La alfombra roja de los Oscar 2016, batalla de escotes
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Una vez más ha sido Charlize Theron la más espectacular de las actrices que han pisado la alfombra roja de los Oscar 2016. No es la más elegante, pero sí la que más ha llamado la atención con el osado vestido de alta costura de la casa francesa Dior.
"Es un homenaje a Mad Max", ha dicho la actriz ante la pregunta de los periodistas. Un guiño quizá a la fuerza de su personaje.
Atrevido por el escote y por el color, un rojo intenso que no estamos acostumbrados a ver debido a que los tonos blancos, desde los radiantes a los rotos, y los empolvados, que prometen volver a ser tendencia, suelen dominar este tipo de eventos.
Por suerte parece que la moda de llevar diseños que desnudan a las mujeres, en lugar de vestirlas, está quedando atrás. Al menos en esta edición de los premios Oscar hemos visto menos transparencias pero las más orgullosas de su anatomia, como Charlize Theron, han apostado por arriesgar en el escote.
Entre ellas, Rachel McAdams y Jennifer Lawrence que era TT (Trending Topic) antes de llegar. Quizá por hacerse esperar tanto, lo que invita a pensar que ha tenido algún percance con el vestido o ha tenido que cambiarlo a última hora.
Y es que la actriz, que tiene contrato con Dior, ha sorprendido con un estilo que no le va mucho. Lawrence ha llevado un vestido negro con encajes y transparencias y un rancio aire lencero. Un estilo que se aleja al que suele llevar en este tipo de eventos y que resulta un tanto pasado de moda.
Y seguimos hablando de escotes. Sofía Vergara y Olivia Wilde, en dos estilos muy distintos, también han querido poner toda la carne en el asador y han llevado generosos 'balcones' que han hecho las delicias de los fotógrafos.
El exceso de Charlize Theron y sus escotadas compañeras contrasta con la elegancia tranquila, serena y madura de Charlotte Rampling, una de las mejor vestidas de la noche. La actriz ha apostado por un diseño de Giorgio Armani, firma que también ha vestido a Cate Blanchett y a Naomi Watts.
El italiano le dio suerte a la actriz de Carol hace dos años cuando logró el Oscar por Blue Jasmine, y quizá por eso se ha decantado de nuevo por él. El vestido, de estilo feérico, lleva escote en forma de uve y una cascada de flores en tonos verde agua y plata.
Un tanto cursi. O quizá demasiado para una mujer que suele estar perfecta con diseños potentes de Givenchy, McQueen o la casa española Delpozo
Naomi Watts ha llevado un vestido ajustadísimo en paillettes de colores de la colección de alta costura de invierno 2015/16, un vestido que vimos en la pasarela y que resaltaba la palidez y la delgadez de la actriz.
Este año parece que las firmas italianas son las favoritas. Gucci ha vestido a Brie larson, con un elegante y jovial vestido en azul lapislázuli. La actriz de 'Room' entra así en la galería de actrices que se lleva el premio principal.
Olivia Wilde ha recurrido a Valentino y ha llevado un original vestido de alta costura que vimos en la pasarela. Emily Blunt, embarazada ha escogido una creación de Prada en tono rosa con aplicaciones de cristal y Patricia Arquette ha llevado un vestido azul con escote lazo de Marina Rinaldi.
Pero no han faltado las etiquetas francesas. Louis Vuitton ha vestido, y con acierto, a Alicia Vikander. La actriz ha lucido un vestido muy sencillo, en un amarillo tranquilo decorado con piezas en plata. Lleva escote palabra de honor y la falda va ligeramente abullonada.
Julianne Moore, igual que Cate Blanchett, ha repetido con una firma que le aporta buenas críticas y premios: Chanel. La actriz ha lucido un vestido de alta costura de la casa francesa, un diseño en color negro que Kendall Jenner lució en la pasarela parisina.
Rooney Mara también ha apostado por el caballo ganador y ha vuelto a contar con Riccardo Tisci, director creativo de Givenchy. La actriz de Carol siempre se aleja del estilo 'Hollywood' y suele llevar firmas con mucha personalidad como la citada casa francesa o Alexander McQueen.
Kate Winslet se hunde, como el Titanic, con un vestido de Ralph Lauren, un diseño de textura líquida en tono petróleo que no le favorece nada, pero está tranquila porque la lista de las peor vestidas la encabeza Heidi Klum con su vestido, o disfraz de hada, de Marchesa, firma que también ha vestido a la exhuberante Sofía Vergara.
Saoirse Ronan también ha apoyado la moda norteamericana y ha lucido un vestido de Calvin Klein, un diseño en lentejuelas verde esmeralda con tirantes de terciopelo que Francisco Costa, director creativo de la firma, ha personalizado para la actriz.
Lady Gaga tampoco ha convencido con el diseño de pantalón realizado por el estilista y diseñador Brandon Maxwell. Olivia Munn, con un inapropiado diseño naranja de Stella McCartney, tampoco ha tenido buena acogida. Es un color difícil, como el morado. Un tono que han escogido Tina Fey y Reese Whiterspoon, de Oscar de la Renta. .
Entre ellos ha vuelto ha destacar, por su originalidad, Jared Leto. Paco Delgado, diseñador de vestuario de La chica danesa, ha llevado un esmoquin de terciopelo negro vintage de la casa Cornejo. Un look similiar ha llevado Eddie Redmayne que no ha querido salirse del estilo más clásico.
Chris Rock, el conductor de la gala, llevó un esmoquin de Burberry, con chaqueta blanca de solapas de raso. Leonardo DiCaprio recurrió a la sobriedad de Giorgio Armani.
Es preciso destacar las ausencias, especialmente las de actrices que suelen dejar huella en la alfombra roja como Angelina Jolie, Penélope Cruz, Emma Stone y Dakota Johnson. Algunas han ido directamente a las fiestas que hay en Los Ángeles, varias opciones para elegir y para dejarse ver.