Dania abandona "el ruedo" y deja en jaque al Comando Sur
- Ángel hace una buena faena y se gana la ovación del jurado
- Las gemelas también tienen una buena tarde y se lucen en su tierra
MasterChef celebró las fiestas de San Isidro en el último programa, en el que los aspirantes cocinaron rabo de toro. Dania tuvo una mala tarde y fue la aspirante que abandonó la "plaza" de MasterChef.
"Tengo claro que quiero dedicarme a la cocina y MasterChef ha sido un gran aprendizaje a nivel profesional y personal", dijo la sevillana, que estaba triste al perder su sueño.
Con la marcha de Dania, el Comando Sur se queda cojo. Las gemelas, Raquel y Virginia, y Daniel despidieron a su paisana entre lágrimas y palmas desde el 'tendido". Y casi sin voz por la emoción le cantaban: "...algo se muere en el alma, cuando un amigo se va...".
Ángel, en cambio, salió por la puerta grande gracias a su rabo... ¡de toro! El valenciano elaboró una receta exquisita con este producto, llena de sabor y tradición. Ángel consiguió la ovación del respetable y su rabo dio mucho que hablar.
Reichel también triunfó en el ruedo con su plato de rabo de toro aunque no lo había cocinado antes. La aspirante reconoce que se encuentra baja de ánimo y con rabia porque a pesar de hacer las cosas bien no obtienen resultado. "No he perdido la ilusión en MasterChef, pero es verdad que a veces no la encuentro", señala la ermitaña.
Sin embargo, Natalia afirma que Reichel miente, ya que sí ha cocinado antes rabo de toro y además no le falta confianza. La rusa señala que a su compañera le hace falta humildad y se lleva mal con bastantes aspirantes.
Raquel y Virginia fueron otras de las vencedoras de la noche. La Prueba por equipos tuvo lugar en Jerez de la Frontera y las gemelas demostraron que conocían el producto, trabajaron organizadas y pusieron toda la carne en el asador.. en este caso, el 'pescaito' y marisco. Al ganar el reto, se emocionaron: "Es difícil ser profeta en tu tierra y nosotros hoy lo hemos conseguido".
Quien también trabajó con pasión y alma fue José Luis. Cada semana, el de Albacete da lo mejor de sí y es el que más ha evolucionado en lo que va de competición. Eso sí, aún le falta por pulir la presentación y los detalles. En la prueba inicial trabajó esposado a Virginia y no controló su nervio y el cocinado fue un caos. Un error que enmendó con creces a lo largo del programa. Por las esposas y su manía de atarlo todo se ganó el apodo de José Luis Grey.
La pareja que mejor trabajó esposada fue la compuesta por Raquel y Pablo, que elaboraron una receta de pollo con cuscús inspirada en los sabores de Marruecos. Esto le valió el pin de la inmunidad al gallego, ya que llevó la voz cantante en el cocinado.