El 70 por ciento de los edificios asturianos no son eficientes energéticamente. El dato se desprende de las certificaciones que está tramitando la administración y que son obligatorias para vender o alquilar una vivienda.
Desde mayo de 2013, cualquier piso que se venda o alquile debe contar un certificado de eficiencia energética. Lo dice la ley. Desde esa fecha, la administración ha recibido 28.000 solicitudes y ha respondido a poco más de 9.000, de las que solo una pequeña parte son de nueva construcción. Hay 7 categorías, donde la A indica la mayor eficiencia y la G la menor. Pues de las viviendas ya certificadas en ASturias, solo un 5 por ciento obtuvieron las tres primeras categorías.
Desde la federación estatal del Metal de UGT piden al gobierno central que antes del verano se haga pública la nueva subasta de energía y que ésta no se negocie anualmente sino que sea válida para dos o tres años. Algo que permitiría a las empresas planificar las inversiones.