El consumo impulsó hasta el 0,6% el crecimiento de la economía en el segundo trimestre
- El gasto de los hogares subió un 0,7% entre abril y junio y la inversión, un 0,5%
- Contrasta con el deterioro de la aportación del sector exterior
- Entre abril y junio, el PIB creció un 1,2% respecto al que había un año antes
Próximo cambio de metodología
Estos datos son los últimos que se dan siguiendo la actual metodología. A partir de septiembre, se aplicará el Sistema Europeo de Cuentas 2010, que -entre otras cosas- añade a sus cálculos del PIB la I+D y la llamada economía ilegal.
El próximo día 25, el INE publicará las cuentas nacionales anuales de 1995 a 2013 calculadas con la nueva base metodológica.
El avance de los datos de PIB del tercer trimestre que se difundirá el 30 de octubre también seguirá ya esa forma de cálculo.
Una mayor demanda interna, especialmente de los hogares, impulsó el crecimiento de la economía española hasta el 0,6% entre abril y junio, según ha confirmado este jueves el Instituto Nacional de Estadística (INE). El consumo de los hogares subió en ese período un 0,7% y la inversión se incrementó un 0,5%. Esa mejora contrasta con un deterioro de la aportación del sector exterior.
En este último capítulo, la caída se explica porque, aunque las exportaciones subieron respecto al primer trimestre, esa mejora fue menor al fuerte incremento de las importaciones.
Además, destaca el mantenimiento del crecimiento de la inversión en bienes de equipo, que registra incrementos trimestrales regulares desde el segundo trimestre del año pasado, un signo de la leve recuperación de la confianza empresarial.
En cuanto al empleo, mejoró un 0,6% intertrimestral (equivalente a 96.000 puestos de trabajo equivalentes a tiempo completo en un año), por encima del avance del 0,1% registrado en el primer trimestre.
Gobierno: "La recuperación se mantendrá en los próximos meses"
Los datos publicados por el INE coinciden con las que adelantó el pasado 30 de julio y han servido al Gobierno para afirmar que "la recuperación económica va ganando impulso", una recuperación que -ha dicho- "está siendo rica en generación de puestos de trabajo".
Así lo ha señalado el secretario de Estado de Economía, Fernando Jiménez Latorre, en una rueda de prensa en la que ha destacado que "las bases sólidas alcanzadas por importantes esfuerzos permiten pensar que la recuperación de la producción y el empleo se mantendrá en los próximos trimestres".
También ha confirmado la revisión al alza en septiembre de la previsión de crecimiento de este año hasta quedar próxima al 1,5%.
Un aumento del PIB del 1,2% respecto al de un año antes
En comparación con el mismo trimestre del año anterior, el avance económico fue del 1,2%, lo que se explica por un aumento de la demanda interna, cuya aportación al crecimiento interanual alcanzó 1,9 puntos, por encima del 0,7 que sumó en el registrado en el primer trimestre.
Esa mejora sirvió para compensar el empeoramiento del sector exterior, que pasó de restar 0,2 puntos en el crecimiento interanual registrado entre enero y marzo a quitar 0,7 en el de este segundo trimestre.
El empleo aumentó un 0,8% interanual, lo que supone un incremento neto de aproximadamente 127.000 puestos de trabajo. En todos los sectores de actividad mejoró la evolución del empleo, excepto en agricultura, ganadería y pesca.
El empleo asalariado creció respecto al que había en el segundo trimestre de 2013. Por contra, el empleo no asalariado (autónomos) aumentó su caída interanual: pasó de bajar un 1,2% en el primer trimestre a hacerlo un 1,6% entre abril y junio.
Esa mejora en el empleo estuvo acompañada de una reducción de la jornada efectiva ligada a ese empleo (pasó de crecer un 0,4% interanual entre enero y marzo a caer un 1,2%), lo que provocó un descenso de las horas trabajadas (su tasa pasó de avanzar un 0,1% pasó a caer un 0,4%).
Un 2,4% más de consumo de hogares que en 2013
Si se analizan con detalle cada uno de los componentes de la demanda interna, destaca el incremento del consumo de los hogares, un 2,4% superior al que había en el segundo trimestre de 2013. El INE lo justifica por la "mejora generalizada en todos sus componentes", tanto de bienes como de servicios, salvo en el caso de los bienes duraderos, que "atenúan su ritmo [de crecimiento] respecto al trimestre anterior".
Esta mejora del consumo es coherente con el leve repunte de las rentas. Entre abril y junio, el global de la remuneración de los asalariados aumentó un 1,6% respecto al que había un año antes, debido -según el INE- a que hubo más asalariados y aumentó la media de remuneración de cada uno de ellos (pasó de caer un 0,1% en el primer trimestre a subir un 0,3% en el segundo).
El gasto público también aumentó respecto al período abril-junio de 2013 (1,1%).
Respecto al componente de inversión, destaca la fuerte subida interanual en bienes de equipo (8,6%), resultado de las sucesivas mejoras trimestrales ya mencionadas. La inversión en construcción, por contra, siguió cayendo, aunque lo hizo en menor medida que en el interanual del primer trimestre (-3,4% frente a -8,6%) gracias a un ligero repunte trimestral.
Se frena el avance de las exportaciones
En lo que respecta a la demanda exterior, las exportaciones y las importaciones siguieron siendo superiores a las de hace un año, si bien la mejora se ha ido reduciendo progresivamente, sobre todo, en el caso de las ventas al exterior.
Así, las exportaciones ralentizaron su crecimiento en 5,7 puntos, al pasar de incrementarse un 7,4% interanual en el segundo trimestre de 2013 a hacerlo solo un 1,7% entre abril y junio de este año. Según los datos del INE, se desaceleraron mucho las ventas de bienes en el exterior (crecieron un 0,2% frente al ritmo de 7,2% al que lo hacían un año antes).
En cuanto a las importaciones, la desaceleración fue de 4,7 puntos porcentuales (bajaron su ritmo de crecimiento desde 8,6% a 3,9%), sobre todo, por la reducción en el aumento de compras de bienes en el exterior (de 10,1% ha pasado a 4%).
Si se analiza la composición del PIB español desde el punto de vista de la oferta, en el segundo trimestre creció el valor añadido aportado por la industria y los servicios (de 0,5% pasó a 1,1%), se ralentizó la bajada de la construcción (pasó de -8,1% a -3,1%) y cayó la aportación de agricultura, ganadería y pesca (de 7,4% cayó a -0,5%).
Dentro de la industria, empeoró algo el avance de las manufacturas, mientras que en el sector servicios se aceleró el crecimiento de su aportación, algo habitual en un trimestre que este año incluye la Semana Santa y el inicio de la temporada alta de turismo (comercio, transporte y hostelería crecieron un 2,6% interanual, frente al 11,8% del primer trimestre).