Dani Fano: "Miguel Mármol fue un luchador perseguido durante toda su vida"
- El dibujante donostiarra cuenta la historia del famoso sindicalista salvadoreño
- “Tuvo una vida llena de sacrificios, miserias y peligros”, asegura
El dibujante Dani Fano (San Sebastián, 1968) firma uno de los cómics más sorprendentes e interesantes de este 2018: Los doce nacimientos de Miguel Mármol (Astiberri), basado en la increíble historia del sindicalista salvadoreño Miguel Mármol (1905-1993), que se pasó casi toda su vida luchando; y que estuvo a punto de perder la vida en numerosas ocasiones. De ahí el título del cómic.
“Miguel Mármol fue un sindicalista salvadoreño incansable e incombustible, y uno de los fundadores del Partido Comunista Salvadoreño –nos cuenta Dani Fano-. Yo descubrí la figura de Miguelito a través de Eduardo Galeano. En principio a través de un texto breve de El libro de los abrazos y más tarde en el tercer tomo de Memoria del fuego, El siglo del viento, donde los nacimientos de Miguel Mármol hacen las veces de eje del libro”.
“Después de leer esos textos fue que empezó a rondarme la idea de hacer un cómic sobre el personaje –continúa-. Así que comencé a investigar y llegué al libro Miguel Mármol de Roque Dalton. Leyendo ese libro me enamoré completamente de Miguelito y decidí que tenía que hacer algo, que ya no había vuelta atrás. Pero desde aquí me era imposible afrontar un trabajo de esa magnitud sin ayuda, al proyecto le faltaba un pilar fundamental”.
“Fue entonces –añade el dibujante- cuando contacté con Carlos Henríquez Consalvi Santiago, fundador y locutor de Radio Venceremos y actual director del Museo de la Palabra y la Imagen, dedicado a la difusión y conservación de la memoria histórica salvadoreña. Poder contar con la ayuda del museo fue lo que le dio sentido y firmeza al proyecto, así que puse en marcha. Pero si algo me ha atado definitivamente a esta obra es ver las similitudes de la lucha de los salvadoreños con la lucha de mi propio pueblo, descubrir que la historia de Miguelito y de sus compañeros es también la historia de mis abuelos”.
Estuvo a punto de morir en doce ocasiones
Dani Fano nos resume el argumento del cómic: “Los doce nacimientos de Miguel Mármol, aunque cuenta la vida de Miguel Mármol, no es una biografía al uso. La historia de Miguelito viene contada a través de sus doce casi muertes, de sus doce resurrecciones, sus doce nacimientos; tomando la idea de Eduardo Galeano en El siglo del viento. El cómic está basado en los textos del escritor uruguayo y sobre todo en los de Roque Dalton, pero también he ido un poco más allá para contar algunos aspectos de la vida Miguel que nadie había contado antes. Creo que también se puede decir que a través de la vida de este sindicalista irredento se abre una puerta a la historia salvadoreña del siglo XX”.
“En su día –continúa- esa idea de Galeano me pareció tremendamente atractiva. Creo que refleja muy bien lo que es la vida de un luchador siempre perseguido, siempre en la clandestinidad. La vida de Miguel y la de muchos militantes comunistas de aquella época era una vida de gran sacrificio personal, llena de miserias y llena de peligros. El hecho de que Miguel Mármol superara todas esas esas dificultades y siguiera luchando sin descanso le confiere al personaje un carácter épico a la altura de cualquier mito de la historia”.
“Creo –añade- que para escapar de la muerte tantas veces como lo hizo Miguelito tienen que darse una serie factores: en primer lugar mucha suerte, en segundo lugar un físico privilegiado capaz de afrontar infecciones, heridas y hambre, en tercer lugar una inteligencia natural para adelantarse a sus perseguidores y, por útlimo, una gran convicción en sus ideales que le empujara a seguir y a sobrevivir. Todo eso lo tenía Miguel Mármol”.
