"Al amparo de Leyre" en El escarabajo verde
El Escarabajo Verde se ha desplazado a la sierra de Errando o de Leyre, en Navarra. En la ladera sur, los monjes benedictinos gobiernan un monasterio con más de mil años de historia y muy vinculado a los orígenes del reino de Navarra.
Al amparo de Leyre
Los tiempos han cambiado. Y si en un principio los monjes vivían en la montaña, alejados del mundanal ruido, dedicados a la oración y trabajando el entorno natural para proveerse de viandas, hoy los ingresos del turismo son la clave para el sustento de la comunidad, aunque sea a costa de perder una parte de esa paz tan apreciada.
A pesar de todo, la comunidad benedictina es muy celosa de ese aislamiento, tan necesario para su actividad principal, la oración, y de la vida en clausura. La gentileza del padre Javier, bibliotecario del monasterio, nos permite conocer algunos aspectos de la vida, de la cultura y del espíritu monástico benedictino.
También han cambiado los tiempos para los habitantes de la comarca. La vertiente norte de la sierra de Errando es más agreste y está cubierta por bosques de hayas y vegetación húmeda. En esta vertiente destaca por su belleza la foz de Arbayún. En cambio, al sur de la sierra se extiende un gran valle en el que predomina la vegetación mediterránea. Esta zona, la más poblada, antiguamente basaba su sustento en lo que sacaban de los cultivos y de los pastos, o de lo poco que dejaba el peregrinaje jacobeo que pasaba por Sangüesa, la capital. Sin embargo, hoy esos recursos no bastan para las exigencias de la época actual.
Ahora tienen que buscar alternativas que animen la economía para que los paisanos no abandonen los pueblos. Y ahí juega un papel muy importante una mujer, Gabriela Orduna, agente de desarrollo y alma de la Asociación Baja Montaña. Una asociación cuyos objetivos son el desarrollo de la comarca, pero que es especialmente interesante por lo particular de su creación: nace de abajo a arriba, es decir, de la inquietud de los profesionales y pequeños empresarios de la comarca. Ellos discuten, deciden, organizan¿ y luego, en todo caso, acuden a las instituciones para que les echen una mano. En lugar de lo que es habitual, de arriba abajo, esperar a que las instituciones y/o administraciones den el primer paso.
Un reportaje de Josep Ramon Giménez
Imagen: Nicolás Sánchez
Sonido: Juan Baño
Montaje: Regino Hernández