Mas ofrece a la CUP ceder poder a Junqueras, Romeva y Munté a cambio de que apoye su investidura
- Él seguiría como presidente y los otros tres serían vicepresidentes del Govern
- La CUP, con la que se ha reunido, se inclina por rechazar la propuesta de Mas
- Este jueves se someterá a una segunda votación para intentar su investidura
El presidente catalán en funciones, Artur Mas, ha propuesto a la CUP ser él el presidente del Govern cediendo poder a tres vicepresidentes, Oriol Junqueras, Raül Romeva y Neus Munté, para intentar lograr su apoyo este jueves en la segunda votación para su investidura. Sin embargo, la formación de izquierdas se inclina por rechazar la propuesta.
El presidente ha hecho esta oferta a la CUP en una reunión mantenida este miércoles en el Palau de la Generalitat, a la que han asistido también los diputados de este partido Antonio Baños, Anna Gabriel y Benet Salellas; el dirigente de CDC Josep Rull, y los líderes de ERC Oriol Junqueras y Marta Rovira.
Mas hará pública esta oferta de presidencia "coral", como planteó la CUP hace unas semanas, en su turno de intervención en el debate de investidura de este jueves. La CUP, según Europa Press, tiene previsto rechazarla ya que insiste en que cualquier otro acuerdo debe pasar por que el actual presidente en funciones no repita en el cargo.
A su salida, los tres miembros de la CUP no han querido aclarar qué les parecía. "No diremos nada", han zanjado antes de tomar un taxi, pero fuentes conocedoras de la reunión han explicado a esta agencia de noticias que los diputados habrían anunciado en el mismo encuentro en el Palau de la Generalitat que no aceptaban la oferta de Mas, y que sí se abrirían a que el presidente estuviera en el Ejecutivo con un cargo que no fuera el de presidente.
Mas considera que la oferta que ha hecho a la CUP contenta a todas las partes: él consigue ser presidente -algo que JxSí siempre ha defendido que es innegociable-, mientras que la CUP ve cómo el actual presidente transfiere grandes áreas de poder del Ejecutivo a otros miembros.
Tres vicepresidencias para Junqueras, Romeva y Munté
El presidente en funciones ha ofrecido a la CUP que Munté sea la vicepresidenta encargada de una gran área relativa a asuntos sociales; que Junqueras se encargue de una vicepresidencia con responsabilidades financieras y económicas, y que Romeva sea el vicepresidente de una área de asuntos internacionales.
Después de que la CUP uniera fuerzas este martes con el resto de la oposición para frustrar en primera votación la investidura de Mas, JxS era consciente de que le tocaba mover ficha para intentar cambiar el sentido del voto de los diez diputados de la izquierda independentista y anticapitalista en la jornada de mañana.
En la segunda votación, Mas tendrá que conseguir la mayoría simple de los votos del Parlament, es decir que le bastarían los 62 votos a favor de JxS, más dos de la CUP y la abstención del resto de diputados de la izquierda antisistema.
La reunión "no ha ido bien", han reconocido a esta agencia de noticias fuentes conocedoras de las conversaciones mientras que desde Junts pel Sí reconocen que será "difícil" que este jueves la CUP facilite la investidura de Mas.
Munté: "Hay voluntad de negociar y acordar"
Tras la reunión, la vicepresidenta y portavoz del Govern, Neus Munté, ha comparecido para comentar la decisión del Tribunal Constitucional de suspender la resolución independentista aprobada el pasado lunes por el Parlament.
Preguntada por la cumbre con la CUP, ha considerado "muy normal" que se haya celebrado, "a 24 horas del debate de investidura", para intentar alcanzar un acuerdo de última hora. "Ha habido y hay una voluntad de dialogar, negociar y acordar", ha asegurado Munté, que ha evitado dar la negociación por perdida: "No hay nada cerrado".
Munté ha explicado que Mas mañana hará "un planteamiento adicional al que hizo el martes en su primer discurso" de investidura.
El número dos de ERC por Barcelona para el 20D, Joan Tardà, ha asegurado que su partido está dispuesto "a todo" para llegar a un acuerdo con la CUP para la investidura y formar un nuevo Govern, incluso a ofrecer un "cheque en blanco" para anteponer los intereses catalanes a los partidistas.