"La lucha con uno mismo, con el desaliento"
Con una vida tan intensa como la de Miguel Mármol, es imposible recoger toda su biografía en un solo cómic. “Aparte de esos momentos límite en la vida Miguel –asegura Dani-hay varios muy importantes, que incluso alguno ni siquiera sale reflejado en el libro. Un momento que fue muy importante en la vida de Miguel es el viaje que hizo en 1930 a la URSS junto con Modesto Ramírez, otro militante comunista salvadoreño. Fueron invitados a participar en el Congreso de la Sindical Mundial Roja (PROFINTERN), y es un viaje que marcó profundamente a Miguel. Lo que ocurre es que narrar ese viaje me pedía una cantidad tan grande de páginas que me ponía patas arriba la estructura del guión. Es un viaje que da para todo un cómic en sí mismo”.
“Pero para mí –añade el autor- el momento más destacable (y mi capítulo favorito del libro), es el del octavo nacimiento, cuando él sale de la cárcel tras dos años de aislamiento. Sus compañeros recelan de él porque creen que ha pactado su libertad a cambio de traición, el dictador Martínez impide que le den trabajo y su mujer le ha abandonado llevándose a sus hijos harta de tanta miseria. Sin nada, ni nadie, piensa en quitarse la vida, pero tras un encuentro con un muchacho decide seguir adelante. Esa creo que es la clave de todo gran luchador, la lucha con uno mismo, con el desaliento, con las ganas de abandonar. Esa es la lucha que siempre ganó Miguelito”.
“Ganó muchas batallas pero perdió todas las guerras”
Pero… después de toda una vida luchando ¿Qué consiguió Miguel Mármol? Dani nos comenta que: “Como figura en el último capítulo del libro en boca de Miguelito, ganó muchas batallas pero perdió casi todas las guerras. En las luchas sociales no existen victorias definitivas, siempre hay que seguir peleando, la injusticia y la desigualdad son una constante en la historia de la humanidad”.
“Ese –añade Dani- es seguramente el legado de Miguel Mármol: que la lucha no termina nunca, que hay que luchar siempre, y que hay que hacerlo con convencimiento y alegría. Por todo ello la gente trabajadora y humilde recuerda a Miguel Mármol con mucho cariño, y aunque parezca mentira, yo diría que hoy día hasta en los sectores más conservadores de la población se le recuerda con respeto. Al fin y al cabo, no lucho por él sino por los demás, y nunca pidió nada a cambio. Es difícil no admirar algo así”.
Cómic y realismo mágico
En cuanto a sus influencias en esta historia, Dani confiesa que: “Creo que tengo todas. Cada vez que leo un cómic veo algo interesante que deseo incorporar a mi siguiente proyecto. Fundamentalmente es el cómic francobelga el que más me ha influido, el cómic europea en general. Pero también son un gran admirador de Will Eisner o Joe Sacco. Creo que es muy importante ver el trabajo de los demás para crecer y mejorar. Mis compañeros más cercanos, los autores vascos que me rodean, me han enseñado casi todo lo que sé”.
Sin olvidar las literarias: “En cuanto a la presencia del realismo mágico en el cómic es evidente. Me encantan García Márquez, Galeano, Dalton, Isabel Allende, Juan Rulfo, Salarrué... no se me ocurre como podía escribir sobre Miguelito sin impregnar el relato de realismo mágico. Eso es El Salvador, y eso es Latinoamérica. Y seguramente eso era también Europa hace menos de doscientos años”.
“Aquí –añade Dani- hemos ido perdiendo el vínculo con la magia, y puede acaso parecernos contradictorio que un comunista tenga esa relación con el mundo mágico de su tierra y con la religión, pero allí en El Salvador eso se vive con increíble naturalidad. La reivindicación del racionalismo científico, indiscutible e indisputable por las “clases bajas”, choca de frente con el mundo mágico y espiritual más asequible y cercano, y por eso precisamente ha sido utilizado como instrumento del poder para el control de la población y la expansión del capitalismo. Ese proceso en latinoamérica, afortunadamente, está por resolverse y abre maravillosas ventanas a la imaginación”.
