Investigación: las consecuencias del cambio climático
- Los efectos del cambio climático en la geografía española cada vez son más frecuentes y extremos.
- Las riadas que se produjeron como consecuencia de la DANA durante el mes de septiembre en Los Alcázares (Murcia) contrasta con la sequía que sufren pantanos como el de El Burguillo de Ávila o el de Entrepeñas en Guadalajara
Debido a la inestabilidad política de Chile como país anfitrión de la Cumbre del Clima (COP25), Madrid se ha ofrecido para acoger este evento en tiempo record. El acto dará comienzo hoy, 2 de diciembre de 2019, y reúne a más de 50 jefes de Estado y Gobierno de diferentes países para desarrollar y afianzar el Acuerdo de París (2015) referente a la reducción de emisiones.
La capital española se convierte así en el escaparate de la lucha contra el cambio climático, en el que estarán ausentes los representantes de algunos de los países que más contaminan, como EEUU y China, principales contribuyentes de los gases de efecto invernadero.
Denominamos cambio climático a la vacación global del clima en la tierra, debido a causas naturales y a la acción del hombre. Nuestro consumo energético y el modo de producción está generando una alteración global del clima, lo que supone importantes impactos sobre nuestro entorno y también en los sistemas socioeconómicos de todas las regiones del mundo.
Las consecuencias evidentes de estos cambios son el derretimiento de los casquetes polares y la crecida del nivel de mar. En algunas regiones las inundaciones son cada vez más comunes, y en otras son frecuentes las olas de calor y la sequía extrema. Una situación, que, de no ponerse remedio, podría intensificarse en las próximas décadas.
Los efectos en la geografía española
Debido a toda la contaminación que se está generando con la emisión de gases como el CO2 hemos analizado algunas de las consecuencias que está teniendo el cambio climático en nuestro país. Uno de los problemas más graves que encontramos, como hemos referenciado, son las lluvias torrenciales y destructivas en las zonas más secas y por el contrario la sequía en zonas en las que los pantanos se encuentran bajo mínimo.
Ante esta situación los expertos piden adaptarse a los fenómenos climatológicos extremos que llevamos viviendo durante los últimos años, para evitar en la medida de lo posible los estragos que dejan a su paso. Uno de los lugares donde las consecuencias fueron catastróficas durante el 2019 se sitúa en Los Alcázares, Murcia, donde la DANA o gota fría provocó numerosos daños valorados en más de 100 millones durante el pasado mes de septiembre. Los vecinos de la localidad tienen miedo de que se repitan las riadas, porque muchos negocios tuvieron que cerrar y los efectos sobre el campo fueron devastadores.
En el pantano de El Burguillo, en Ávila, ocurre todo lo contrario. Su capacidad está al 12% cuando en estas fechas tendría que situarse por encima del 50, lo que preocupa a los negocios que se encuentran cerca de la zona. Una situación que se repite también en el pantano de Entrepeñas, Guadalajara, cuya capacidad está por debajo del 15%. En el embalse de Buendía, el nivel es tan bajo que incluso deja al descubierto las ruinas del antiguo pueblo balneario de la Isabela, construido bajo el mandato de Fernando VII a su esposa.
Los expertos creen que estos episodios serán cada vez más extremos y frecuentes, como consecuencia del calentamiento del Ártico y de los mares y océanos. En nuestro caso la subida de temperatura del mediterráneo, es la que está provocando estas situaciones en Los Alcázares y en toda la costa valenciana.