La Comunidad desinfectará las zonas comunes de la finca de la auxiliar y sacrificará a su perro
- Sanidad sacrificará al animal por orden judicial ante la negativa del marido
- El esposo de la auxiliar de enfermería hace un llamamiento para salvarlo
- Un centenar de personas protesta ante el domicilio para evitar su sacrificio
La Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid ha anunciado este martes que acudirá a la finca donde vive la auxiliar de enfermería contagiada por ébola para desinfectar las zonas comunes y que sacrificará a su perro, Excálibur, al entender que "supone un posible riesgo de transmision de la enfermedad al hombre".
El marido de la auxiliar, que está ingresado también en el hospital Carlos III, ha hecho un llamamiento en vídeo y a través de asociaciones de protección de animales para evitar el sacrificio de su mascota. Ante su negativa, la Consejería ha emitido una resolución ratificada por el Juzgado Contencioso-Administrativo número dos de Madrid para conseguir el permiso.
Dicho pronunciamiento judicial habilita a que se proceda al sacrificio del animal mediante las medidas adecuadas "para evitar su sufrimiento, utilizando las medidas de bioseguridad y biocontención adecuadas ante este riesgo, y el traslado y posterior incineración del cadáver del animal".
Este martes por la noche un centenar de personas se ha concentrado en Alcorcón frente al bloque de viviendas de la auxiliar de enfermería para intentar evitar la muerte del perro, que permenece solo en el piso de la pareja con un saco de 15 kilos de comida y agua abundante en cubos y en la bañera.
La pareja vive en una urbanización en Alcorcón, y, según la administradora de la finca, están esperando la llegada de los profesionales de Sanidad que desinfectarán las zonas comunes y llevarán a cabo tareas de limpieza.
Sanidad existe en que hay riesgo por el perro
En una nota de la Consejería de Sanidad remitida a los medios se explica que, según la información científica disponible, "existen datos que confirman el hallazgo de perros con anticuerpos positivos del virus del Ébola", por lo que estos animales "pueden sufrir un proceso de viremia aunque se muestren asintomáticos".
"En consecuencia, no existe garantía de que los animales infectados no eliminen el virus a través de sus fluidos orgánicos, con el riesgo potencial de contagio", ha indicado.
El marido de la auxiliar de enfermería había denunciado precisamente que la Comunidad de Madrid le ha pedido autorización para sacrificar al perro de la familia como medida preventiva y que, en caso de que se negara, solicitaría una orden judicial para entrar en la casa y acabar con su vida, según un comunicado publicado en redes sociales.
"Me ha dicho que tienen que sacrificar a mi perro así, sin mas. Me pide mi consentimiento a lo cual me he negado rotundamente. Dice que entonces pedirán una orden judicial para entrar por la fuerza en mi casa y sacrificarle", decía el marido, cuyo mensaje ha sido difundido en decenas de páginas de asociaciones protectoras de animales en Facebook y Twitter.
Concentración frente al domicilio para salvar a Excálibur
Tras el llamamiento hecho en las redes sociales por asociaciones de defensa de los animales para salvar al perro, un centenar de personas se han concentrado frente al domicilio del matrimonio. Entre ellos, militantes y simpatizantes del Partido Animalista, algunos de ellos ataviados con petos de esta formación que luego se han quitado al comentar entre ellos que la protesta no estaba autorizada.
"Javi y Teresa, Excálibur no está solo", han coreado los concentrados en referencia a los nombres de la auxiliar de enfermería, su marido y la mascota de ambos. "Sí al perro y no a la Mato", "Vecino, el próximo es tu perro" y "Sin prueba de contagio, sacrificio ilegal" han sido otros de los lemas que más se han escuchado.
Entre los concentrados se encontraba Carlos Rodríguez, quien supuestamente tiene ya la custodia del perro y un abogado. Ambos han explicado a Efe que se habían acudido para enterarse qué va a pasar con el perro y han aclarado que no pretendían hacer "una acción concreta".
Un grupo de agentes de la Policía Local y de la Policía de Fronteras del Cuerpo Nacional de Policía formaba un cordón de seguridad delante del edifico.
Desinfección en el hospital de Alcorcón
Por otra parte, el hospital Universitario Fundación Alcorcón ha comenzado ya la desinfección de la zona de aislamiento donde permaneció ingresada la auxiliar de enfermería infectada por ébola, según han confirmado a Servimedia fuentes de dicho centro.
Este proceso comprende varias etapas, desde la limpieza de la instalación con lejía y bombonas de gas, a la retirada del material usado por el paciente y la biodescontaminación de la estancia.
Tras la muerte de los sacerdotes Miguel Pajares y Manuel García bueno, fue la empresa Steris Iberia (filial de una multinacional estadounidense pionera en este sector) la encargada de desinfectar a fondo sus habitaciones. En concreto, esta se encargó de la fase final del proceso de desinfección, que es la limpieza a fondo del cuarto para destruir cualquier resto biológico.
Para ello, se sella la habitación y se deja dentro un robot de gran tamaño, que se controla desde fuera con un ordenador. Dicha máquina esparce peróxido de hidrógeno vaporizado, de forma que en unas seis horas se puede terminar todo el proceso.