25 años sin la desgarrada voz de Camarón de la Isla
- José Monje tendría ahora 67 años si un cáncer de pulmón no hubiese acabado con su vida
- Aquel 2 de julio de 1997 murió el cantaor pero su arte perdurará en el tiempo
- Grabó 200 canciones y publicó 21 discos, entre ellos, 'La leyenda del tiempo'
La voz desgarrada de José Monje, Camarón de la Isla, sigue viva en el recuerdo cuando se cumplen 25 años de su muerte. Fue a los 41 años, de cáncer de pulmón y, aunque su biografía fue corta, su carrera artística como cantaor fue larga e intensa. Grabó 200 canciones y publicó 21 discos.
El “príncipe” del flamenco fue un renovador de este arte e icono de la mitología gitana contemporánea. Una de las figuras gigantes que ha dado el flamenco, la última del siglo XX. Su voz ya es parte del patrimonio artístico de la humanidad.
Sus orígenes están en su isla, San Fernando, donde aprendió de otros grandes como La Perla de Cádiz o Manolo Caracol. Cuando después dio el salto a Madrid, donde conoció a Paco de Lucía, ya llevaba media carrera hecha.
Los primeros discos empezaron llamar la atención por su mezcla de virtuosismo y atrevimiento y por ser muy comerciales, como sucedió con “Al padre santo de Roma”. Estaban en la línea más ortodoxa del jondo. A disco por año, en 1973 aparece el quinto álbum del cantante y primero sin Paco de Lucía.
Pero fue en 1976 cuando Camarón da rienda suelta a sus nuevas ideas y hace un álbum lleno de hallazgos heterodoxos. Fue en "Rosa María", en el que llega a hacer unas sevillanas acompañadas por flauta y bajo.
Innovadora 'La leyenda del tiempo'
En 1977 editó “Castillo de arena”, el primer álbum en el que firma composiciones propias. Pero el gran salto lo dio el cantaor dos años más tarde con “La leyenda del tiempo”, que contó con la colaboración del grupo andaluz Alameda y la guitarra de Tomatito, que le acompañaría hasta el final de su vida. Ahora, este disco es fuente de estudio para todos.
Después le siguieron éxitos con “Como el agua”; “Calle Real”, “Te lo dice Camarón”; “Flamenco vivo”; “Soy gitano” y “Potro de rabia y miel”, en este último tocarían juntos Tomatito y Paco de Lucía.
A punto estuvo de no celebrarse su último concierto. La sala del colegio Mayor San Juan Evangelista estaba a rebosar, pero Camarón no quería cantar, alegaba cansancio.Tomatito diría más tarde: "entonces no sabíamos que ya estaba enfermo".
Finalmente salió al escenario y se arrancó con la soleá "salud es lo que yo quiero". El canto lo transformó. Era un 25 de enero de 1992. Seis meses después fallecía, el 2 de julio, en Badalona.
Origen y carácter humilde
Tímido, introvertido y melancólico, a Camarón le gustaba ser tratado como uno más. En ello coinciden los que lo conocieron, que además lo señalan como hombre humilde, que se vio abrumado por la divinización de su figura.
Hijo de un herrero y de madre canastera, de quien Camarón diría "cantaba pa'rabiar, puedo presumir de haberlo aprendido todo de ella". Pero en el cante, no fue la única mujer a la que idolatró, también estaban "La Niña de los peines" y "La Perla de Cádiz".
De la fragua de su padre diría en una canción de 1986: "cuando los niños en la escuela / estudiaban pa' el mañana, / mi niñez era la fragua: / yunque, clavo y alcayata". Más tarde, este grande del flamenco también fue "billares, hachís, bocadillos, cocaína, papel de aluminio, ácidos y tabaco rubio americano, galas en América y desplantes en actuaciones" (Francisco Perejil, en su libro "Camarón de la Isla").
De los plantes diría su mujer, La Chispa: "si no tenía bien la garganta o había un sonido de tómbola, cortaba rápido".
Homenajes en su San Fernando natal y en La Línea de la Concepción
El Ayuntamiento de San Fernando (Cádiz) ha organizado este domingo una ofrenda floral en el mausoleo de José Monje en el cementerio, en una jornada que se cerrará con un concierto gratuito de Arcángel y José Mercé.
"Abordamos esta efeméride lejos de toda pena. Lo hacemos desde la ilusión y la constancia de que el arte de José permanece más vivo que nunca gracias a su legado", ha señalado Fran Romero, teniente de alcaldesa de San Fernando, una ciudad que, tras recuperar la casa natal del cantaor, tiene en proyecto construir un Museo sobre su vecino más universal.
En La Línea de la Concepción, ciudad a la que Camarón se trasladó cuando en 1976 se casó con Dolores Montoya, La Chispa, también el recuerdo del cantaor aflora estos días.
"La Línea fue la segunda patria chica de Camarón, aquí se casó, aquí nacieron sus hijos y aquí, cuando conoció el alcance del cáncer que terminó con su vida, buscó ayuda en la oración, frecuentando el culto", ha explicado el escritor y periodista, Juan José Téllez, que esta noche ofrece la ponencia Camarón y La Línea de la Concepción.
Madrid también se suma al recuerdo
Madrid, otro de los principales escenarios vitales de la leyenda del cante, también lo conmemora. Sus dos hijas, Gema y Rocío, y su hijo Luis Monje actuarán, las dos primeras al cante y el segundo a la guitarra, ofrecen este domingo un concierto en el Centro Conde Duque.
La actuación es un homenaje a su padre y, al mismo tiempo, una presentación "oficial" del grupo que han formado sus herederos.