"El fondo marino ya es un vertedero"
- ¿Es el plástico una amenaza real para nuestros mares y océanos? Descúbrelo en Frente al espejo
- En Portada aborda el vertido de plásticos en el mar en #VertederoNostrum, que se estrena el 14 de febrero a las 23:45 h. en La 2
“Sabemos que el fondo marino ya es un vertedero. Si no tomamos medidas drásticas para reducir la magnitud de este problema, sabemos que en 10 años o quizás menos, al mar lo podremos llamar mar de plástico”, nos advierte el fundador de la ONG griega Aegean Rebreath, George Sarelakos.
George lleva 20 años buceando por todo el mundo y al ver con sus propios ojos un fondo marino cada vez más contaminado, decidió hacer algo para sacar a la luz un problema que a menudo queda oculto bajo el mar. Los buzos de Aegean Rebreath acuden a Poros, una pequeña isla que está a unas dos horas en coche de Atenas.
Nos sumergimos con ellos para comprobar de primera mano el nivel de contaminación marina. En zonas de tránsito y alta actividad humana, el fondo marino está plagado de basura: el puerto de Poros es un buen ejemplo. En unas horas, los voluntarios han sacado todo tipo de objetos: ruedas, vasos, latas, sillas, una mesa… y hasta un carro de supermercado.
Los servicios de limpieza municipales llevan la basura extraída hasta el puerto al que llegan los ferries, la principal entrada a la isla. De unos 200 metros cuadrados de superficie han obtenido unas dos toneladas de residuos. El fundador de la ONG, George, expande la basura, para que quede a la vista de los habitantes y visitantes de la isla: “Cada lugar bajo el mar aquí en Poros está fuertemente contaminado. Y nuestro mensaje a sus ciudadanos es que tienen que cambiar su comportamiento, su cultura. Si no, ya hay efectos graves en el entorno y tendrán que hacer frente a pérdidas importantes en cuanto al turismo, porque su mar será un mar de plástico”, asegura George.
El alcalde de Poros, Yiannis Dimitriadis, sabe que la contaminación podría arruinar este paraje de una singular belleza, en el que la gran mayoría de sus habitantes vive del entorno marino y de su atractivo turístico. “Cuando un lugar no está limpio, aunque no sea culpa tuya, tienes que hacer algo. No puedes quedarte sentado esperando y viendo el daño”, nos dice el edil. Y nos lleva a una cala del norte, a la que sólo se puede acceder en barco. Parece una playa idílica, pero al acercarnos vemos los efectos de la contaminación. La imagen es sobrecogedora: Las olas van escupiendo la basura, que ha recorrido decenas de kilómetros desde Atenas y la región de Ática. El 80% de los residuos que hay en playas, mares y océanos son plásticos.
“Los plásticos flotando en el mar son como una plaga de medusas. Cuando tienes una plaga de medusas, la gente no quiere acercarse al agua ni pasar tiempo en el mar. Si la gente no viene, no hay negocio”, nos explica a bordo de su velero Richard Kouvaras, propietario de Greek Sails.
Hacemos una nueva inmersión con los buzos de Aegean Rebreath. Abandonamos la isla de Poros para ir al rescate de “redes fantasma”, redes de pesca abandonadas que, en el fondo del mar, siguen atrapando peces y otros organismos vivos. Al ser de plástico, podrían tardar en descomponerse hasta 600 años.
El plástico ya es, para muchos expertos, la mayor amenaza para el medio ambiente. Cada segundo, 200 kilos de basura van a parar a mares y océanos. Y si el consumo y contaminación de este material se mantiene al ritmo actual, se calcula que en el año 2050 habrá en el mar más residuos plásticos que peces y organismos vivos.
Conscientes de la importancia de la concienciación, la Asociación Helénica de Protección Medioambiental Marina HELMEPA, lleva 35 años organizando limpiezas de playas, sobre todo, con los más pequeños. En esas actividades, clasifican por materiales los residuos que recogen y ayudan a mapear el impacto de la contaminación marina. “En los últimos años, de los diez objetos más frecuentes en las playas griegas, ocho son de plástico, como pajitas, bolsas, tapones, botellas… Y todos están relacionados con actividades de ocio en las playas y en zonas costeras”, concluye Costas Triantafillou, de HELMEPA.
Las organizaciones medioambientales exigen que tanto las autoridades como la industria del plástico y la ciudadanía tomen medidas urgentes para abordar este reto global. El experto en residuos marinos del Plan de Acción de la ONU en el Mediterráneo, Christos Ioakeimidis, nos da algunas claves: “La cuestión no es demonizar el plástico. Hay algunos plásticos, que llamamos de un solo uso, que parecen ser los más peligrosos.” El Parlamento Europeo ha prohibido los plásticos de usar y tirar para 2021. Pero todos los actores coinciden: es importante una regulación sobre su producción y gestión, pero gran parte de la solución pasa por la ciudadanía. Ante este reto global, cada gesto individual cuenta.