Las últimas matanzas por la violencia interétnica eleva a 600 el número de víctimas en Mali
- Este fin de semana han sido asesinadas153 personas, y otras 73 han resultado heridas, en un poblado del centro de Mali
- Las disputas se deben al acceso al agua y a la tierra, pero en ocasiones buscan erradicar a individuos de grupos extremistas
La matanza ocurrida este fin de semana en un poblado del centro de Mali, en el que murieron al menos 153 personas y otras 73 resultaron heridas, pone en evidencia un ciclo de violencia étnica que empezó hace un año y en el que 600 personas han sido asesinadas, según ha revelado hoy la ONU.
"Los terribles ataques del sábado en Mali marcan un repunte en los asesinatos en la región de Mopti en el intento de autodenominados grupos de autodefensa de erradicar a elementos extremistas ", ha comentado este martes en Ginebra la portavoz de la Oficina de Derechos Humanos de la ONU, Ravina Shamdasani.
Según las cifras de ese organismo, en el último año alrededor de 600 mujeres, niños y hombres murieron en esos episodios violentos y miles de personas se vieron forzadas a desplazarse para escapar de ellos.
Quema de casas y depósitos de alimentos
De esos muertos, 219 corresponden sólo a este año en ataques caracterizados por la quema de casas y depósitos de alimentos de comunidades enteras.
Según testimonios que ha recibido la ONU de sobrevivientes de la localidad de Ogossagou, los responsables del ataque fueron miembros de la comunidad étnica fulani, dedicados tradicionalmente a la caza y la ganadería, quienes habrían arrasado con el pueblo utilizando armas automáticas, rifles y otras armas.
"A veces las disputas se deben al acceso al agua y a la tierra, pero en ocasiones se indica que los ataques están motivados por el deseo de erradicar a individuos asociados a grupos extremistas, como Jama'at nusrat al-Islam wal Muslimeen (JNIM), vinculado a la red Al Qaeda en el Sáhara.
Crímenes impunes y apoyo de la ONU
Hasta el momento los crímenes perpetrados desde marzo de 2018 están impunes y las investigaciones ordenadas por las autoridades no han dado lugar a procesamientos.
La ONU ha desplegado de urgencia en la región de Mopti a diez expertos en derechos humanos, un especialista en protección de niños y dos personas que investigarán en el lugar del crimen.
La Oficina de Derechos Humanos, que dirige la alta comisionada de la ONU Michelle Bachelet, dijo que ha ofrecido a las autoridades asistencia para investigar rápidamente estos casos.