'Porgy and Bess' desde Nueva York
Este sábado, en directo desde el Metropolitan Opera House de Nueva York, podremos escuchar dentro del programa Maestros Cantores, la gran ópera de George Gershwin Porgy & Bess
Esta gran ópera en tres actos del autor de la Rhapsody in blue y Un americano en París cuenta con libreto de su hermano y colaborador, Ira, y de DuBose Heyward, autor de la novela Porgy y de una obra de teatro de igual título, escrita en colaboración con su esposa Dorothy, y estrenada en 1927. Ambas piezas fueron concebidas en un principio como un retrato de la vida cotidiana en un lugar ficticio, Catfish Row, en Charleston, Carolina del Sur.
La obra también había suscitado el interés de Al Jolson, quien había pensado en trabajar con la gran pareja de autores de musicales, Jerome Kern y Oscar Hammerstein II, con él mismo interpretando el papel principal con la cara pintada (como en la película El cantor de jazz), pero el entusiasmo inicial pronto decreció. Para conseguir un sabor más auténtico, los Gershwin acudieron al lugar original para observar los usos y costumbres de la gente local.
El estreno “oficial” tuvo lugar en el Colonial Theatre de Boston, el 30 de septiembre de 1935. A Broadway (que era donde la obra había de haberse creado) llegaría un mes después, en una producción del prestigioso director de cine norteamericano de origen armenio Rouben Mamoulian, quien ya había dirigido las producciones de la obra de teatro y llevaría la ópera a la pantalla en 1959 (con Sidney Poitier y Dorothy Dandridge), pero fue despedido del rodaje y terminó la película y la firmó finalmente, como es sabido, Otto Preminger. Pero esa es otra historia… Se utilizó un reparto formado exclusivamente por cantantes de color, con preparación, claro, en la música clásica, lo que fue una atrevida perspectiva para la época. Para entonces, Gershwin había realizado bastantes cortes para acortar la duración inicial, que era de cuatro horas, y aumentar así su fuerza dramática y teatral.
El músico aportó a su partitura una gran riqueza y variedad de ritmos del blues y del jazz. No en vano, Gershwin la consideraba su mejor obra, que es sin duda una de las más originales del repertorio lírico. Sin embargo, la obra tardó en ser aceptada en los EE. UU. No sería hasta 1976, cuando la produjo la Houston Grand Opera, en un montaje que le dio una nueva popularidad. Ya en 1972, cuando comenzó su mandato en Cleveland, Lorin Maazel había realizado una célebre grabación que incluía toda la música de la ópera. En 1988, Simon Rattle (que aún no había sido nombrado Sir) también la llevó a los estudios tras haberla hecho en Glyndebourne. En ambos casos, el bajo-baritono jamaicano Willard White era Porgy, en una de sus mayores creaciones.
Al Met no llegó hasta 1985, con Grace Bumbry y Simon Estes a la cabeza de un lujoso elenco, y bajo la dirección musical de James Levine, constituyendo un absoluto y rotundo triunfo. Pero, a pesar de su éxito, Porgy & Bess sigue causando controversia, pues algunos piensan que emite una mirada algo tópica sobre la gente que retrata. Hay que decir, sin embargo, que Gershwin logra una perfecta fusión de todos estos elementos heterogéneos, y que hay temas como Summertime que se han convertido en verdaderos clásicos que han traspasado fronteras.
La ópera ha vuelto al escenario neoyorquino casi 30 años después, en una producción ya aplaudida en Londres. Bajo la batuta del californiano David Robertson, que ha sido director principal de la Orquesta Sinfónica de Sidney y anteriormente lo fue de la de St. Louis, y lo ha hecho con un enorme éxito (de hecho, han sido necesarias cuatro funciones suplementarias). El reparto, todo él formado por cantantes afro-americanos, cuenta con el barítono Eric Owens como Porgy, ese tullido de gran corazón al que todos los habitantes del barrio adoran (y que alcanzó una gran repercusión como Alberich en el último “Anillo” wagneriano en este mismo teatro), teniendo a su lado, como la casquivana Bess, a la soprano Angel Blue, quien está haciendo una importante carrera en Europa, como demostró en su Tosca de este verano en el Festival de Aix-en-Provence, al igual que la joven Golda Schultz como Clara -la vecina que tiene a su cargo ese maravilloso Summertime-, junto a cantantes de carrera más consolidada como la soprano Latonia Moore en Serena o la mezzo Denyce Graves en Maria. El tenor Frederick Ballentine será el traficante de drogas Sportin' Life.
Radio Clásica emitió esta nueva producción el 1 de febrero de 2020, en Maestro cantores.