Se nota la evolución de Juana Martín desde sus primeros pasos en Cibeles hasta hoy. Al principio contaba con el cantaor Manuel Lombo para amenizar el desfile pero ahora ha pedido al dj Carlos Jean que pinche en directo para acompañar a la ropa.
La colección tiene aires de los 70 y dice Juana que lleva mucho trabajo a mano, que es casi costura. Destacan las aplicaciones metálicas que homenajean al gran Paco Rabanne. Martín las tiñe de oro y las cose a prendas en blanco para resaltar ese toque Barbarella.
Los tejidos son ricos, con presencia. Hay linos, gazares y sedas naturales. La gama de colores se centra en el blanco con toques negros, y deja que se expresen con fueza azules, naranjas y camel. También otros más fríos que la cordobesa junta para crear escalas de tonos en verde esmeralda, verde agua, azul turquesa, azul cielo, morado puesta de sol y negro. A veces formando un collage sobre la prenda y a veces inundando toda la tela.
Las faldas tienen diferentes largos, y los zapatos cuñas y van abiertos por delante.
Juana muestra orgullosa una chaqueta de seda bordada de pequeñas lentejuelas, también vestidos ligeros que no se ciñen al cuerpo pero marcan la silueta al andar.
SARA COLEMAN
Diseño orgánico. Así define Sara Coleman su nuevo trabajo que refleja la perfección imperfecta de la naturaleza. La diseñadora conjuga tradición con vanguardia y crea piezas elaboradas de forma artesanal con mimbre y cuerda.
Destaca un cuerpo en macramé de hilo metálico que simula las raices voladoras de algunos árboles. También casacas con flecos hechas a mano sobre la modelo, calcetando restos de hilos de las fábricas. Es el reciclaje fashion.
Coleman habla de la conexión que tenemos, y no debemos perder, con nuestro entorno natural. Todos los colores de su colección están vivos y en sintonía unos con otros. Así vemos gris piedra, salmón y amarillo suave que se mezclan caprichosamente como lo hace la madre naturaleza.
Las faldas rozan la rodilla, y los pantalones aprietan el tobillo o son pitillo. Todas las salidas van acompañadas por complementos de Idoia Cuesta que expone su trabajo en París. Artistas que hablan el mismo lenguaje, que gritan por el respeto a la naturaleza y que construyen piezas que nos hacen reflexionar sobre el pasado para perfilar un mañana mejor.
Para concretar esa idea, las modelos caminaban entre árboles metálicos obra del escultor Xurxo Oro. No ha sido un desfile como los otros ya que invita a reflexionar sobre lo que metemos en el armario y sobre lo que tenemos en la cabeza.
¿Qué miramos antes de comprar una prenda? ¿La marca o las características del tejido?