Goya, del lienzo a la gran pantalla
- Se estrena en cines el documental Goya: un espectáculo de carne y hueso
- Bucea en su figura con la excusa de la exposición Goya retratista de la National Gallery
"¿Por qué sigue interesándonos Goya 200 años después? Porque tiene una visión muy centrada, muy profunda de la gente que tenía a su alrededor. Retrataba el alma humana". Así define Gabriele Finaldi, director de la National Gallery de Londres, a Francisco de Goya (1746-1828), protagonista de la última gran exposición del museo londinense y que ahora puede ser disfrutada en la gran pantalla gracias al documental Goya: un espectáculo de carne y hueso.
Dirigido por David Bickerstaff, el documental aprovecha la exposición Goya: Los retratos, que pudo verse desde octubre hasta el pasado 10 de enero en la National Gallery, para explorar esta faceta del pintor aragonés y repasar toda su vida, desde su nacimiento en Fuendetodos hasta su muerte en su autoexilio en Burdeos, a través de varios expertos en su figura, entre ellos varios responsables del Museo del Prado de Madrid, guardián del máximo legado del pintor.
El documental, tras su estreno en Reino Unido, llega este martes a las pantallas españolas (lo proyectarán 38 cines de casi todas las comunidades autónomas) dentro del programa de Exhibition on Screen, que pretende transformar las salas de cine en galerías de arte y que proyectará en marzo Renoir: admirado y denigrado, y en mayo, Pintando el jardín moderno: de Monet a Matisse.
Goya, el que controla a todos
"El documental incluye entrevistas con gente que conoce mucho a Goya. Es muy democrático, con muchas opiniones, porque con Goya, como con los grandes artistas, hay muchas miradas, y es muy importante demostrar eso al público, que no hay nadie que controle a Goya; es Goya quien controla a todo el mundo", explicaba el pasado septiembre a RTVE.es, mientras se rodaba la película y se montaba la exposición londinense el comisario de la misma, el hispanista británico Xavier Bray, uno de los hilos conductores de Goya: un espectáculo de carne y hueso.
A través de la correspondencia personal que Goya intercambió con su íntimo amigo desde la infancia Martín Zapater -leída en voz en off por un actor-, vamos conociendo las visicitudes de este genio universal, en el plano personal y profesional, desde el rechazo inicial a su ingreso por parte de la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando de Madrid -que acabaría dirigiendo-, pasando por su primer gran encargo -los cartones para tapices para los Reales Sitios-, hasta su nombramiento como pintor de la Corte.
Para la película se abre también al público de forma excepcional el Cuarderno italiano (hacia 1771) de Francisco de Goya, propiedad del Museo del Prado y descubierto en 1993: "Revela el carácter de Goya: no una persona perfectamente organizada, una persona con múltiples intereses, una persona que reutiliza las cosas, es muy revelador de todo lo que le interesa", explica José Manuel Matilla Rodríguez, jefe del Departamento de Dibujos y Estampas del Museo Nacional del Prado.
En la National Gallery y en el Prado
El filme permite a los espectadores disfrutar al detalle de los cerca de 70 retratos que integraron la exposición de la National Gallery -la mitad de los que pintó a lo largo de su vida- y que consiguió reunir en un mismo espacio por primera vez en la historia. Entre ellos, La duquesa de Alba (1797), de la Hispanic Society of America y que, por segunda vez en la historia, salía de allí, los retratos de Carlos IV en traje de caza (1799) y la Reina María Luisa con mantilla (1799), de Patrimonio Nacional y expuestos permanentemente en el Palacio Real de Madrid, y varios de los grandes retratos propiedad del Museo del Prado.
Pero, el documental también se sumerge en las galerías del museo madrileño para acercar al público otras grandes obras de Goya que no pudieron viajar a Londres porque nunca salen del Prado, como es el caso del impresionante retrato La familia de Carlos IV (1800), que Xavier Bray compara con Las Meninas de Velázquez. Como hiciera su admirado maestro -su otra maestra era la naturaleza- 150 años antes en La familia de Felipe IV, Goya se autorretrata junto a los Borbones en esta obra que es una "metáfora de que la monarquía sobrevivirá para siempre", remarca Manuela Mena, jefa de Pintura del siglo XVIII del Prado.
"El Prado tiene la responsabilidad de cuidar de la obra de Goya de principio a fin, así que es el lugar adecuado al que ir para entenderlo", señala Xavier Bray en un momento del documental. Afortunamente, el espectador español tiene el privilegio de disfrutar de Goya en la gran pantalla y, después, hacerlo de tú a tú en el Museo del Prado.