Bruno Gazzotti: "'Solos' se adelantó a 'Perdidos'"
Solos (Dib>buks), el premiado cómic de Bruno Gazzotti y Fabien Vehlmann, cuenta la historia de un grupo de niños que despierta en un mundo en el que los adultos han desaparecido y dónde se verán obligados a sobrevivir. Un arranque que podría recordarnos Perdidos (Lost), pero este cómic es anterior a esa famosa serie, como nos ha comentado Gazzotti (Spirou, Tome) en el Salón del Cómic de Barcelona: “Nosotros sacamos el cómic en 2004 y Perdidos se estrenó unos meses después, por lo que nos adelantamos. Al principio nos preocuparon las semejanzas pero luego nos dimos cuenta de que la serie tomaba un rumbo completamente distinto”.
Lo curioso es que la historia podría haberse parecido incluso más: “Fabien –asegura Gazzoti- quería ambientar la historia en una isla desierta pero por aquel entonces yo estaba preparando una historia que transcurría en Nueva York, así que al final decidimos ambientarla en una ciudad”.
E incluso el argumento de este cómic acaba desarrollando una de las teorías más extendidas sobre Perdidos, la de que los protagonistas estaban… Mejor descubridlo vosotros mismos. “Esa otra coincidencia con las teorías sobre Perdidos hizo que nosotros decidiésemos adelantar el gran misterio del cómic al quinto álbum” –añade Gazzotti-.
Gazzotti nos ha comentado cómo surgió el proyecto: “Yo llevaba tiempo queriendo trabajar con Fabien Vehlmann, porque admiraba su trabajo y él también quería colaborar conmigo, pero no nos atrevíamos a confesarlo como dos niños pequeños. Hasa que un día hablamos y el recuperó una vieja idea para otro autor, la idea de unos niños solos en una isla desierta. Y cómo en aquella época yo trabajaba en un cómic ambientado en Nueva York, combinamos las dos ideas”.
Un cómic con el sabor de los clásicos
Este cómic nos recuerda, por el tono, a las grandes novelas de aventuras, como La Isla Misteriosa; y ha sido definido como un cruce entre Los Cinco (Enid Blyton) y la serie Perdidos, por su mezcla de humor, aventuras, thriller y misterio. Aunque también hay claras referencias a otra obra maestra: “Nuestra mayor inspiración es El señor de las moscas (William Golding)” –admite Gazzotti-.
Una serie que, además, transmite a los chavales valores fundamentales como la amistad y el trabajo en común, y hace que se planteen cuestiones fundamentales como ¿Qué pasaría si se quedasen solos? Gracias a su calidad ha conseguido el Premio al Mejor Álbum juvenil en el Festival de Angoulême en los años 2007 y 2010. Además del premio Diagonale a la Mejor serie de 2013.
En cuanto al futuro de la serie, Gazzotti nos comenta que: “Tenemos previsto que dure unos 20 o 21 álbumes (Dib>buks ya ha publicado 9 en cuatro tomos). Ya sabemos cómo va a terminar la historia pero lo que nos falta es ver cómo se desarrolla el camino hasta ese final. Queremos darnos la libertad de tomar nuevos senderos cuando nos apetezca y ver qué puede surgir por ese camino”.
Solos en el mundo
La historia nos sitúa en la pequeña localidad de Fortville, donde nuestros cinco jóvenes protagonistas, Dodji, Leila, Celia, Iván y Terry, se despiertan descubriendo que están completamente solos en el mundo. Deambulando por la desierta ciudad, coinciden y deciden unirse para intentar desvelar el misterio de lo que ha sucedido e intentar encontrar a sus familias.
Un cómic realmente especial gracias al buen hacer de sus autores. El guionista Fabien Vehlmann, que ya nos cautivó con las historias de suspense y de época del imprescindible Green Manor (Dib>buks), y que aquí construye una intriga clásica, con una excepcional descripción de personajes (lo que nos permite identificarnos rápidamente con ellos) y que maneja el suspense de manera magistral.
En cuanto al dibujo, solo podemos hablar maravillas del estilo de Gazzoti, heredero de los grandes autores de la escuela franco-belga y que es expresivo y lleno de movimiento. Y embellecido por un color excepcional. Aunque él es más modesto: “Tengo un estilo muy laborioso y no me considero un buen dibujante, por lo que me cuesta mucho dibujar la serie. Pero sí me considero buen narrador. Hay otros dibujantes excepcionales pero, que, sin embargo, no saben contar una historia. Personalmente, siempre intento mejorar”.
Gazzotti asegura que su experiencia previa con El Pequño Spirou no le ha servido para esta serie: “No, aunque sean historias con niños no tienen nada que ver. Spirou era totalmente humorístico y aquí, aunque los personajes sean caricaturescos, los fondos son muy realistas, como ocurría en Soda”.
Creando un mundo
Una de las cosas que le gusta de Solos es la posibilidad de dibujar cualquier cosa: “En el cómic hay niños de varias épocas –asegura- y eso me da la oportunidad de mezclar épocas y disfrazar a niños de épocas muy distintas, romanos, cowboys, militares... Eso hace que dibujar esta serie sea muy divertido y tenga un toque visual muy interesante”.
Gazzotti asegura que: “Las historias que yo hago son tan variadas en personajes y escenarios que llevarlas al cine sería carísimo, casi impracticable”.
“Creo –bromea- que por eso en Bélgica somos tan buenos haciendo cómics, porque no tenemos dinero para hacer películas. Por eso el cine que hacemos en Bélgica es tan triste y tan deprimente, como el de los hermanos Dardenne”
La película
Ya se ha estrenado en Francia la película sobre el cómic, que todavía no tiene fecha de estreno en España. Está dirigida por David Moreau, responsable de las películas de terror Ellos y Visiones, y la comedia 20 años no importan. “Que alguien confíe en tu trabajo como para poner tanto dinero y hacer una película es un orgullo –asegura Gazzotti- . Ha sido como la guinda a nuestro trabajo”.
“Ya tuvimos una oferta para adaptar el cómic al cine –asegura- pero los productores querían que no se explicase el por qué desaparecían los padres de los niños, por lo que nos negamos. Pero cuando nos llamó David y estuvo dispuesto a respetar la historia confiamos en él, porque habíamos visto que había dirigido películas de horror y comedia. Y estamos muy contentos con el resultado. Cuando en Angulema se hizo un pase de la película, al público joven le encantó. Ha sido extraordinario”.
En cuanto a otros proyectos, Gazzotti asegura que: “Mi dibujo es muy laborioso y me lleva mucho tiempo, por lo que lo veo complicado. Aunque ya he hablado con otros guionistas”.