El voto andaluz se desplaza a la derecha: claves del crecimiento electoral del PP, según el CIS

• Los cruces de datos de la encuesta preelectoral del CIS permiten indagar en el perfil del voto ante el 19-J

El presidente del PP andaluz y candidato a la Presidencia de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno.

La encuesta del CIS para las elecciones de Andalucía difundida horas antes de que empezara la campaña apunta a una clara victoria del PP el próximo 19 de junio, con el 35,6% de los votos y una horquilla de escaños (47-49) que dejarían al actual presidente, Juanma Moreno, cerca de la mayoría absoluta. En la estimación de voto del Centro de Investigaciones Sociológicas, la suma de todos los partidos apenas podría empatar con el resultado del PP, que tendría que apoyarse en Vox para formar gobierno.

El PP, segundo en las elecciones de 2018 con un 20,75% de los votos, subiría casi 15 puntos en cuatro años. Sería el partido más votado en las ocho provincias andaluzas, incluida Sevilla, feudo tradicional del PSOE, donde aventajaría a los socialistas en diez puntos y conseguiría ocho de los 18 escaños que se reparten.

El voto conservador también crece por el lado de Vox y pese al desplome de Ciudadanos, la derecha pasaría de los 59 escaños actuales a 65-73. En cambio, el PSOE de Juan Espadas no mejoraría sustancialmente el resultado de Susana Díaz (32-36 escaños es la estimación del CIS, por los 33 diputados actuales) y la fragmentación de las opciones a su izquierda reduciría los 17 escaños que obtuvo Adelante Andalucía a los 11-12 que sumarían las dos formaciones resultantes de su escisión, según el CIS.

¿Cómo ha cambiado Andalucía en cuatro años para producirse este viraje? Al margen de las proyecciones de votos y escaños, la encuesta del CIS, elaborada con más de 7.500 entrevistas telefónicas, permite obtener información detallada del cruce de la intención de voto y otras variables socioeconómicas y políticas de los votantes.

Este es el posicionamiento ideológico de los andaluces antes de las elecciones de 2018, según el CIS. Es una escala de 1 a 10 donde el 1= Izquierda y 10= Derecha. Alguien que se sienta muy de izquierdas se ubicará en el 1-2, mientras que elegirán el 9-10 los más conservadores.

En 2018, la mayoría (52,5%) se ubicaba en posiciones de centro-izquierda (3-5) y el 60% estaban en la mitad izquierda del espectro ideológico. Los votantes de derecha se agrupaban en posiciones no alejadas del centro (6-8).

Esta es la distribución de los votantes por ideología según la encuesta preelectoral del CIS para el 19-J. Se aprecian cambios a simple vista: el principal, el aumento de votantes en posiciones más extremas a izquierda y derecha.

No solo hay variación en los extremos. El centro-izquierda se ha 'vaciado' respecto a 2018 y los votantes que se consideran de centro-derecha y derecha (sobre todo, esta) aumentan. ¿Cómo se refleja en la intención de voto?

Se puede ver en la variable de la intención de voto+simpatía a cada partido según la ubicación ideológica, que sale de las respuestas directas al sondeo del CIS, previa a la 'cocina' de la estimación de voto. Esta es la de la previa a las elecciones de 2018.

Se ve claramente qué partido domina en cada posición. Adelante Andalucía era el preferido de los votantes más a la izquierda, aunque era un electorado disputado con el PSOE. El PP pugnaba con Cs por el centro-derecha y con Vox por la derecha, aunque Vox fue al final mucho más competitivo (obtuvo 12 escaños) de lo que aparentaba aquí.

El panorama cambia radicalmente: el voto se ha desplazado a la derecha. Ciudadanos desaparece y los andaluces de centro-derecha se reparten entre el PP y Vox. El voto a la izquierda se 'desinfla' en general. El PSOE captura parte de la fragmentación de los apoyos a Adelante Andalucía, pero no le sirve para crecer.

Otra manera de ver el trasvase del voto. Según el CIS, el PP multiplicaría sus expectativas electorales a costa de Cs y Vox y el PSOE está lejos de atraer bastantes votantes de centro o de entre quienes no votaron en 2018 como para volver a ser el ganador.

A la luz de estos datos, no es que la política de bloques instalada en España desde hace años se haya desmoronado en Andalucía. Los trasvases de voto entre partidos de izquierda a derecha y viceversa no son significativos: un 12% de votantes del PSOE en 2018 se inclinarían ahora a votar al PP, pero también hay un 7,4% de andaluces que dicen que votaron a Ciudadanos en los últimos comicios que ahora votarían a los socialistas.

Más bien, hay un desplazamiento ideológico subyacente y progresivo de los andaluces, que en los últimos años han virado a la derecha. Después de vivir cinco mayorías absolutas del PSOE -en las últimas décadas solo ha habido cuatro años en los que no ha gobernado el socialismo-, ahora están dispuestos a revalidar al PP en la Junta.

En las diez elecciones autonómicas hasta 2018, la suma de los partidos de izquierda (PSOE, PCE, IU, Partido Andalucista, Podemos, Adelante Andalucía) siempre fue mayoritaria en el Parlamento andaluz. Sin embargo, este bloque fue perdiendo escaños poco a poco hasta que su dominio se rompió hace cuatro años, cuando la suma de los partidos de la derecha (PP, Ciudadanos y Vox) alcanzó 59 diputados, por 50 de la izquierda. Según la estimación del CIS, en estas elecciones la derecha podría sumar en las próximas elecciones entre 65 y 73, por los 43-48 de los partidos de izquierda.

En consecuencia, los andaluces avalan hoy en día la gestión y la figura de su actual presidente, Juanma Moreno. Aunque el 54,5% de los encuestados cree que la situación económica ahora en Andalucía es "igual" o "peor" que hace tres o cuatro años, el 76,3% valora su gestión al frente de la Junta de Andalucía con un cinco sobre diez o más; es decir, tres de cada cuatro le aprueban.

Los encuestados consideran que es el mejor líder (48,4%), con el partido más capacitado para gobernar (43,9%), que mejor defiende los intereses de Andalucía (35,6%) y que inspira más confianza (33,2%). En comparación con el resto de formaciones, los andaluces también creen que el PP es la que mejor representa sus ideas (28,9%), con el PSOE como segunda opción, a 11 puntos de distancia.

Esta valoración se constata en casi todos los perfiles de votantes, según la encuesta preelectoral del CIS, y abunda en la idea del giro a la derecha (en especial, al PP) del electorado andaluz.

A excepción de los votantes que se consideran a sí mismos de clase social baja, todos los demás grupos sociales muestran su disposición a votar y simpatía por el PP por encima del PSOE.

El cambio de preferencias se constata también cuando se atiende al nivel de estudios. Antes de las elecciones de 2018, el PSOE era la opción mayoritaria entre casi todos los electores, salvo aquellos con estudios superiores.

Ahora, ante los comicios del 19-J, el PP es el partido preferido, salvo en el grupo minoritario de personas sin estudios terminados.

Del mismo modo, en 2018 PSOE era el partido al que los votantes de casi todos los grupos de edad estaban dispuestos a votar, según el CIS.

Y, en 2022, según la encuesta preelectoral del CIS, los 'populares' serían los más votados. El 19 de junio sabremos si estas tendencias se plasman en papeletas.