Luis nos cuenta de primera mano su viaje a Dinamarca en el blog de Españoles en el mundo.
Como si el mismísimo Hans Christian Andersen me estuviera contando un cuento al oído, yo me imagino frente a la famosísima estatua de la Sirenita. Poco a poco se me despertando el gusanillo...
Si alguien piensa que los daneses son gente fría es porque no ha vivido el carnaval de Aalborg con Jesús, un madrileño que se marchó a Dinamarca 'por las rubias'. Aalborg es la cuarta ciudad más importante del país y su carnaval es el más multitudinario del norte de Europa. Una locura divertidísima.
Descubrir el centro de Copenhague paseando con un tuno de Almería da un punto de vista completamente diferente. Ángel nos enseña una ciudad llena de vida: terrazas repletas de gente, música en directo en la calle... Nada que ver con lo que imaginábamos de Dinamarca.
Consigue que nos sintamos Hamlet por un día. Él nos guía hasta el majestuoso castillo de Kromborg, donde Shakespeare se inspiró para escribir su obra. Visitar el restaurante de este madrileño/asturiano también es una delicia. Es como entrar en un museo.
Esta joven de Burgos es la sirenita española. Se enamoró profundamente de un danés por el que lo dejó todo en España. Ella nos muestra la famosísima estatua del personaje de Hans Christian Andersen. También la ciudad hippie de Christiania o el mítico parque de atracciones Tívoli.
Nadie mejor que esta joven arquitecta técnica para conocer la nueva arquitectura danesa. La ópera o la biblioteca nacional, conocida como el Diamante Negro, enamoraron tanto a esta madrileña como Soren, un joven danés que es músico de jazz. Por él se quedó en Dinamarca.
¿Se imaginan llevar a sus hijos a una guardería en la que los niños pasan el día al aire libre, incluso cuando nieva? Julio, un granadino enamorado de una danesa, nos demuestra que es posible. Y muy saludable. También nos sumergimos con él en el mundo vikingo.