Una joven de 27 años de Granada muere en el terremoto de Italia

• Ana Huete estaba de vacaciones en Illica con su novio italiano
• La pareja regentaba una pizzería en Granada capital

Ana Huete, una joven de Granada de 27 años, víctima del terremoto de Italia

El Ministerio de Asuntos Exteriores ha confirmado la muerte de una española en el devastador terremoto de Italia que en la madrugada del pasado miércoles asoló el centro del país y que ha causado más de 240 fallecidos mientras decenas de desaparecidos siguen bajo los escombros. Se trata de Ana Huete, una joven granadina de 27 años que regentaba una pizzería junto a su novio italiano en la ciudad andaluza y que se encontraba de vacaciones en Italia.

En el momento del terremoto, estaba durmiendo en una casa del pueblo italiano de Illica -una fracción de Accumoli, lugar del epicentro del seísmo- junto a familiares de su pareja, que ha resultado herida leve.

Huete se encontraba en la parte de abajo de la vivienda afectada junto a otras mujeres, mientras que los hombres estaban en la parte superior, según detalla Europa Press.

Fue la pareja de la víctima española la que identificó el cuerpo y la que alertó de lo ocurrido a sus allegados, que residen en Víznar (Granada), según ha explicado a los medios Nicolás Espigares, tío político de la fallecida.

Este portavoz de la familia ha explicado que iniciarán "a nivel privado" los trámites de repatriación del cadáver y volarán este viernes por la mañana a Roma para comenzar el proceso que les permita traerla cuanto antes a Granada y ha pedido que se respete su privacidad.

Era la tercera vez que la joven española veraneaba en este país junto a su novio, con el que llevaba unos cuatro años de relación y con el que recientemente había adquirido un piso en la capital granadina, que estaban preparando para mudarse. La pareja no estaba casada, según ha aclarado este portavoz familiar después de que en un principio se informara de lo contrario.

Regentaban una pizzería en Granada

La pareja italiana de Ana Huete tenía una pizzería -Pizza Roma- desde tiempo antes y Ana decidió sumarse al negocio tras iniciar la relación con su pareja, con la que vivía actualmente en una casa del barrio del Albaicín, en Granada.

La pizzería, ubicada en el centro de Granada, abrió en 2009 y era un establecimiento al que ella dio un nuevo impulso para conquistar a la clientela con comida tradicional.

El negocio formaba parte de "Outbarriers" (fuera barreras), un proyecto social sostenible que facilita información a invidentes sobre comercios o restaurantes y que acerca estos establecimientos a ciegos. En esta plataforma, la fallecida recalcaba con pasión en un vídeo el sabor de sus productos, la cocina tradicional, los olores del proyecto empresarial que compartía con su pareja, y explicaba que el secreto está en un cocinero italiano para acercar la intensidad italiana a su coqueto establecimiento granadino.

La joven empresaria plasmó también en una conocida red social el viaje que hace casi un año la condujo con su pareja a la vivienda familiar de Illica, municipio en el que ha fallecido como consecuencia del seísmo y en el que presumía de su "gran familia italiana", según informa Efe.

El Ayuntamiento de Víznar declara luto oficial

El Ayuntamiento de Víznar, la localidad granadina del que son vecinos los padres de la única víctima mortal del seísmo de Italia de la que se tiene confirmación, declarará luto oficial ante el profundo pesar por lo ocurrido, según ha explicado su alcalde, Joaquín Caballero (IU).

El primer edil ha detallado que aunque la familia era originaria del pueblo vecino de Alfacar, residía actualmente en una casa de Víznar, donde era "muy querida" y estaba "totalmente integrada".

Desde la madrugada del miércoles, tanto la embajada como el consulado han estado en contacto con las autoridades italianas para conocer la situación de los españoles que podrían encontrarse en las localidades afectadas.

Exteriores ha hecho un llamamiento para que los ciudadanos españoles que pudieran estar en la zona devastada comuniquen su estado y un teléfono de contacto ([phone]) donde se atienden llamadas de emergencia.