Por Rafael Muñoz
Aplausos para la colección de AA de Amaya Arzuaga. La burgalesa firma su trabajo menos oscuro y canalla con una propuesta colorista y muy femenina. Rojos, amarillos y morados se alían con gris perla y crudos para resaltar en el desfile que ha relegado a los negros, tan apreciados por ella, a las últimas salidas.
Amaya trabaja con ansia pliegues planchados para inventarse volúmenes en cuerpos y faldas. Las mini son más mini que nunca y los shorts, también en talla S, se convierten en una de las piezas estrellas de la colección.
No se olvida de los vestidos patchwork de diferentes texturas y destacan los bodys con aires de los años 50. Punto transparente, algodones con barniz y microtafetán se alegran en tonos arena o mostaza ácido, y destacan los bañadores en crudo y rojo.
Arzuaga hace apología del "woman power" y apuesta por escotes en forma de uve que caen buscando la abertura frontal de la falda. En algunos casos, como en un supersexy vestido rojo, casi llegan a encontrarse.
Esta colección es diferente a la que veremos en la capital francesa el día 30 de septiembre dentro de la semana de la moda. Es la tercera que presenta junto al Sena y ahora lo hace estrenandose como miembro de la Cámara de la Moda de París. Además, en diez días, se lanza a la venta online a nivel internacional. Dice Amaya que lo ve como la salvación del futuro de la moda.