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Santander comprará el 25% de su filial mexicana que aún no controla por 2.600 millones de euros

  • Los accionistas que acepten la oferta recibirán un título del banco matriz por cada tres de Santander México

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La presidenta del Santander, Ana Botín
La presidenta del Santander, Ana Botín.

El Banco Santander formulará una oferta de adquisición de todas las acciones de su filial mexicana que no son titularidad del grupo y que representan aproximadamente el 25% del capital social de Santander México, una transacción valorada en cerca de 2.600 millones de euros que se espera lanzar y liquidar en la segunda mitad del año.

Los accionistas que acepten la oferta recibirían 0,337 acciones de nueva emisión de Banco Santander por cada acción de Santander México y 1,685 american depositary shares (ADS) de Banco Santander por cada una de Santander México, según ha informado este viernes la entidad.

La ecuación de canje implica una prima del 14%, teniendo en cuenta los precios de las acciones de Banco Santander y Santander México al cierre de los mercados el jueves y del 22% sobre el precio medio ponderado por volumen del último mes.

En el caso de que toda las acciones titularidad de accionistas minoritarios aceptaran la oferta, considerando la contraprestación actualmente prevista, Banco Santander debería emitir aproximadamente 572 millones de acciones, lo cual representa un 3,5% del capital social actual de Banco Santander. Al precio de cierre del jueves, 4,477 euros, dichas acciones suponen casi 2.600 millones de euros.

Dividendos incluidos

El grupo presidido por Ana Botín ha explicado que la ecuación de canje tiene en cuenta tanto el dividendo con cargo a los resultados de 2018 de Santander México como el dividendo complementario que Banco Santander quiere distribuir a principios de mayo y cuya aprobación será sometida a la junta general de accionistas este viernes.

Los accionistas de Santander México que acepten la oferta tendrán derecho al primer dividendo a cuenta de Banco Santander con cargo a 2019 que espera abonarse entre octubre y noviembre de este año. Debido a que se trata de una oferta voluntaria, los minoritarios de la filial mexicana pueden participar o no en la operación, que no estará sujeta a un nivel mínimo de aceptación.

La ecuación de canje preverá un ajuste al alza que refleje, para el caso de que la liquidación ocurra después de la fecha de referencia del dividendo que se espera pagar por Banco Santander entre octubre y noviembre, el valor de ese dividendo y de cualesquiera dividendos posteriores de Banco Santander que los accionistas aceptantes no hayan recibido, y un ajuste a la baja por el valor de cualesquiera dividendos adicionales de Santander México recibidos por éstos después del dividendo que se espera pagar por Santander México en mayo de 2019.

Santander México seguirá cotizando

Actualmente, Banco Santander no tiene intención de solicitar la exclusión de cotización de Santander México de la Bolsa Mexicana de Valores ni de la Bolsa de Nueva York.

En relación con la operación, las acciones de Banco Santander, que actualmente están registradas en el Sistema Internacional de Cotizaciones de la Bolsa Mexicana de Valores, serán registradas en el Registro Nacional de Valores mexicano y cotizarán en la Bolsa Mexicana de Valores.

Según ha informado la entidad, la operación es consistente con la estrategia del grupo de incrementar su peso en mercados en crecimiento y "refleja la confianza de Banco Santander en México y en su filial mexicana, así como en su potencial de crecimiento a largo plazo".

La entidad espera que la operación tenga un return on investment (ROI) de aproximadamente el 14,5%, que sea neutral en beneficio por acción, y que contribuya positivamente al ratio de CET1 del Grupo.

La oferta depende de la autorización de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores mexicana y de la Securities and Exchange Commission (SEC) de Estados Unidos, de la ausencia de cualquier cambio material adverso en la situación financiera, el resultado de las operaciones o las perspectivas de la filial, así como a la aprobación de la junta general del Santander.

Debilidad del orden económico liberal

Ante los accionistas, Ana Botín ha indicado que la globalización, la revolución digital y el impacto de la crisis financiera han generado "oleadas de apoyo a favor de programas y políticos que cuestionan, y en ocasiones desean, debilitar el orden económico liberal sobre el que se ha construido la paz y prosperidad en Europa en las últimas décadas".

El Brexit es el "canario en la mina" que avisa de "los peligros" de ignorar estas oleadas o minimizar las preocupaciones de las personas sobre sus trabajos, prosperidad y futuro. "Europa no es perfecta, pero es el mejor modelo de democracia contrastado, un modelo de sociedad abierta e inclusiva y de economía de mercado. Seamos proactivos, aportemos ideas para construir una Europa aún mejor", ha pedido Botín.

La presidenta ha asegurado que el grupo está preparado ante el Brexit, a pesar de que continúa generando incertidumbre. Los objetivos del Banco Santander son elevar la rentabilidad al 15%, mejorar la ratio de eficiencia entre el 42% y el 45% y generar más capital para llegar al objetivo de máxima calidad del 11-12% y aumentar el pay out al 40-50%.

Botín cree que la entidad logrará alcanzar los objetivos, a pesar de que el entorno "sigue siendo complicado". "El primer trimestre de 2019 supone un buen punto de partida. Crecemos en créditos y depósitos, aumentamos el número de clientes digitales y reducimos la morosidad", ha resaltado. Todo esto en un contexto económico y social "sin precedentes" en transformación y en el que el entorno competitivo de las empresas está cambiando y obliga a todas las entidades a "asumir mayor responsabilidad".

Ana Botín pide a los políticos claridad y cohesión social

Botín ha reclamado a los políticos "responsabilidad y madurez" para alcanzar "un pacto por el crecimiento inclusivo", que huyan del "cortoplacismo", impulsen una agenda reformista con visión de largo plazo y trabajen por la cohesión social, asumiendo que tras las próximas elecciones generales será necesario un pacto entre las distintas fuerzas para llegar a acuerdos.

"Me gustaría pedir a los políticos que hablen claro. Tras las elecciones necesitamos huir del cortoplacismo e impulsar una agenda reformista con visión de largo plazo y la cohesión social, que solo es posible si los empresarios invierten y crean empleo", ha defendido Botín en plena campaña electoral para las elecciones generales.

En esta línea, la directiva se ha mostrado "orgullosa" de España y de sus fortalezas, pero ha apuntado la necesidad de un compromiso permanente con la educación "gobierne quien gobierne", para lo que se requiere una economía que genere los recursos para financiar servicios públicos de calidad. "Una economía fuerte es la gallina de los huevos de oro", ha defendido.

Para lograrlo, la presidenta del Santander ha apuntado que la sostenibilidad presupuestaria, las pensiones dignas pero sostenibles y la estabilidad institucional para atraer las inversiones son las líneas de la política económica que "funciona". Por otro lado, ha apuntado que España "puede y debe recuperar el protagonismo en la construcción europea".