Eric Maltaite: "No vamos a desvelar todos los misterios sobre Choc"
- El hijo del mítico dibujante Will, nos descubre los orígenes del popular villano
- Un cómic galardonado en el Festival de Angulema de 2015
La mítica serie francobelga Tif y Tondu, dibujada por Will, tenía uno de los villanos más famosos del cómic francobelga: Choc, cuyo rostro seguía siendo una de las mayores incógnitas de la historieta europea. ¡Hasta ahora!, porque el hijo de Will, el dibujante Eric Maltaite (421, Zambada) se ha unido al guionista Stéphan Colman (Billy the Cat, Marsupilami) para descubrirnos el misterio en una serie de tres tomos Choc (Norma).
Eric Maltaite nos ha hablado en el Salón del Cómic de Barcelona, en un casi perfecto castellano, sobre esta spin of del gran clásico de la historieta europea: “Cuando mi padre dejó de dibujar el cómic no tenía los derechos de Tif y Tondu, pero sí los del villano Choc, y me dijo que podía hacer lo que quisiera con él. Para mí fue todo un reto, porque es un personaje emblemático del cómic belga y he tardado unos 20 años en atreverme a hacerlo. Y sólo lo he hecho como un homenaje a mi padre”.
“Como tengo un amigo guionista, Stéphan Colman, le propuse que hiciéramos algo –continúa-. El tardó otropar de años en decidirse, pero al final lo hemos logrado. Ha sido muy complicado encontrar la fuerza para hacer este homenaje a la obra de mi padre”.
“Me gustaba el lado oscuro, pero humano, del personaje”
En cuanto a lo que le atraía de este enigmático personaje, Maltaite asegura que: ““Me gustaba el lado oscuro, pero a la vez humano, del personaje. Parece un malvado integral, pero al escarbar creo que hemos encontrado su parte humana, que ya se intuía en la época de mi padre”
“Por aquel entonces era un villano sin escrúpulos –añade Eric-, aunque la censura le impedía cometer sus crímenes de formas tan horrendas como lo hace en nuestra versión. Pero ya había indicios de que tenía una parte humana. Y eso es lo que hemos buscado. El por qué ha decidido ser tan malo”.
Al actualizar al personaje han intentado ser todo lo fieles posible a la obra original: “He revisado la obra completa de mi padre –asegura Maltaite- buscando esos indicios que nos permitieran modernizarle. El personaje apareció por primera vez en 1954 y ya era el líder de una organización criminal, por lo que debía tener unos 40 años. Al proyectarnos al pasado, antes de la Segunda Guerra Mundial debía tener 15 años y basándonos en eso pensamos que había nacido durante la Primera Guerra Mundial. Con esos razonamientos fuimos construyendo la historia poco a poco”.
La historia es una precuela
La característica más llamativa del personaje es el yelmo que le cubre la cara, ocultando su identidad. Un misterio que los autores nos desvelan después de más de 60 años: “El personaje de mi padre evolución durante toda su historia –asegura Maltaite-. Nosotros intentamos dibujarlo como lo hacía él al final, pero no funcionaba; por lo que decidimos dibujarlo como en sus orígenes. Y al final decidimos que nuestra historia fuera una precuela, el origen del personaje antes de aparecer en la serie de Tif y Tondu”.
En cuanto al dibujo: “No he intentado imitar el estilo de mi padre –asegura Maltaite-, sino que he usado mi propio estilo, ya que es un cómic más realista que los de mi padre”.
Lo fundamental es que el personaje sigue siendo un gran villano: “Hemos hecho una historia que transcurre en los años 50, pero la forma de contarla es muy actual”.
“No vamos a quitar la magia al personaje”
Desenmascarar a un personaje tan enigmático ¿no es quitarle parte de su magia? “Indudablemente es un riesgo –admite Maltaite- pero no vamos a descubrir todos los misterios sobre él. Sólo daremos unas pinceladas. Lo que más nos importa no es desvelar su identidad sino saber porque el personaje es así, por qué se convirtió en un villano”.
“La parte de misterio en la serie de mi padre –continúa- estaba en intentar descubrir quién se escondía debajo del yelmo. Nosotros jugamos con eso, pero no queremos matar la magia del personaje”.
La historia de Choc constará de tres álbumes, de los cuáles Norma acaba de publicar el segundo en España. “Ya estamos trabajando en el tercero y confiamos en terminarlo muy pronto –asegura Maltaite- . Y así concluiré este homenaje a mi padre. No haré ninguno más con sus otros personajes, como Isabel (con Franquin), por ejemplo. Es un homenaje muy especial para mí”.
Y es que revisar el trabajo de su padre ha sido muy especial para el: “Trabajar con ese personaje me ha hecho pensar mucho en mi padre y en lo que viví con él. Cuando yo estaba aprendiendo a dibujar, incluso le ayude con alguna de las historias antiguas de Choc, hace 30 años, por lo que este cómic es realmente especial para mí”.
“No he intentado dibujar como mi padre”
En cuanto al estilo de dibujo, Eric Maltaite asegura que: “No he intentado dibujar como mi padre. Su estilo me influyó mucho al principio de mi carrera, porque trabajé mucho con él. Pero ya he desarrollado mi propio estilo, me ha costado mucho conseguirlo, e imitarle sería dar un paso atrás. Yo tengo mi propia experiencia personal y profesional y tengo que seguir aprendiendo sin mirar atrás”.
En cuanto a sus otras influencias en este cómic reconoce a Gil Jourdan (cómics de estilo belga de los años 60), Jijé, mi padre… y fuera de la escuela francobelga me encanta uno que tiene una exposición aquí, en Barcelona, Milton Caniff. Como Will Eisner, otro de mis ídolos. Me encantaría poder robar alguno de los originales que tenéis aquí en el Salón”.
En cuanto a sus proyectos, Eric Maltaite nos comenta que: “Estoy haciendo un lilbro con Zidrou, que pertenece a una serie de tres, de los cuales cada uno lo dibujamos un autor diferente. Y luego no tengo nada inmediatamente. Tengo que pensarlo”.