El 12 de enero de 2010 la tierra temblaba en Haití y 22.570 personas perdieron la vida. Comenzaba un año fatídico para el país. (Foto: REUTERS)
Con la tragedia haitiana aún muy presente, la tierra decidió moverse también en Chile. El 27 de febrero un seísmo de magnitud 8,8 sacudía buena parte del país. (Foto: REUTERS)
Tras los terremotos de Haití y Chile, la tragedia llegaba también para China. 589 personas morían tras un seísmo de una magnitud de entre 6,9 y 7,1 en el oeste del país. (FOTO: REUTERS)
Entre julio y septiembre Rusia se vio sumida en una ola de calor que generó una cadena de incendios con más de 7.000 focos diferentes. 56.000 personas perdieron la vida, el país tuvo que vivir en la niebla generada por el fuego y se perdieron más de 600.000 hectáreas de bosques. (FOTO: REUTERS)
También de julio a septiembre, la naturaleza era cruel con Pakistán y las fuertes lluvias dejaron unas feroces inundaciones. La tragedia ha dejado más de 1.700 muertos y un coste para la recuperación estimado en 9.500 millones. (FOTO: REUTERS)