¿Qué ocurrirá en los próximos días tras el fracaso de la investidura de Pedro Sánchez?

• La primera investidura fallida de la democracia abre un horizonte incierto
• El rey Felipe VI y su actuación serán determinantes
• La opción más probable es que inicie una nueva ronda de consultas
• El primer paso será la recepción de Patxi López por parte del rey, el lunes
• Toda la información sobre el debate de investidura

¿Qué ocurre ahora tras la investidura fallida de Sánchez?

El fracaso de la investidura de Pedro Sánchez en la segunda votación del Congreso abre un nuevo horizonte político en el que se ponen sobre la mesa distintas opciones. En la historia de la democracia española nunca se había rechazado ninguna investidura. Los candidatos propuestos a la presidencia del Gobierno resultaron elegidos, como muy tarde, en segunda votación. Por eso el rey Felipe VI y su actuación son determinantes para establecer futuros procedimientos ante situaciones como la actual, que no están definidos con claridad en la Carta Magna.

"Una Constitución joven como la nuestra no ha tenido tiempo aún de hacer convenciones. Hasta ahora, no había hecho falta. El rey está resolviendo muy bien la situación en la que nos encontramos, y opino que eso crea ya una convención, que quedará como precedente que servirá para futuras situaciones similares", expresa a RTVE.es Juan José Laborda, expresidente del Senado y catedrático de monarquía parlamentaria.

Estas son las principales claves del proceso que se abre tras la investidura fallida de Pedro Sánchez:

Recepción de Patxi López por el rey

Es el primer paso. Felipe VI recibirá al presidente del Congreso, Patxi López, el próximo lunes, día 7 de marzo, a las 13:00 horas. El presidente del Congreso de los Diputados informará al monarca del resultado de la votación de investidura que ha tenido lugar este viernes, en la que Pedro Sánchez no ha conseguido los apoyos suficientes para formar gobierno.

Nueva ronda de consultas

La opción más probable, la que se acepta mayoritariamente por parte de los constitucionalistas, es que Felipe VI abra después una nueva ronda de consultas. La Constitución establece que si el candidato no logra la investidura en una primera votación ni en una segunda, “se tramitarán sucesivas propuestas en la forma prevista en los apartados anteriores”. Y esta forma prevista es la proposición por parte del rey de un candidato a la Presidencia del Gobierno "previa consulta con los representantes designados por los grupos políticos con representación parlamentaria, y a través del presidente del Congreso".

Juan José Laborda apoya también esta idea y cree que a partir de este momento "el rey tiene sus funciones perfectamente definidas en la Constitución, por lo que seguramente iniciará una nueva ronda de consultas".

"En realidad, el rey no encarga a nadie que forme gobierno. En España tenemos un sistema plenamente democrático. El rey por una parte arbitra, por otra modera, y consulta para hacer después una propuesta, según está contemplado en el artículo 99 de la Constitución. También se desprende del artículo 62.g, donde se establece que deberá ser informado de los asuntos de Estado", explica.

Plazo de dos meses

La Constitución establece que se deben esperar dos meses antes de poder disolver las Cortes y convocar nuevas elecciones. De igual manera, marca otros 54 días para la celebración de los comicios. Este plazo comenzó a contar el 2 de marzo, ya que el punto de arranque lo marca la primera votacion del Congreso de los Diputados, que Pedro Sánchez no superó con mayoría absoluta. Así, si la ronda de consultas concluyese sin acuerdo, el 2 de mayo se disolverían las Cortes y al día siguiente, el 3 de mayo, se convocarían las nuevas elecciones, que deberían celebrarse el 26 de junio.

Incertidumbre política

La inestabilidad del escenario político generado tras las elecciones del pasado 20 de diciembre, que se ha manifestado en el proceso de investidura de Pedro Sánchez, podría retrasar la propuesta de un nuevo candidato por parte del rey, dejando así tiempo para que los partidos avancen en sus negociaciones. O incluso provocar que directamente Felipe VI no llevase a cabo la propuesta, en caso de que ningún líder político contase con posibilidades.

Candidatos posibles

Mariano Rajoy y Pedro Sánchez se postulan de nuevo, a priori, como los dos candidatos que pudiesen intentar buscar el respaldo de los grupos parlamentarios para formar gobierno. Mariano Rajoy declinó la oferta que le hizo el rey, como líder del partido más votado, al no prever un apoyo suficiente. Nada parece haber cambiado y hasta ahora ninguna formación política ha expresado su intención de ofrecer sus escaños al presidente del Gobierno en funciones.

En el caso del líder socialista, si mantiene su pacto con Ciudadanos, tendría pocas posibilidades de sumar votos más a la izquierda del arco parlamentario. Pero podría abrírsele la posibilidad de formar una gran coalición de izquierdas con Podemos, Izquierda Unida y Compromís, con la que no lograría la mayoría absoluta, aunque sí que podría bastarle para alcanzar la mayoría simple necesaria en segunda votación, contando con posibles abstenciones.

¿Puede el rey forzar la disolución de las Cortes?

Respecto a esta cuestión, Juan José Laborda afirma tajantemente que "en absoluto". "El procedimiento está perfectamente descrito en la Constitución. No hay atajos posibles. Son los partidos políticos los que deben resolver la situación, no el rey".

"Nuestro rey, el rey de la Constitución, es un rey moderno, sin poderes pero con autoridad; cuya figura se fundamenta en la neutralidad", añade. Al mismo tiempo, afirma que "históricamente, la experiencia europea indica que cuando el jefe de Estado monárquico se entromete en los procesos electorales, la monarquía acaba cayendo o se pone en peligro. Tenemos el ejemplo de Italia o de Grecia".