Payasos en el hospital, alegría intensiva
- “Hacer sonreír o reír a quien está hospitalizado es sinónimo de alimentar la vida” (Siro López, Mimo)
- “A veces se comparten silencios, risas y lágrimas...es lo más sanador.” (Siro López, Mimo)
- Necesitan que se les reconozca como profesión y se les apoye
- Jueves 7 de mayo a las 23:35 en La 2
Guión: Fátima Hernández
Realizador: Mariano Rodrigo
Imagen: José María Ballano
Sonido: Alberto López
Montaje: María Tafur
Smoke: Chema Giné
Ambientación. José Luis Ayuso
Sonorización: Isabel García Leal
Producción: Ana Pastor y Lourdes Calvo
Ser payaso de hospital es una profesión difícil y poco reconocida. Pero los médicos y las enfermeras que trabajan a su lado reconocen que son parte del equipo sanitario, que con ellos se consigue cambiar el chip hasta en los momentos de angustia y abrir un espacio para la alegría y el buen humor. Los anestesiólogos aseguran que al disminuir el estrés se consigue rebajar la cantidad de anestesia que se necesita en una intervención quirúrgica. Además la recuperación será menos dolorosa y más rápida.
Es la risa como terapia, pero no solo ésta, porque la principal labor del payaso es la de acompañar, incluso en los momentos de tristeza o despedida, desde el silencio y el respeto.
El juego, la principal herramienta del clown en el hospital
Llevan al paciente al mundo de los juegos para aliviar su dolor. Con su nariz roja, convocan al niño que habita en el otro, aunque sea un adulto. Y dicen en voz alta cosas que provocan ataques de risa. Son torpes. Se equivocan y chocan contra paredes y puertas.
Con la risa, con la música, con el mimo, con la mirada, con el amor, buscan la parte sana
Recuperar la parte que quiere seguir viviendo
Alivian el sufrimiento físico y emocional en los pasillos, quirófanos, salas de reanimación, habitaciones…por todos los rincones del hospital.
Según Sergi Claramunt, Director Artístico y Fundador de Payasospital, el objetivo del payaso de hospital “es meterse con el personaje y mirar los ojos del niño, intentando recuperar la parte sana, la parte que quiere seguir viviendo”. A través de la improvisación consiguen transformar una habitación de hospital en una montaña, una nave espacial, un barco en alta mar, un concurso de música o una granja.
Los payasos forman parte del equipo sanitario
En España los payasos empezaron a trabajar en los hospitales como clown terapéuticos hace veinte años. Los pioneros fueron Sonrisa Medica en Baleares. Luego siguió Pupaclown en Murcia y Payasospital en Valencia. Hoy están en muchas comunidades autónomas haciendo una importante labor, desconocida para la mayor parte de la población.
Los que si valoran su intervención en la Sanidad son los médicos, enfermeros, celadores, maestros, todo el personal que trabaja en los hospitales, junto a ellos, porque cuando un payaso entra en un hospital la enfermedad y el dolor pierden puntos.
La formación del payaso de hospital
La Universidad de Lleida ha sido la primera en estudiar una asignatura sobre el arte del clown hospitalario en la carrera de Medicina. Son los primeros pasos. La realidad es que las asociaciones de payasos de hospital dedican parte de su esfuerzo a la formación, según las necesidades que se les han presentado durante estos años.
El director artístico del Centro Escénico Pupaclown de Murcia, Juan Pedro Romera lo explica así: “Un clown que está en el hospital tiene que estar formado en todas las artes del clown, que tiene que ver con la música, con la magia, con la improvisación, pero también tiene que saber de antropología de la enfermedad, tiene que saber de psicología infantil, tiene que conocer determinados términos médicos, tiene que saber cosas relacionadas con la enfermería. Tiene que tener preparación de duelo, tiene que tener preparación interior, tiene que trabajarse mucho, saber lo que es la enfermedad, que un niño, una niña se puede morir, saber que significa la pérdida, la despedida para cuando están los padres, las madres allí, saber como ha de intervenir.”
El trabajo en equipo y la protección al vulnerable
Los payasos intervienen no solo con niños, también con adultos y personas afectadas por Daño Cerebral. No sólo con enfermedades físicas también con trastornos mentales, y está probado que se consigue mejorar el tratamiento.
Un equipo de Crónicas ha acompañado unos días a cuatro asociaciones de payasos de hospital. La fórmula secreta queda reflejada en estas dos declaraciones que les ofrecemos. La de un oncólogo y la de la maestra del Hospital Virgen de la Arrixaca de Murcia.