conocido por tomar imágenes de famosos como el exBeatle Paul McCartney, la actriz Scarlett Johansson o el futbolista David Beckham.
La reina Isabel ha estado acompañada de su marido, el duque de Edimburgo, de 92 años, esposo de la Reina, y el príncipe Enrique, segundo hijo de Carlos de Inglaterra y la fallecida Diana de Gales.
A la salida de la ceremonia se ha podido ver a la duquesa de Cambridge, de 32 años, en buena forma, con un traje en color natural de la casa Alexander McQueen y una pamela a juego de la diseñadora Jane Taylor.
Después del bautismo, los 22 invitados han acudido a Clarence House, residencia del príncipe Carlos contigua al palacio de St.James's, para la recepción, en la que se cortaba una parte de la tarta nupcial de los duques de Cambridge que fue congelada y reservada para esta ocasión, según los medios locales.
El príncipe Jorge, al que hasta ahora solo habíamos visto una vez en directo y después en dos fotos oficiales, nació el 22 de julio en una sala de maternidad del hospital St. Mary de Londres, evento que generó una mayor atención mediática.