Sánchez y Torra liderarán la mesa de negociación entre gobiernos que arrancará este mes
- Sánchez aboga por la desjudicialización y diálogo "dentro de la ley" y Torra insiste en la autodeterminación
- Es la primera reunión entre ambos tras más de un año de desencuentros
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y el catalán, Quim Torra, encabezarán la mesa de negociación entre gobiernos para encauzar el "conflicto político" en Cataluña, que comenzará este mes de febrero. Ambos se han mantenido en sus posturas y mientras el primero ofrece más autogobierno para esta autonomía, el 'president' insiste en pedir un referéndum pactado de autodeterminación.
Sánchez y Torra se han visto este jueves en el Palau de la Generalitat por primera vez tras más de un año de desencuentros y pese al rechazo de los principales partidos de la oposición en el Congreso. Una reunión que, además, se produce en un clima de incertidumbre con un 'president' que ya no es diputado y que ha anunciado un adelanto electoral aún sin fecha.
El encuentro ha comenzado pasadas las 12:00 en la sala Virgen de Montserrat, un espacio reservado a las audiencias con presidentes y primeros ministros. Ha durado hora y media en la que ambos han discutido principalmente sobre el origen del "conflicto político".
El presidente del Gobierno ha entregado a Torra una "agenda de reencuentro" (.pdf) con seis ejes y 44 puntos para retomar el diálogo político, que propone esa mesa entre gobiernos en febrero, la apuesta por la "desjudicialización de la política", por la supresión de los aforamientos para cargos políticos y la anulación la condena al expresidente de la Generalitat fusilado en 1940 por el franquismo, Lluís Companys.
Sánchez ofrece revertir una década de deudas pendientes
También propone resolver deudas pendientes del Gobierno con la Generalitat durante una década en algunas materias como la financiación autonómica, el apoyo a los servicios públicos o el impulso a las infraestructuras. "Son asuntos que han sido tratados sucesivamente en estos diez años por parte de los presidentes de la Generalitat demandados al Gobierno central", ha expuesto Sánchez en rueda de prensa después de la reunión .
Torra, que ha regalado a Sánchez dos libros sobre la libertad y los derechos humanos, ha reconocido que no ha leído el documento y ha criticado que esas cuestiones no tienen cabida en la mesa de negociación porque "la mitad" de ellas podrían resolverse en un Consejo de Ministros sin mayor complicación: "Deseamos que se solucionen lo antes posible, pero no pueden condicionar la resolución del conflicto".
“Sánchez: "El balance de la última década es lamentable, todos hemos perdido"“
"El Gobierno propone recomenzar. Necesitamos retomar el diálogo en el momento en que los caminos se separaron y en que los argumentos y razones dejaron de escucharse y los agravios a acumularse", ha dicho Sánchez, matizando que el diálogo debe desarrollarse "dentro de la ley", ha reconocido además la dificultad de "ponerse de acuerdo" tras una década, presidida por los desencuentros entre el Gobierno y la Generalitat, cuyo balance "es lamentable": "Nadie ha ganado, todos hemos perdido".
Sánchez, que ha calificado este día como "muy importante", ha reconocido que va a hacer falta "mucha paciencia, determinación y generosidad" por ambas partes porque "hay heridas muy profundas que se han abierto y no se cerrarán así como así" y las posiciones entre ambas partes son muy diferentes.
"No tenemos miedo a hablar de nada", ha afirmado Sánchez respecto a tratar la autodeterminación en las negociaciones. Aunque ha matizado: "Soy un firme defensor del autogobierno de Cataluña, es integrador, aglutina a más catalanes y representa mejor la pluralidad".
Torra pide acordar un referéndum de autodeterminación
Torra, sin embargo, ha pedido a Sánchez no hacer "perder tiempo" con propuestas si no son reales y ha lamentado que no sabe todavía "cuál es la propuesta" del Gobierno.
A su juicio, la negociación debe incluir “el ejercicio del derecho de autodeterminación concretado con un referéndum acordado, válido y con efectos internacionales” y “el fin de la represión, con la amnistía y la desjudicialización de las causas represivas de la Fiscalía o la Abogacía del Estado”, incluyendo la situación de los líderes catalanes en el “exilio”.
Pese a ello, ha defendido que "nunca" se retirará del diálogo con el Estado y ha anunciado que llevará el contenido de la reunión al resto de fuerzas independentistas "para buscar una posición común" y "fijar los términos desde los que se defenderá la posición del Govern catalán".
De esa mesa entre gobiernos dependerá el apoyo de ERC al Gobierno de Pedro Sánchez y a su proyecto de Presupuestos Generales del Estado, en un contexto preelectoral donde además tendrá que luchar con JxCat por liderar el independentismo.
Un recibimiento de gala
Bajo una pancarta por la "libertad de expresión y opinión" en la fachada, Torra ha recibido a Sánchez en la plaza Sant Jaume de Barcelona con una formación de gala de los Mossos d'Esquadra mientras en los alrededores una pequeña concentración se manifestaba contra el Gobierno.
Ambos han desfilado por una alfombra roja al interior del Palau de la Generalitat, donde Sánchez se reunió en 2016, cuando todavía no era presidente del Gobierno, con el entonces 'president' Carles Puigdemont. Sánchez no es el primer presidente del Gobierno en ser recibido con esto protocolo, ya lo hizo José Luis Rodríguez Zapatero en el tiempo del Govern del socialista Josep Montilla.
Sánchez tiene previsto también verse durante su visita a Cataluña con la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau, con los sindicatos catalanes, Foment del Treball y la alcaldesa de Hospitalet d'Llobregat, la socialista Núria Marín, que es a su vez presidenta de la Diputación de Barcelona, antes de emprender su regreso a Madrid por la tarde.