Lluís Pasqual dirige "Quitt" de Peter Handke, un análisis sobre la mecánica del capitalismo

• En los años 70, Peter Handke escribió este premonitorio "delirio" capitalista
• Mi reino por un caballo, emitido el lunes, 26 de marzo, en La 2

Mi reino por un caballo - 26/03/12

El teatro, en La 2Arantxa Vela dirige la revista especializada en danza y teatro de La 2 de TVE que lleva por título Mi reino por un caballo, citando al gran maestro William Shakespeare. Mi reino por un caballo es un programa sobre actualidad de las artes escénicas que se emite en La 2 de TVE Arantxa Vela dirige la revista especializada en danza y teatro de La 2 de TVE que lleva por título Mi reino por un caballo, citando al gran maestro William Shakespeare.

Mi reino por un caballoel lunes, a las 20.30, y

Podría hablar de mi encuentro con el director catalán Lluís Pasqual,  de lo que interpreté como timidez, pero eso no deja de ser una impresión personal que no tiene la menor importancia.  Es mejor hablar de Quitt, de Quitt y de la que está cayendo.

“En los años 70 el escritor austríaco Peter Handke escribió este premonitorio "delirio" capitalista“

En los años 70 el escritor austríaco Peter Handke escribió este "delirio" capitalista que ha resultado ser más sorprendentemente premonitorio que el submarino del capitán Nemo.

Muchas veces las personas corrientes hemos fantaseado con las reuniones de poderosos. ¿Cómo hablan de nosotros? ¿Qué importancia le dan a nuestras vidas? ¿Son clasistas? ¿Se creen realmente mejores o son simplemente egoístas?

Esto me recuerda una película de Ken Loach, Agenda oculta, en la que se planteaba que las leyes servían sólo para controlar a los pobres.

“Muchas veces las personas corrientes hemos fantaseado con las reuniones de poderosos. ¿Cómo hablan de nosotros? ¿Qué importancia le dan a nuestras vidas? “

Ésa era su finalidad. Había una doble moral, y la de los ricos les obligaba a poca cosa.

A la vista de la que está cayendo, esa percepción de Loach no resulta muy desajustada.

Aunque, de una forma rara, el delirio de Handke permite una esperanza. Quitt es el mayor depredador de los depredadores. Depreda depredadores y es tan eficaz que se queda solo y sin sentido.

También me viene ahora a la cabeza un documental de animalitos que vi hace mucho. En tiempos muy pasados, parece ser que había unos felinos tan feroces y eficaces que acabaron con toda su comida.

“Aunque, de una forma rara, el delirio de Handke permite una esperanza“

No dejaron viva ni una de "sus" ovejitas, y se murieron de hambre.

Como la depredación de Quitt es humana, Handke nos recuerda que también se puede uno morir de soledad, porque la razón crea monstruos que el corazón entiende.

Y nosotros nos volvemos locos si nos quedamos solos, si solo hablamos con nosotros mismos. Si somos los únicos, no nos soportamos. La salud siempre la encontramos en los demás. Y esto me trae a la memoria las torturas de Guantánamo.

“Handke nos recuerda que también se puede uno morir de soledad“

Me sobrecogió mucho leer que la manera que tenían de hacerles daño a los presos, era evitar que tuvieran estímulos externos. Taponar, clausurar sus sentidos para que sólo se relacionaran con sus pensamientos, para que no escucharan más que su propio eco retumbando en las paredes del cráneo.

Cuando se es el mejor, el mejor entre los mejores, el más alto, el más guapo, el más listo y poderoso, el único, ¿qué hay?

Y ahora me viene a la cabeza una pregunta que hacía Tonino, ¿le recordáis?, a un top model: And after the top, what? Pues esa es la pregunta que plantea Handke: After the top, what?

“Cuando se es el mejor, el mejor entre los mejores, el más alto, el más guapo, el más listo y poderoso, el único, ¿qué hay?“

La gente corriente, como somos corrientes, nunca llegamos al top y siempre está ahí como una zanahoria.

Vivimos nuestra vida mientras esperamos otra cosa, coger la zanahoria, pero a los que alcanzan la zanahoria ¿qué les queda? After the top what?

Posdata: Sólo el lujo es humano – dice, más o menos, Herman Quitt, el millonario, el poderoso Herman Quitt. De lo que se deduce que la producción en masa, las tiendas, restaurantes y bares repletos de productos idénticos, las colas para al ocio y para el negocio, no están hechas para nosotros.

No queda otra que pensar que humillarnos da muchos beneficios, pero no a nosotros.