Migranland, la tierra prometida
- Teatro documento, de Álex Rigola, que nos pone en la piel de los inmigrantes
- Uno de los últimos espectáculos del Festival Temporada Alta de este año
- El Festival ha cerrado con el mayor éxito de público de todas sus ediciones
"Malos tiempos aquellos en los que la gente corriente ha de comportarse como héroes para sobrevivir. Ulises era un semidiós, que, sin embargo, a duras penas sobrevivió a las terribles adversidades y peligros a los que se vio sometido, pero las gentes que llegan hoy a nuestras fronteras tan sólo son personas de carne y hueso, que, sin embargo, viven episodios tan o más dramáticos que los descritos en La Odisea. Soledad, miedo, desesperanza... las migraciones del nuevo milenio que comienza nos recuerdan cada vez más los viejos textos de Homero. Si para sobrevivir se ha de ser nadie, se ha de ser permanentemente invisible, no habrá identidad, ni autoestima, ni integración social. El síndrome de Ulises de Joseba Achotegui.
Éste texto cierra Migranland, el trabajo que Àlex Rigola ha hecho en el Festival Temporada Alta con un grupo de inmigrantes de Salt, un municipio pegado a Girona con una enorme concentración de gentes procedentes nada más y nada menos que de 83 países diferentes. Y es que los relatos se articulan alrededor de la figura de Ulises, porque se pueden establecer muchos paralelismos entre episodios de La Odisea y las historias reales que nos cuentan los protagonistas de Migranland.
Migranland es la tierra prometida. Al público, se le hace subir a un bus-cayuco para llegar ahí. Poniéndose en la piel de un inmigrante, va siguiendo todo un recorrido, por el que va entrando también en las historias personales de cada protagonista. No son inmigrantes “amaestrados”. Durante tres meses han hecho talleres de fotografía, de vídeo, de teatro, con la finalidad de que cada cual encontrara el lenguaje más adecuado para expresarse.
Tampoco es un espectáculo para calmar la mala consciencia occidental, un discurso de charlatanería paternalista como al que nos tienen acostumbrados algunas oenegés. Fácilmente podría serlo, pero no lo es. Rigola ha logrado una comunión de humanidad, que tiene varios vértices de emoción pura. Seguramente ha sido beneficioso para ellos poder dar visibilidad a sus vidas, pero sin ninguna duda quien sale más beneficiado es el público.
Se agradece que el teatro, aparte de entretener o de enriquecernos intelectualmente, nos toque como personas. Historias llenas de dureza, de dolor, de ternura, que han escrito de su puño y letra (en catalán), y que podéis leer aquí traducidos.
Lee los textos que conforman Migranland
Pincha en cada uno de los textos, y podrás descargarlo en PDF y leerlos.
- Lee el poema de Majda Banani
- Lee el poema de Ibrahima Ba
- Lee el texto de Balla Moussa Dieng
- Lee el texto de Ahmed Achouih
- Lee el texto de Sira Kande
- Lee el texto de Joseph Mbappe Koumatobo
- Lee el texto de Ibrahima Sabaly
- Lee el texto de Ibra Sembene Gueye