José Luis es un madrileño castizo y buscavidas de 45 años, que lleva desde los 13 sabiendo lo que cuesta llevar a casa un jornal a fin de mes. La situación de su familia no le permitió mucha más escuela que la calle, pero eso no le ha impedido salir toda la vida adelante. Camarero, camionero, metido a constructor en los peores tiempos de la crisis y últimamente inmobiliario, José Luis ha ido cambiando de gremio con la única pretensión de salir adelante y dar un futuro a sus dos hijos.