Los agentes de movilidad que multaron a Aguirre la denuncian por desobediencia a la autoridad
- Según el responsable del Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad
- Asegura que hubo "persecución" porque se "dio a la fuga" con su vehículo
- El atestado policial revela que los agentes la siguieron "en paralelo" a su coche
Los agentes de movilidad que pidieron a Esperanza Aguirre su documentación para multarla por haber estacionado su vehículo en el carril bus de la Gran Vía han presentado una denuncia contra ella por desobediencia a la autoridad, según ha explicado en RNE el secretario general del Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad, Jesús Méndez.
"Lo que no es de recibo es decir que los agentes fueron a su casa como si les hubieran invitado", ha señalado Méndez que asegura que hubo una "persecución" después de que ella se "diera a la fuga" con su vehículo.
Según Méndez, a los agentes de movilidad solo les dio tiempo a pedirle su documento de identidad y cuando requirieron la documentación de su vehículo, ella entró en su coche para buscarla fue entonces cuando "se dio a la fuga", arrollando la moto de uno de los agentes.
"Es muy difil tirar una moto en un estado normal otra cosa es que un estado de nerviosismo dándose a la fuga la la haya tirado", ha añadido, porque "la motocileta no estaba mal estacionada", sino a una "distancia prudencial del vehículo"
Además, el responsable sindical dice que el tiempo que permanecieron en la vía solicitando los datos a Aguirre no llegó a 20 minutos como ella asegura en una entrevista en Radio Nacional, en la que además niega que se diera a la fuga y que arrollara a nadie.
Un juez de Instrucción tendrá que decidir si abre diligencias contra la presidenta del PP de Madrid por un delito de desobediencia o por una falta contra el orden público una vez que reciba el atestado policial sobre los hechos sucedidos.
El procedimiento penal arrancará una vez que el atestado policial sea trasladado al Decanato de los juzgados ordinarios y éste recaiga sobre un juez instructor.
Un policía municipal la siguió a su casa
También considera que la expresidenta de la Comunidad de Madrid ha puesto en duda la profesionalidad de los agentes, por haberles calificado como "machistas" y asegurar que les llaman "agentes de inmovilidad" en una entrevista en TVE, algo que "no se puede entender".
Un policia municipal cercano presenció los hechos y la siguió hasta su casa, ha señalado el responsable sindical, que también ha explicado que sin la notificación de la multa no puede hacer "absolutamente nada", ni recurrir la sanción ni abonarla.
Sobre el número de agentes de movilidad que se vieron implicados en los hechos ha aclarado que no fueron seis, como ha asegurado Aguirre sino dos que vieron el estacionamiento en el carril bus y otros dos que estaban próximos.
"Estan nerviosos muy muy nerviosos sufriendo una presión mediática bestial", por lo que prefieren no hacer declaraciones a los medios de comunicación.
Jesús Méndez ha concluido en la entrevista que todo "se hubiera quedado en una denuncia administrativa" con una sanción de 200 euros "si no se hubiera dado a la fuga" y que no se ha tratado a Aguirre de forma distinta por ser un personaje público.
Según declaraciones recogidas por Efe, Méndez ha subrayado asimismo que cuando se produjeron los hechos los agentes de movilidad "no fueron respaldados ni acompañados por ninguno de sus mandos ni por nadie del Ayuntamiento de Madrid", sino únicamente por el sindicato, y que recibieron "un trato diferente al habitual" en la comisaría de la Policía Nacional.
Csit-Unión Profesional, a la que pertenece el Sindicato Profesional de Agentes de Movilidad, ha expresado su solidaridad con los agentes implicados en el incidente porque "recibieron un trato diferente al de cualquier ciudadano" en la comisaría de Policía Nacional debido a "la lentitud para interponer la denuncia y la dificultad para recibir copia de la misma una vez interpuesta".
Los agentes la siguieron "en paralelo" a su coche
El parte de la Policía Municipal de Madrid sobre el incidente revela que los agentes que persiguieron hasta su casa a la expresidenta de la Comunidad de Madrid llegaron a circular "de forma paralela" junto a su coche pero que ella hizo "caso omiso" a sus indicaciones.
En el atestado, al que ha tenido acceso Europa Press, el policía municipal actuante relata que a las 16:15 horas de este jueves, cuando se encontraba patrullando por la Gran Vía junto a su compañero observaron cómo un agente de movilidad estaban denunciando a un vehículo que estaba estacionado en el carril bus con las luces de emergencia encendidas, "no encontrándose en el interior el conductor del mismo".
Los agentes se posicionaron en la parte posterior del vehículo con el fin de canalizar el tráfico y proteger la integridad del agente de movilidad, debido a la gran intensidad de vehículos. Es en ese momento, según el parte, cuando apareció otro agente de movilidad que se situó con su moto en la parte delantera del coche.
Transcurridos unos instantes, una mujer se aproximó a uno de los agentes de movilidad, y mantuvo "una breve conversación, para a continuación meterse dentro del vehículo, un Toyota Versus de color blanco".
"Caso omiso a las órdenes"
"En el momento que proceden a notificar la denuncia a la conductora, la misma comienza a realizar maniobras con la intención de iniciar la marcha y, haciendo caso omiso a las indicaciones de los agentes de movilidad, procedieron a detener el vehículo, golpeando con el lateral derecho del vehículo la motocicleta que se encontraba delante, tirándola al suelo", señala el policía actuante en el atestado.
A continuación, estos agentes, seguidos de los de movilidad, salieron tras el vehículo en cuestión, "llegando a circular de forma paralela e indicando de forma verbal que detuviera el mismo, haciendo caso omiso a las órdenes de estos agentes". Después, el parte detalla las calles que la expresidenta de Madrid recorrió hasta llegar a su domicilio.
Entonces, tal y como continúan las diligencias presentadas al Jefe de la Unidad Integral de Distrito Centro Norte de la Policía Municipal de Madrid, los agentes salieron de su coche y se encontraron con un guardia civil miembro del servicio de seguridad de la persona en cuestión, a la que previamente habían identificado los agentes de movilidad como Esperanza Aguirre.
El atestado policial termina explicando como de la casa salió otro guardia civil, que entabló una conversación con los policías, y facilitó "la documentación del vehículo implicado en los hechos". Minutos después, cotinúa el parte, bajó la propia Aguirre y entabló una conversación con los agentes de movilidad, que se retiraron del lugar a las 17:30 horas.