El equipo del programa tiene la oportunidad de conocer las entrañas de una de las urbes mas pobladas del mundo con 7 de los 2000 españoles que viven allí. A través de sus ojos descubrimos la villa de los rascacielos sin numero cuatro, por aquello de las supersticiones, del tofu y del karaoke. Con ellos entendemos que el pueblo chino es uno de los más hospitalarios, curioso y amable del planeta.
Lucía Mbomío inauguraCON PASAPORTE Y A LO LOCO, el blog de los reporteros de 'Españoles en el Mundo'.
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Sara es la razón que llevó a Ion a Shanghai. Emprendieron esta aventura porque ella es traductora e intérprete y quería mejorar el nivel de chino que creía tener.
Economista de profesión, este madrileño se fue por amor a Shangai hace menos de un año y, tan pronto como pueda se casará con Wei Li, embarazada de tres meses.
Colaborador activo de la casa española en la ciudad, pronto empezará a trabajar como responsable de relaciones con América Latina, España y Portugal en una empresa china. Con él, los espectadores podrán ver los fuegos artificiales de la noche de Año Nuevo.
Sevillano, es un empresario que, con 23 años, participó en la creación de Arrakis, el servidor de internet de éxito español. Germán, que fue vicepresidente de la asociación de jóvenes empresarios andaluces, decidió cambiar de aires porque quería aprender de nuevo y descubrir las reglas del mercado en otro sitio. Con él, visitaremos su oficina, el templo del Buda de Jade, una estación de trenes, un restaurante español y un local de masajes.
Ion es vasco. Llegó hace tres años a Shanghai con su pareja Sara, a la que sólo conocía desde hacía 5 meses. Ion tiene una taberna vasca en la que ella colabora.
Cristina, de Madrid, vive en Shanghai desde hace seis meses, tras vivir el año anterior en Pekín. Esta socióloga trabajaba en España con inmigración china, razón por la que quiso viajar para conocer de cerca esa cultura y aprender el idioma. Le gusta mucho callejear y descubrir la insólita china. Perderse por la calles con su moto y preguntando a los chinos de la calle es como aprende los entresijos de esa cultura. Con ella visitamos los hutons, barrios de casitas bajas, tradicionales, y un karaoke.
es una empresaria asturiana que, tras hacer un máster en Estados Unidos, intentó junto a su marido montar una empresa de energía renovable. Como entonces, hace ya tres años y medio, no tenían ninguna atadura, cogieron la maleta y partieron rumbo a oriente. Son padres de Ana, una niña que, con solo dos meses y medio, ya estaba en Shangai. Verónica cuenta que no es fácil criar allí a un bebé, aunque tiene la ayuda de una niñera que le está enseñando chino.
Alfons es catalán. Se fue un año a Shanghai a terminar su licenciatura en Administración y Dirección de Empresas. Le gustó tanto el sitio que decidió quedarse un año más estudiando el idioma. Ahora está becado por el Estado chino, y como otros extranjeros vive en la residencia de estudiantes compartiendo habitación con otro chico, un coreano. Nos enseña la universidad y su residencia. Está ubicada en una zona muy poco turística de casas tradicionales y parque gigantes en los que la gente hace Thai Chi
Risas, confusiones, pérdidas de memoria. Algunas de las imágenes que nos guardamos en la recámara