César Ferrer, interpretado por José Ángel Egido
César es un buen hombre con el que Mario lleva trabajando tantos años como lleva de matrimonio, de hecho le conoció en el convite de su boda. César se encargaba de colocar las prendas de abrigo a las mujeres cuando se marchaban, momento que aprovechaba para robarles con auténtica maestría el collar o broche que llevaba en el pelo o en el cuello. Los dedos más rápidos que Mario había visto. Pero eso no fue lo que realmente sedujo a Mario, sino que lo hizo su talante embaucador. Nadie podría sospechar de un señor tan encantador. César quien, al igual que el padre de Mario, lleva toda su vida en activo sin que lo hayan cazado nunca. Ladrón, estafador, falsificador de arte... Es un consumado pintor que es capaz de imitar el estilo de cualquier autor. En su momento sus trabajos de arte le comenzaron a traer cierta fama y por eso dejó de falsificar, por miedo a que lo identificaran. Está convencido de que si aún sigue libre es porque sabe no llamar la atención.
César era un hombre con sentido del humor, capaz de quitarle hierro a cualquier asunto y utilizarlo para salirse con la suya y esto en un trabajo de equipo es fundamental. Sin embargo, con el paso de tiempo transformó su fresco humor en ironía y se ha convertido en un cascarrabias. Siempre le pone pegas a todo y ve rápidamente el lado malo de las cosas. César ha sido siempre un mujeriego insaciable, por eso nunca formó una familia, porque parece que una mujer se le hacía poco. Ahora, sin embargo, se compadece en privado de su soledad y añora a esa pareja que nunca tuvo.
Ha participado en numerosas series televisivas como "Cuenta atrás", "Un paso adelante", "Hospital Central", "7 vidas", "Médico de familia" o "La forja de un rebelde". En cine se le ha podido ver en más de una treintena de títulos como "Cobardes" de José Corbacho y Juan Cruz, "GAL" de Miguel Curtois, "Incautos" de Miguel Bardem o "Abre los ojos" de Alejandro Amenábar. En los escenarios, ha participado en varias obras como "El cartero de Neruda" de José Samano, "Edmond" de María Ruiz o "Un hombre es un hombre" de Frido Solter.