El primer exoesqueleto pediátrico del mundo llega a Guadalajara para rehabilitar a niños con parálisis cerebral
- Se trata de un diseño español que ayudará a caminar a niños con parálisis cerebral
- Unos 300 menores de entre tres y 12 años se podrán beneficiar de este robot
Es la primera vez que Alba pone un pie en el suelo. Tiene cinco años y una parálisis cerebral que le impide caminar. Esta mañana llegaba al centro de la Fundación Nipace en Guadalajara algo nerviosa por probar “el robot”. Se trata del exoesqueleto pediátrico ATLAS 2030, un dispositivo que permite la marcha adelante y atrás de niños de entre tres y 12 años.
“La niña se adapta bien y aunque ella no es consciente, nosotros sabemos lo importante que es este paso para su desarrollo”, nos cuenta Beatriz la madre de Alba que lleva meses esperando probarlo.
Inteligencia artificial
El ATLAS 2030 está formado por ocho motores distribuidos en caderas, rodillas y pies. Se acopla al cuerpo del niño y gracias a la inteligencia artificial logra interpretar la intención del niño de realizar un movimiento.
“Le aporta fuerza y la estabilidad necesaria que no tienen sus músculos inferiores“
“Le aporta fuerza y la estabilidad necesaria que no tienen sus músculos inferiores”, nos explica Maite Vega directora de tecnología en Nipace.
Con ello los niños pueden mejorar su movilidad y sobre todo rebajar la espasticidad, es decir, la rigidez muscular que les causa la parálisis cerebral. Y no solo a nivel físico, el hecho de poder dar unos pasos genera un relevante beneficio psicológico a los pacientes.
Un diseño español
Todo comenzó hace más de nueve años, con un estudio piloto coordinado por el CSIC, el Hospital La Paz de Madrid, Marsi Bionics y la Fundación Nipace.
“El objetivo era poder adaptar el exoesqueleto pediátrico para niños con parálisis cerebral”, explica Ramón Rebollo, presidente de Nipace. Y finalmente tras un estudio piloto para evaluar su viabilidad, ha conseguido el marcado de la CE.
La solidaridad de la sociedad ha sido imprescindible para llegar hasta aquí. A través de diferentes iniciativas se han conseguido los 150.000 euros necesarios para adquirir este dispositivo.
Cambio drástico para el tratamiento de la parálisis cerebral
El exoesqueleto supone un salto cualitativo en la rehabilitación de los niños con parálisis cerebral. La terapia muscular integral que ofrece, con un diseño para cada paciente, facilita la neurorehabilitación.
“Jugar al futbol o empujar el carro de su hermana“
Además, permite la posición bípeda, algo hasta hora impensable. “Jugar al futbol o empujar el carro de su hermana son alguno de los hitos que han logrado estos pequeños”, cuenta con ilusión Maite Vega.
Una ilusión reflejada en las caras de padres y pacientes que con pequeños pasos como este, logran grandes avances en día a día.