Momentos curiosos de una campaña fuera de lo común

• A horas del cierre de la campaña electoral, recopilamos 12 detalles del 21-D

El candidato del PSC a la presidencia de la Generalitat, Miquel Iceta, muestra una caja de caramelos "Icetaton", en un acto electoral sobre políticas europeas en Barcelona.

Las elecciones catalanas que se celebran este jueves 21 de diciembre son anómalas, y decir esto cuando la campaña va a bajar el telón es un tópico, porque es algo que se ha hecho observar repetidamente desde el mismo momento en que no fueron convocadas por el presidente de la Generalitat, sino por el presidente del Gobierno, que el primero está cesado y lo reclama la justicia, que ha hecho campaña desde algún lugar de Bélgica, que una joven de 18 años votará por él porque no se registró y que reclama ser "restituido" pero sería detenido en cuanto pusiera un pie en España.

Y todo ello concurre únicamente en la persona de Carles Puigdemont. El vicepresidente y líder de ERC, Oriol Junqueras, favorito a ganar las elecciones, lleva mes y medio en prisión y ha desarrollado una campaña epistolar y tampoco podría ser investido en caso de ganar -y conformar una mayoría de gobierno- a no ser que el juez del Tribunal Supremo haga una concesión extrordinaria.

Dicho lo cual, las típicas anécdotas que han podido caracterizar y, en ocasiones, quitar hierro a una campaña de antecedentes y repercusiones tan graves pueden parecer una frivolidad en un clima de auténtica fractura social y política, pero haremos el intento con 12 detalles del 21-D:

1. "Matraca" y "monotema"

Si los propios líderes reconocen que el independentismo se ha convertido en una "matraca" y un "monotema" en la política catalana, mal empezamos. Pero así ha sido también en la campaña, sin apenas cabida para otras cuestiones en los mítines, intervenciones y debates. De hecho, es uno de los pocos conceptos (por llamarlo de alguna manera) en los que han estado de acuerdo la mayoría de los candidatos

Y cuando se buscaba salir de este guion dominante del proceso independentista, el artículo 155 y sus concomitancias, se subrayaba que era porque en tal o cual partido querían dejar de hablar del "monotema"... después de haber dedicado a este la mayor parte del discurso. Inevitable e inevitado.

2. ¿Sabes más que un político en campaña?

La precampaña ya indicó que el discurso giraría en torno al enfrentamiento entre los llamados constitucionalistas y los independentistas. En un debate cara a cara televisivo entre las candidatas Marta Rovira (ERC) e Inés Arrimadas (Cs) ninguna de las dos aprobó un test básico del periodista Jordi Évole sobre la tasa de paro en Cataluña, el número de refugiados que esta acoge, las mujeres que han muerto por violencia machista y los barracones en colegios catalanes. Ya se encargaron de recordar este suspenso los demás rivales políticos.

3. Tres debates, tres candidatos de ERC

Cundió cierta desconfianza en las filas de ERC sobre las habilidades en oratoria de la número dos de su lista, o bien los republicanos quisieron demostrar su profundidad de banquillo a falta de la presencia de su cabeza de lista. O bien ambas razones a la vez.

El caso es que hubo tres debates televisivos en la campaña y a cada uno de ellos presentó ERC a un representante: Roger Torrent (número dos por Girona), el exconseller de Justicia Carles Mundó, convertido en una de las "estrellas" de la campaña de los independentistas tras su paso por prisión, y la número dos y líder de facto de la formación, Marta Rovira.

Roger Torrent, Carles Mundó y Marta Rovira, tres candidatos de ERC para tres debates .

4. Amarillo el independentismo es

Los lazos amarillos han sido protagonistas de esta campaña en la solapa de los candidatos independentistas -a excepción del candidato de la CUP Carles Riera-, como símbolo para la reivindicación de la libertad de los políticos y líderes independentistas presos.

Lazos amarillos, Bufandas amarillas, abrigos amarillos, jerséis amarillos, enormes lazos amarillos en las butacas vacías de los mítines, balcones amarilleados con lazos, banderas y sábanas, también en las instituciones públicas, con la consiguiente amonestación (¿tarjeta amarilla?) de la Junta Electoral Central para que se retiraran y para que tampoco se porten en las mesas electorales el día de las elecciones.

Cataluña y varias ciudades europeas se han teñido de amarillo para reivindicar la salida de la cárcel de los políticos independentistas presos.

Lucían también en las solapas de los candidatos de ERC y JxCat en los debates electorales, únicamente 'contraprogramados' por el candidato del PPC, Xavier García Albiol, que abrochaba en su solapa un lazo que fusionaba el rojo y amarillo de la bandera española y el amarillo y rojo de la 'senyera' catalana.

5. Con ustedes, Carles Puigdemont: dentro, vídeo

Si hasta hace poco el plasma era sinónimo de políticos que no daban la cara directamente ante la opinión pública y suponía un modo de denostar la falta de rendición de cuentas de dicho líder, en esta campaña electoral... más de lo mismo, porque es un recurso que han empleado los miembros del cesado Govern que, ante el requerimiento de la justicia, se marcharon a Bélgica, con especial profusión el cabeza de lista de JxCat, Carles Puigdemont.

Puigdemont interviene por videoconferencia en un acto de campaña de JxCat. EFE

Desde el punto de vista del relato político independentista, el vídeo pregrabado o en 'streaming' de Puigdemont ha sido el instrumento diario del expresidente para manifestar que quiere volver a ser presidente, y lo anormal y a la vez cotidiano de este acto ha centrado buena parte de la atención mediática en lo que salía por otra pantalla.

