Los jóvenes autores del cómic español, geniales pero precarios
- Entrevista con los dibujantes que optan al premio al mejor autor revelación
- "Somos el último mono de la cadena comercial y eso habrá que cambiarlo con el tiempo"
El cómic en España tiene cantera, lo saben las editoriales nacionales y las internacionales, que vienen aquí en busca de talento, aunque algunos de los jóvenes que optan al premio al mejor autor revelación que concede el "inminente" Salón de Barcelona reconocen lo difícil que es vivir de la profesión.
Esta semana se hablará mucho de cómic con motivo de la cita barcelonesa que comienza el próximo jueves, un sector editorial que como el resto ha sufrido la crisis y los cambios en los hábitos de consumo de cultura, sobre todo entre los más jóvenes, y que utiliza el salón de Barcelona para tomar el pulso al panorama de las viñetas.
"En España hay mucho talento y grandes artistas, pero el mercado de obra española sigue siendo débil a pesar de los grandes esfuerzos que realizan editores y libreros partiéndose el lomo para dar a conocer a autores locales", explica a Efe Pep Domingo (Castellón de la Plana, 1985) más conocido como Nadar, dibujante y guionista, y uno de los cinco candidatos al premio al autor revelación en 2015.
Para este joven creador, otro problema es la precariedad a la que se ven abocados la mayoría de los autores: "Somos el último mono de la cadena comercial y eso habrá que cambiarlo con el tiempo", comenta.
Un poco pesimistas
Esa visión un poco pesimista de la sociedad y del futuro profesional queda plasmada directamente en "El Mundo a tus pies" (Astiberri), una triple historia reunida por Nadar en un volumen que supone un intento, según sus propias palabras, "de dar forma a una frustración y empezar a escribir el relato emocional de mi generación".
Mai Egurza (Irún, 1986) la única mujer entre los cinco nombres que optan al premio revelación (y una de los pocas féminas entre todos los candidatos a los premios del salón) sabe que ha tenido suerte con el salto desde la ilustración al cómic que ha dado con "El paseo de los sueños" (Norma).
"Mi experiencia con 'El Paseo de los sueños' ha sido muy inusual: firmamos el contrato sin que yo hubiera hecho ni siquiera los diseños, así que Zidrou (el prestigioso guionista belga al que conoció en 2011 en el Salón de Angolume) y Norma hicieron una apuesta casi a ciegas conmigo. Habían visto lo que hacía, pero apenas había hecho cómic antes, así que no sé qué esperarían que saliera, lo que sí parece es que han quedado contentos".
Pero no se engaña sobre este espejismo: "Aparte de eso tengo entendido que en España en general el cómic se paga muy muy mal, tal vez en Francia se pague más, pero lo que yo he cobrado parece estar por encima de la media", reconoce la ilustradora, "muy intimidada" al principio por trabajar con Zidrou y Norma, y cuyas dudas fueron desapareciendo ganando confianza y tomando decisiones: "Creo que ellos también empezaron a confiar más en mi".
El éxito de "El paseo", una fábula de toques oníricos, donde destaca el color y las figuras de los personajes de la ilustradora vasca, ha pillado por sorpresa a Mai tras su publicación.
"De repente recibía mucha más atención de la gente, me llevaban a sitios para firmar... ha sido muy impactante ver la acogida. Nos dieron un premio hace unas semanas del Instituto Universitario de Marsella, y la nominación del Salón del Cómic de Barcelona también me pilló por sorpresa, incluso pensé que la llamada era una broma", explica.
Otro de los candidatos al premio, el dibujante Javi Castro (León, 1990), también está encantado por estar entre los elegidos a estos premios del salón, ya que se trata de una selección hecha por los profesionales del propio sector.
Castro, que como la mayoría de los creadores del cómic se curtió en los fanzines, hasta que sacó su primera obra larga, "Sandía para cenar", en una editorial pequeña, cree que existen grandes dibujantes e historietistas en España entre la nueva generación, pero que es complicado conseguir una vía que te permita vivir de ello de una forma desahogada, "aunque eso sea a la vez un aliciente creativo".
Castro publicó en 2015 "La última aventura" (Dibbuks) junto al más experimentado guionista Josep Busquet, una historia de viejas glorias venidas a menos, que por momentos recuerda a una de esas viejas películas de aventuras o catástrofes llena de rostros de actores secundarios con más pasado que futuro.
Junto a estos nombres, los otros dos candidatos que optan al premio al autor revelación, que se fallan el viernes 6 de mayo, son Jorge Monlongo -que el año pasado publicó "No me pegues que llevo gafas" (Caramba), una implacable sátira contra la "cultura moderna y hispter", y Cristian Robles, del que destaca su trabajo más reciente "Souffle" (La Cúpula), una novela gráfica de toques surrealistas pero de fuerte calado social.