Comando actualidad - Agarrados a la ciencia
- Personas que necesitan un remedio para seguir con vida
- La ciencia requiere de voluntarios para sus pruebas clínicas
El tiempo corre en su contra. Necesitan ese remedio que pueda salvarles la vida o, simplemente, ayudarles a sobrellevarla con más calidad. Una vacuna que en muchos casos puede fabricar su propio cuerpo. Nuestros investigadores luchan contra todo tipo de obstáculos, sobre todo económicos, para encontrar esos remedios. Pero, además de dinero, la ciencia necesita de personas sanas para realizar sus pruebas. Cáncer, Alzheimer, órganos artificiales... ¿En qué son líderes los investigadores españoles?
Mónica padece cáncer de mama. Se ha prestado a que prueben en ella un fármaco que aún no se comercializa. Asegura, mientras toma la píldora, que es para ella una esperanza: ¿Y si con esta pastilla han encontrado la solución? En el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO) Es uno de los laboratorios de referencia mundiales y nos muestran cómo un fármaco que han desarrollado reduce de manera increíble las células cancerosas. Todo aún de manera experimental.
Voluntarios para los ensayos
Un grupo de veinte jóvenes forman parte de un ensayo clínico. Todos están sanos pero van a tomar un fármaco contra el VIH, el virus que provoca el SIDA. Cada voluntario cobrará unos 500 euros, muchos ya han participado más de tres veces en este tipo de ensayos. Elisa, sin embargo, se presta altruistamente a un ensayo clínico a lo largo de cinco años para estudiar el Alzheimer. Ella no lo sufre, pero cree que así puede ayudar encontrar cura a la enfermedad.
Las terapias avanzadas son la ventana de los nuevos medicamentos. Están basados en las células del propio paciente: las células-madre. María padece diabetes y, de momento, está logrando que no le amputen las piernas. Lo consigue gracias a las células que le extraen de la médula ósea y le inyectan en las arterias. El doctor Suárez nos presenta al paciente a quien salvó el corazón tras un infarto gracias a sus células madre. “Funcionan", asegura, "aunque aún no sabemos cómo”.
Las terapias génicas son muy costosas, aunque los investigadores consideran que es una inversión que ahorraría muchos costes sanitarios en el futuro. Los límites presupuestarios obligan a muchos de nuestros científicos a probar fortuna en el extranjero. Miguel, uno de los jóvenes investigadores más talentosos de España, se marcha a Harvard. Allí ha conseguido un buen contrato y, sobre todo, estabilidad.
Reporteros: Juan Carlos Cuevas, Mónica Hernández, Silvia Sánchez.
Dirección: Raúl García, Daniel Galindo, César P. Gozalo.