Jorge Riera: "Putokrío es un artista fracasado con un trastorno antisocial"
- Tras su éxito en 'Alaska y Coronas', protagoniza su propio cómic
- "Putokrío es mi alter ego, tan cómico como patético", confiesa Jorge
Jorge Riera (Valencia, 1976) es director, realizador y guionista de televisión y publicidad. Pero quizá le conozcáis más por su alter Ego: Putokío, un personaje mediante el que nos descubre sus secretos más oscuros, al tiempo que nos hace reír y reflexionar sobre nosotros mismos. Tras su éxito en la revista Mongolia y en las animaciones del programa Alaska y Coronas, ahora Putokrío nos desvela su verdadera historia en el cómic del mismo título editado por Edicions de Ponent.
“Putokrío –asegura Jorge- es mi alter-ego, una versión estilizada de mí mismo. Sus aventuras están inspiradas en mis propias vivencias, aunque obviamente no todo es real y a veces dramatizo para conseguir una mayor eficacia narrativa. También coqueteo con el fantástico para intentar ahondar en estados de ánimo que serían más difíciles de tratar desde una óptica realista”.
“El personaje es un artista fracasado con un trastorno antisocial y varios comportamientos claramente autodestructivos –continúa Jorge-. La influencia de su particular entorno familiar está muy presente en la raíz de su personalidad, llena de defectos y contradicciones que hacen de él una figura tan cómica como patética”.
Una mezcla de Berlanga y Peter Bagge
Lo que no se puede negar es que Putokrío tiene la capacidad de sorprendernos gracias, según Jorge- a “una mezcla de estilos muy heterogénea: por un lado es clásico porque bebe del humor negro de Berlanga y Azcona, o de la crudeza del tremendismo español. Pero por otro es moderno porque tiene un lado más “punk”, que busca la provocación pura y dura, como la animación gamberra de MTV y los cómics de Peter Bagge”.
“En cualquier caso es un tipo de humor que va íntimamente relacionado con mi forma de ver la vida, y eso lo emparenta con lo que hacen cómicos como Larry David o Louis C. K. , gente que se interpreta a sí misma para reírse de sus propias miserias”.
Un cómic que cuenta con una galería de personajes inolvidables, desde el padre culturista sin cerebro hasta el mejor amigo del protagonista, un imitador del Vaquilla. Personajes tan vivos y con tantas aristas que no sabemos si compadecernos o reírnos de ellos, aunque suele imponerse la segunda opción.
“Son personajes sacados de la vida misma, pero refinados para resultar un poco más interesantes –confiesa Jorge-. Culturistas, productores, bakalas, alcohólicos, marujas, delincuentes, ex-novias... ellos son los seres que pueblan mi universo de patetismo ilustrado. Todos me atraen y repelen a la vez, hay amor y odio a partes iguales”.
En el cómic Jorge tampoco oculta algunos aspectos oscuros de su personalidad ni sus problemas con la bebida. “Trato de escribir sobre lo que conozco, por eso escribo sobre mi vida. Si hay algo que no me considero es auto-indulgente, y sé que hay muchas cosas de mí que son negativas. Convertirlas en historias es una forma de darle sentido a todos esos errores y frustraciones”.
En el prólogo, el cineasta Óscar Aibar lo compara con Harvey Pekar (American Splendor) y Manuel Vázquez, dos de los maestros del cómic autobiográfico. “Me parece una comparación muy acertada –asegura Riera-, como todo lo que escribe Óscar. Pekar y Vázquez son dos autores a los que admiro y respeto. La figura de Vázquez, tan libre en lo vital e imaginativa en lo creativo, me fascina. Y American Splendor es la mayor influencia de este volumen a nivel de formato, porque reúne a un buen montón de dibujantes alrededor de un único escritor de historias autobiográficas.
Los mejores dibujantes del momento
Para contar cada uno de los episodios de la vida de Putokrío, Jorge ha contado con un dibujante distinto, logrando reunir a algunos de los mejores artistas del cómic actual: Juaco Vizuete, Santiago Sequeiros, Natacha Bustos, Javier Peinado, Enric Rebollo Graupera, Cristóbal Fortúnez, Pablo Vigo, Carla Berrocal, Dario Adanti, Mortimer Asecas, Sergio Bleda Villada, Elpablo Dibuja, Félix Ruiz, Miguel Ángel Martín, Miguel Porto, Borja González Hoyos, Francisco Redondo y Jose A. Bautista. Además de contar con las colaboraciones de Jordi Costa, Eugenio Merino, Álex Mendíbil, Mauro Entrialgo, María Rubio, Álvaro Ortiz, Alberto González Vázquez, Joaquín Aldeguer, Felipe H. Navarro y Néstor Fernández.
“Mi criterio era el de la calidad –asegura Jorge-. Si hay algo de lo que puedo estar orgulloso es del nivel de los dibujantes que he reunido. Es un honor poder contar con clásicos de nuestra historieta como Miguel Ángel Martín o Darío Adanti. Y una gozada para los sentidos disfrutar del arte de talentos más jóvenes como Álvaro Ortíz o Natacha Bustos. Por otro lado, cada historia requería un estilo determinado, por eso la variedad de dibujantes involucrados”.
Los orígenes de Putokrío
“Los primeros cómics de Putokrío nacieron en Internet –nos comenta Jorge-. Aunque ni siquiera se podía decir que fueran tebeos en el sentido estricto de la palabra. Eran una especie de collages narrativos que hacía con fotos de mis amigos y familiares. Luego los trataba mediante Photoshop para que parecieran dibujos. Y siempre en blanco y negro, que es la tonalidad que más pega con mis historias”.
A pesar de esa carencia de medios, Putokrío llamó la atención de uno de los productores cinematográficos más importantes de España y a punto estuvo de rodarse una película: “Me hubiera encantado que se hiciera la película de Putokrío. Estuve trabajando en un guion para Andrés Vicente Gómez, el productor de Torrente y El día de la bestia, pero el proyecto no acabó de cuajar y todo se quedó en agua de borrajas. Luego estuve trabajando en varios proyectos con diferentes productoras, pero por desgracia ninguno ha llegado a ver la luz. De todos modos no descarto seguir intentándolo, soy muy cabezota y rendirse es de cobardes".
Putokrío en Alaska y Coronas
A pesar de no saltar al cine, el personaje protagoniza su propia serie de animación dentro del programa Alaska y Coronas, de La 2. “La principal diferencia entre ambos medios es que el registro del cómic es más intimista y menos humorístico. También la época en que se desarrollan las historias. En “Putokrío contra la vida moderna” decidí fabular sobre mi hipotético futuro. Me imaginé tan amargado y derrotado por la vida que llegaría a encerrarme en un búnker junto a mi perra Jamón. Se podría decir que este cómic es la precuela de las animaciones de Alaska y Coronas.
De lo que no cabe duda es que Putokrío es uno de los cómics más originales y rompedores del año y que el personaje tiene muchas historias que contar: “Me gustaría seguir contando las aventuras de Putokrío, tanto en cómic como en animación, pero todo dependerá de la aceptación de esta primera entrega y de si en la televisión siguen interesándose por mi trabajo. Más allá de Putokrío quiero escribir una novela gráfica inspirada en algunos de los personajes que conocí durante los 17 años que viví en Madrid. Hay ciertos ambientes pseudo-intelectuales que son muy dados a la parodia”.