Diez años de la llegada de Spirit a Marte
- Diseñado para durar 90 días, funcionó durante 6 años
- Obtuvo pruebas de la existencia de agua líquida en Marte en el pasado
- Le sobrevive su gemelo Opportunity
Hoy se cumplen diez años de la llegada del rover Spirit de la NASA a Marte, envuelto en unos airbags que amortiguaron la última fase de su descenso.
Diseñado para durar al menos 90 días en realidad estuvo en funcionamiento durante seis años, y sólo la mala suerte de que se quedara atrapado en una trampa de arena el 1 de mayo de 2009 le impidió seguir funcionando, pues fue imposible orientarlo de cara al Sol para que sus paneles solares generara suficiente electricidad para sobrevivir a su tercer invierno marciano, lo que hizo que muriera congelado.
El último contacto con Spirit tuvo lugar el 22 de marzo de 2010 y el fin de la misión fue declarado el 25 de mayo de 2011, tras fallar todos los intentos de volverse a poner en contacto con él.
Pero le sobrevive su gemelo, Opportunity, que llegó a Marte tres semanas después, aterrizando casi en las antípodas de Spirit, y que aún sigue en activo, con 38,7 kilómetros recorridos sobre la superficie del planeta; desde el 19 de mayo de 2010 es la sonda que ostenta el récord de duración sobre la superficie de Marte.
Ciencia en movimiento
Con un peso de 185 kilogramos llevaba siete instrumentos científicos a bordo, además de cinco cámaras utilizadas para la navegación.
Cinco de estos instrumentos iban montados en el brazo del rover para poder acercarlos a las rocas a estudiar e incluían dos espectrómetros para analizar la composición de estas, unos imanes para capturar partículas a analizar, una especie de cepillo para limpiar el polvo de las rocas y penetrar en su capa superficial para poder analizar su interior, y un microscopio.
En un primer momento fue Oportunity el primero en conseguir obtener pruebas de que en el pasado de Marte existió abundante agua en estado líquido, pero con el tiempo Spirit también consiguió encontrar huellas de la existencia de agua líquida y actividad volcánica en la superficie de Marte en su lado del planeta.
Rovers sobre Marte
Para Steven Squyres, el científico principal de la misión, el que Spirit y Opportunity hayan durado tanto y que hayan podido estudiar en detalle distintos lugares es como si la NASA hubiera conseguido tener cuatro aterrizajes en Marte por el precio de dos.
Desde agosto de 2012 Opportunity tiene un nuevo compañero sobre la superficie de Marte, Curiosity, un rover mucho mayor, de casi una tonelada de peso y que obtiene su energía de un generador térmico de radioisótopos, por lo que no depende de la energía solar para funcionar; la próxima llegada de un rover a la superficie de Marte está prevista para 2021, con otro rover basado en el diseño de Curiosity.