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La noche temática aborda el tema de 'Ántrax, la bacteria del bioterrorismo'

  • El ántrax es una bacteria que puede llegar a ser extremadamente mortífera y potencialmente muy eficaz para ser empleada como arma biológica de destrucción masiva.
  • Durante la II Guerra Mundial los aliados llegaron a producir grandes cantidades de ántrax para fabricar bombas ante el temor de un ataque biológico de Alemania.
  • El ántrax también ha sido empleado para cometer ataques terroristas como el ocurrido en el año 2001 en Estados Unidos. Cartas que contenían ántrax en su interior enviadas para matar.

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La noche temática - 'Ántrax, la bacteria del bioterrorismo' - Avance

La Noche Temática, investiga el uso del ántrax como arma biológica de destrucción masiva.

“Proyecto N” (+12)

Documental canadiense del año 2008 con una duración de 53 minutos. Está dirigido por Yves Bernard y producido por Telimagin Productions inc.

Durante la II Guerra Mundial eran tres los grandes secretos: la investigación sobre la bomba atómica, la decodificación de la máquina de cifrado alemana, y el tercero, la creación de armas de guerra biológicas.

En 1943 en Grosse-Ile, una pequeña isla de Canadá, los científicos llegaron a producir en secreto, para los aliados, setenta mil millones de dosis letales de ántrax. Había suficiente ántrax como para aniquilar treinta veces la población mundial de la época. Frederick Banting, premio novel de medicina por su participación en el descubrimiento de la insulina, se convertirá en una de las figuras más influyentes a la hora de establecer programas de armas biológicas para los aliados.

Había suficiente ántrax como para aniquilar treinta veces la población mundial de la época.

Banting decía estar convencido de que la Alemania nazi se estaba preparando para iniciar una guerra biológica sin precedentes. A partir de mil novecientos treinta y nueve, mantiene una serie de encuentros con oficiales británicos. Trata de convencerles de que deben dotarse de armamento biológico. Pero la primera operación de naturaleza ofensiva no se plantea hasta mil novecientos cuarenta y dos: “Operación Vegetariana”.

Objetivo: usar ántrax para destruir el ganado del enemigo. El arma biológica que iba a usarse eran esporas de ántrax. En un principio, el objetivo es meter esas esporas en cápsulas grandes llamadas pasteles, que están destinadas al ganado, y la idea es dejarlas caer. La idea consistía en dejarlas caer desde el cielo sobre los pastos del ganado. Inglaterra produciría cinco millones de pasteles contaminados.

Garrafas con bacterias de Antrax

Garrafas con bacterias de Antrax

Pero el proyecto no llegará muy lejos; el ejército duda de su eficacia sobre el terreno. Los militares buscan un arma que afecte más directamente a los humanos, para frenar al ejército alemán. En julio de mil novecientos cuarenta y dos, se cierra el acuerdo secreto entre Estados Unidos y Canadá, en el Castillo Frontenac, en la ciudad de Quebec. Los estadounidenses asumen tres cuartas partes de los gastos, y colocarán en el lugar a los mejores investigadores. Grosse Ile se convertirá por tanto oficialmente en el “Centro de Control de Enfermedades de Guerra”, una de las ubicaciones más secretas de la Segunda Guerra Mundial.

trabajadores de Grosse ile enfermos

trabajadores de Grosse ile enfermos

El llamado “Proyecto N” sobre ántrax sólo duraría dos años. Sin embargo, es una historia que todavía tiene puntos oscuros. Muchos de los archivos están incompletos, se han borrado, o aún peor: han desaparecido. El secretismo que rodeaba esos experimentos todavía suscita grandes interrogantes.

“Expediente Ántrax” (+12)

Documental estadounidense del año 2011 con una duración de 55 minutos. Está dirigido por Michael Kirk y producido por PBS-Frontline.

Otoño de 2001, tras los ataques del 11-S, sobres que contienen esporas de ántrax son enviados a varios medios de comunicación y oficinas de senadores en Estados Unidos. El resultado: cinco personas muertas, muchos infectados, y la nación aterrorizada.

El FBI comienza una compleja investigación en la que después de siete años encausan a Bruce Ivins,  un prestigioso investigador en biodefensa, como el único autor de los ataques. La polémica sobre la fiabilidad de las investigaciones y los métodos llevados a cabo por el FBI aún sigue viva y pone en duda que Ivins fuese realmente el culpable.

¿Expediente Ántrax¿

¿Expediente Ántrax¿

El FBI descubrió que Ivins había pasado mucho tiempo a solas y de noche en el laboratorio. Sus horas de laboratorio se disparaban en agosto, y después en septiembre y octubre de 2001. Nunca antes ni nunca después había pasado tantas noches ni tantos fines de semana en el laboratorio. Aquello era inusual. La gráfica del FBI se basaba en las horas nocturnas en un solo laboratorio. Pero otras investigaciones muestran que no era raro que Ivins hiciera horas extra en otros laboratorios y oficinas dentro del complejo del ejército. Y en la época en que el FBI lo consideraba sospechoso, Ivins en realidad llevaba a cabo varios experimentos urgentes en el laboratorio. Y muchos de los colegas de Ivins dicen que ni con tantas horas en el laboratorio le habría dado tiempo a fabricar el ántrax.

Los colegas de Ivins también insistieron en que habría sido imposible que produjera el polvo sin que nadie se diera cuenta. Y el FBI no encontró ninguna prueba material, esporas o restos de ADN de ántrax, en el instrumental que creían que Ivins había utilizado para hacer el polvo.

laboratorio

laboratorio

Pero ¿quién era Bruce Ivins? Parecía ser un profesional consumado. La investigación recibió un nombre oficial del FBI: “Amerithrax”. Se convirtió en uno de los casos más complejos del FBI; miles de interrogatorios, docenas de agentes, millones de dólares.