“Los salvadoreños está acostumbrados a luchar y a sufrir”
Realizar este cómic ha sido para Dani una de esas experiencias que te cambian la vida. Y le ha dado la oportunidad de conocer de cerca a los Salvadoreños: “El Salvador es un país apasionante, magnético. Son gente con mucha energía, muy voluntariosa, acostumbrada a caerse y a levantarse constantemente, ya sea por la presión ejercida por la oligarquía, ya sea porque el volcán o el terremoto ha destruido sus vidas. Como otros territorios en los que la desigualdad económica es muy grande las luchas sociales y la represión han marcado la vida de casi todas sus generaciones. Están habituados a luchar y a sufrir, pero, al igual que Miguelito, toda su lucha la impregnan de una energía positiva muy contagiosa”.
La historia le exigió un exhaustivo trabajo de documentación: “Cuando uno afronta una obra a más de 8.000 kilómetros de distancia la principal sensación es de inseguridad, de estar metiendo la pata constantemente. Solo hay una manera de compensar eso: con una cantidad ingente de trabajo. El trabajo de documentación ha sido exhaustivo, a veces rayando la obsesión, pero no me atrevería a decir que haya sido complicado, ni farragoso. He de reconocer que es una parte de mi trabajo que me encanta. Disfruto mucho sumergiéndome en el trabajo de documentación. Para hacer este cómic ni sé decir cuántos libros, artículos o documentales he visto y leído”.
Finalmente, Dani decidió que tenía que ir allí: “Fui a El Salvador en 2013 a documentarme, entrevisté a familiares de Miguel, a gente que le conoció. Metí muchas horas en los archivos del Museo de la Palabra y la Imagen (MUPI). Intenté empaparme de todo lo concerniente a Miguel Mármol. Pasear por las calles que el paseó, ver los volcanes que el vio. Era primordial intentar entender la identidad de la gente sobre la que iba a escribir. Fue mucho trabajo, pero fue muy divertido y enriquecedor”.
Obsesionado por los detalles
Destacar el dibujo de Dani Fano lleno de detalles hasta extremos obsesivos: “Cuando hago cómic, aunque no lo parezca, creo que cada vez me preocupo menos del dibujo, intento que me salga natural y no pelear demasiado conmigo mismo. Creo que la obsesión por los detalles viene dada por dos aspectos: por un lado, creo que seguramente la inseguridad como dibujante tiene algo que ver, admiro a los ilustradores valientes que con un par de trazos consiguen lo que buscan, pero hace tiempo que sé que yo no soy uno de esos dibujantes”.
“Por otro lado –añade-, disfruto mucho dibujando y a veces se me va la olla. A estas alturas de la película he decidido no pelearme demasiado con mis patologías artísticas, y si una viñeta me pide más detalle se lo doy, y si otra me pide menos la dejaré fluir más ligera. En cuanto al blanco y negro, por la época en la que se desarrolla la historia, la elección ha sido fácil y natural. No lo veía de otra manera. Miguel Mármol nació en 1905 y el cómic termina en 1992. Toda la documentación gráfica de principios de siglo que tenía en mis manos era en blanco y negro”.
En cuanto a sus próximos proyectos, Dani nos avanza que: “Es una serie para la revista de cómic Xabiroi sobre la figura del trikitilari Jazinto Rivas Elgeta –que curiosamente nació el mismo año que Miguel Mármol–. El guión correrá a cargo de Koldo Izagirre, yo haré los dibujos y Garluk Agirre le pondrá el color. Un gran equipo con el que estoy deseando empezar a trabajar. Elgeta es un personaje con una vida increíblemente novelesca y creo que nos va a dar mucho juego. Primero se publicará en la revista por capítulos y luego se recogerá en un álbum la historia completa”.