6. Cómo apoyar a dos partidos a la vez y no estar loco

¿Se puede querer a dos partidos a la vez y no estar loco? El exprimer ministro francés Manuel Valls y el ex líder de Podemos en Cataluña Albano-Dante Fachin han atestiguado que se puede arropar a varios candidatos a un mismo tiempo y seguir siendo políticamente coherente.

Manuel Valls acudirá a dos actos del PP y Cs este sábado, y Albano Dante-Fachin alterna apoyos a ERC y la CUP con críticas a los 'comunes'. EFE

El exprimer ministro francés intervino en una misma mañana en un café-coloquio con los 'populares' Xavier García Albiol y María Dolores de Cospedal, y en un debate sobre Europa en un acto de Ciudadanos, con Albert Rivera, Inés Arrimadas y el escritor Mario Vargas Llosa.

Y el defenestrado líder de Podem ha estado haciendo dobletes en las campañas de ERC y la CUP, sin ahorrarse críticas a Catalunya en Comú. Formas de entender las demandas de transversalidad política en la Cataluña actual.

7. Cartas desde la celda

Parafraseando a Bécquer, aunque desde una celda bien diferente, Oriol Junqueras ha desarrollado una campaña electoral a la fuerza epistolar, ya que tenía vetadas otras formas de comunicación oral o virtual (en su cuenta oficial de Twitter solo aparecen retuits), en la que ha dado rienda suelta a sus pensamientos en un estilo ciertamente intimista y reflexivo.

Ha concedido entrevistas por escrito a diferentes medios, cuidando sus mensajes y sus palabras para no empeorar su situación procesal, pero no ha podido evitar, al igual que el expresidente de la ANC Jordi Sànchez, difundir un audio con sus palabras para una entrevista radiofónica, por lo que ambos han sido sancionados por Instituciones Penitenciarias.

8. Iceta te receta el 'Icetatón'

No procede del laboratorio farmacéutico, sino del laboratorio de campaña del candidato del PSC a la Generalitat, Miquel Iceta. Su campaña ha estado regada de pareados sobre "la receta de Iceta" y otros ripios cosecha del primer secretario de los socialistas catalanes, con los que ha querido desdramatizar la campaña y teñirla de su personalidad.

Según la caja del producto, las pastillas de Icetatón "ayudan a recuperar la economía y el estado de ánimo de los catalanes". Si también aliviaran la irritación de garganta, le habrían hecho un favor a sí mismo y a la fatigada voz de Inés Arrimadas, que se ha pasado los dos últimos dos días tosiendo por las televisiones.

9. Junqueras, ese "osito" achuchable

También salida de la imaginación de Iceta, una metáfora un tanto atrevida para referirse a la cordialidad y bonhomía del líder de ERC. El candidato del PSC dijo en sendas entrevistas -es decir, no fue un lapsus- que Oriol Junqueras era "como el osito que todo el mundo quiso tener", por sus formas "cordiales" y porque es una persona "muy agradable".

La vez anterior que alguien se refirió a Junqueras como un "osito" supuso una investigación interna a unos agentes de la Policía, y la vez siguiente que alguien diferente de Iceta la ha vuelto a emplear ha sido asimismo con evidente ánimo despectivo. Corramos un velo sobre el asunto.

10. La cabeza de cordero como síntoma de una sociedad rota

Como también es un punto negro en esta campaña tener que informar de actos de sabotaje e intimidación en las campañas de los partidos constitucionalistas, en forma de escraches, amenazas a quienes colgaban carteles y otros actos incívicos como el de dejar una cabeza de cordero cruda sobre una mesa informativa de Ciudadanos.

Mensajes homófobos, insultos machistas, pintadas, escraches en actos de campaña... Nada parecido con la noción de una sociedad democrática y políticamente madura.

11. Tomarse el mitin a chirigota

Quizá una buena reacción sea tomárselo a chirigota, en el sentido literal de la expresión, aunque de paso sea también un gesto marketiniano de tu campaña electoral.

Así lo hizo Inés Arrimadas en su acto central de campaña en L'Hospitalet de Llobregat, para refutar a la expresidenta del Parlament Núria de Gispert, quien le preguntó/invitó a marcharse a su Cádiz natal si no deseaba cuatro años más de procès.

Así lo que hizo Arrimadas, según sus propias palabras, fue traer Cádiz a Cataluña e invitar a una chirigota a cantar en un mitin lleno de simpatizantes de orígenes familiares andaluces.

La chirigota del Selu de Cádiz ameniza el acto central de la campaña de Ciudadanos. CS

12. La madre de Puigdemont: "No me llama, eso es que está haciendo cosas"

Y en todo esta abundancia mediática de gestos y de imágenes, de sobreexposición y mensajes, ha faltado uno. Núria Casamajo, la madre del expresidente Puigdemont, afirmó al semanario francés Le Journal du Dimanche que su hijo no le llama desde Bélgica, lo que ella asume porque, según explicaba, "eso es que está haciendo cosas".

Seguro que todavía el expresidente catalán tiene en mente muchas cosas por hacer, pero estaría bien que, si no lo ha hecho ya, el 21-D, entre llamada y llamada con otros candidatos (dando o recibiendo enhorabuenas) dé un toque a su madre, que ya casi es Navidad.