Hoy, en Iraq...
Lo siento. No he podido evitarlo.
Así era el comienzo de muchas de mis piezas para La2 Noticias en mi primera etapa en el programa, como redactor. El final de la frase y del texto siempre era un reto. Cada día. Era la consigna: darle la vuelta a la información, buscar las claves, obviar lo fácil y, sobre todo, jugar con las imágenes, estudiarlas, dejarlas que fueran ellas las que hablaran. Fue tan sólo una de las muchas cosas que aprendí trabajando en aquella redacción que, además, me enseñó a conocer lo comprometido que uno puede llegar a ser, si uno quiere, a la hora de elaborar una información.
Con todas esas premisas que os he contado llegué a formar parte del equipo de edición tiempo después. Y ya no os cuento cuando empecé a dar la cara en el programa, ¡esa manía mía por adaptar a mi forma de contar la actualidad todas y cada una de las entradillas que tenía que leer a cámara! A veces no daba tiempo. Queríamos hacerlo todo tan bien, dejarlo todo tan cerrado, que mis compañeros en la edición, Emilia Ayala -la jefa, hoy corresponsal en México-, Rafa Lobo, incansable, al pie del cañón de nuevo en La2, Mónica Agudo en el equipo de edición del telediario de la noche de La1, y Marisa Goñi, actualmente, disfrutando de su jubilación, más de una vez tenían que arrastrarme hasta la puerta para que me fuera a maquillar y ¡a veces con la luz roja a punto de encenderse!
Recuerdo con cariño a aquel equipo del que formé parte, pero, especialmente, perdonadme, a Emilia, a Rafa, a Mónica y a Marisa. Porque aquellos tiempos fueron intensos. En ocasiones, demasiado intensos. Pero siempre digo que mi experiencia en aquella La2 será irrepetible. El destino ha querido que estemos separados geográficamente, pero os lo puedo asegurar: trabajando juntos nos hicimos amigos, lo que no siempre es fácil. Y yo creo que tuvo mucho que ver que nos involucráramos como nos involucramos, con nuestros defectos y con nuestras virtudes, si es que tenemos alguna, jajaja.
También será poco probable (aunque vaya ud. a saber) que yo vuelva a salir en pantalla con aquella cara de niño y con aquellos colores, con aquellas camisas y camisetas que me ponía y que molestó a más de uno de nuestros televidentes. Eso sí, creo que nunca nadie dijo nada (o yo no me enteré) de lo del pendiente. Gracias, también, a todos aquellos que nunca lo vieron fuera de lugar.
Así era, así éramos y yo creo que así tratábamos de contaros las cosas. Recuerdos hay muchos y malos, muy pocos. La2 Noticias cumple 15 años y acaba de hacer 3 que yo abandoné el barco. Y si me tengo que quedar con un programa, me quedo con el último, con la despedida, con el estudio vacío.
No me importa confesároslo, lloré mucho aquella noche. Junto a mis compañeros. Y echo de menos el compañerismo de aquellos que, allí, detrás de las cámaras, estuvieron conmigo. ¡Saludos desde Moscú!
* José Carlos Gallardo es corresponsal de TVE en Moscú y desde allí también escribe un blog en RTVE.es. Fue presentador de La 2Noticias en 2006.